LAYFRONS

Capítulo 9

seguimos una hora en la trayectoria, nos avecinamos a Monterrey nuestro destino, en el camino solo hemos encontrado a algunas personar que caminan fijamente hasta pareciera que no parpadean la mirada perdida en el horizonte no llevan provisiones para el camino solo siguen caminando, hemos tratado de hablarles pero pareciera que no escuchan ni se oponen a nuestros gritos de euforia solo continúan su camino, sus ojos se han convertido en cristalinos con las pupilas dilatadas sus ojos rojos que piden lubricación pero estos no parpadean, pasamos a recargar el tanque, todo está abandonado, nadie al servicio, los automóviles abiertos dejando sus cosas materiales atrás siguiendo cada paso sin emoción ni rastro de sentido en su rostro.

-bajaremos a comer algo- detiene el auto en frente de un autoservicio veinticuatro horas, siento mis ojos pesados necesito una siesta, no he dormido ni quiero hacerlo, no podre siquiera conciliar el sueño abrumador

-¿Qué crees que esté pasando?- pregunto arqueando las cejas –esto no me gusta para ser sincera-

-esto pasaría en algún momento, mi padre dijo que lo lograrían-toma una respiración que suena más como un bufido

-¿Qué cosa?, no entiendo nada- digo mordiendo un poco de pan tostado de un paquete

-pues siempre han controlado a la sociedad buscaban liberar de los indeseados algo rápido, sutil, un movimiento mundial de hace años, mi padre se opuso al enterarse como comandante que era necesitaban de su ayuda para estrategias militares, al poco tiempo de esto falleció- dice con tono de desaprobación y dolor en cada palabra desvía su mirada que juraría que tenía lágrimas en los ojos- pero lo que han hecho no funcionara, y crearan algo realmente monstruoso e incontrolable , crearon su propia perdición-

-- esto es malo -señalando hacia fuera, ha pasado un helicóptero encima de aquí con dirección al norte a donde nos dirigimos

- agarra lo más indispensable, tenemos que apresurarnos- a su orden meto agua, un botiquín que encontré en una repisa, tomo lo más que puedo y salimos de la tienda, subimos al auto ahora con más velocidad

-deberías dormir mientras puedas- asiento recuesto mi cabeza a la ventanilla mis ojos cada vez se hacen más pesados cada vez más hasta quedarme profundamente dormida.

Sueño que estoy en casa de pronto mi padre entra por la puerta veo las hojas que deja en la cama con cara de horror imágenes de algo sobrenatural no sé qué sea pero en el encabezado leo FX12 efecto secundario experimento uno, hombre de mediana edad, nacionalidad árabe, no puedo creer lo que veo no puede ser humano es más alto de dos metros su piel es grisosa con perforaciones en sus extremidades es todo calvo monstruoso, los cuencos de los ojos se han cerrado solo tiene los orificios de donde se supone debe estar la nariz su boca tampoco está en su estómago hay una gran abertura asquerosa que segrega sustancia azulesca y mucosidad excesiva, en un brazo se ha ensanchado como si fueran dos troncos unidos en el mismo lugar siento como me escurre el sudor retrocedo para dejar de ver las imágenes de los papeles de la cama, tropiezo con algo caigo hacia atrás se abre la puerta solo un poco y después se estremece todo la luz se ha ido escucho gritos a lo lejos, ¡mis padres! Pienso, bajo las escaleras pero enfrente de la puesta hay algo gigantesco sosteniendo del cuello a mi madre ¡nooo! Trato de gritar pero mi voz no se oye , suelta a mi madre y voltea hacia mi viendo algo brillar en su interior trato de correr donde está mi madre en el suelo pero me detiene antes de que pueda intentar escapar tomando mi brazo apretándolo con fuerza que siento que quema como la lava ardiente.

-¡despierta!- me sacude del brazo Fermin con los ojos ensanchados-debemos bajar a ver que es lo que pasa, mira- me dice señalando hacia la agrupación de personas de enfrente

Bajamos del auto tratando de no hacer ruido nos unimos a la multitud imitando a los que aún están llegando, todos con mirada perdida y piel palida.se forman en líneas donde pasan por un detector y les colocan un código en la muñeca derecha, nunca sabía que existiera un campo militar aquí, esta secado con grandes mallas de alambres que dan la impresión de que están electrificadas, no quiero corroborarlo.

Nos quedamos móviles ahí para observar lo que está pasando todos son empujados a una fila continua donde avanzan a su destino, siguen llegando más personas cuando en medio de las personas veo a Esteban junto a su hermana Sara me escapo para poder hablarle.

-Sara ¿Qué pasa?- le digo tomándola del brazo aunque mi agarradura es fuerte no muestra emoción alguna-vámonos –la jalo tomando a su hermano Esteban también, los jalo contra su voluntad haciendo obstrucción a la fila, veo a lo lejos nos hombres altos musculosos que se aproximan

-hey- gritan chocando con la gente a su camino avanzando a grandes zanjadas, me toma del brazo Fermin jalándome a la orilla

-nos han descubierto, vámonos-mirándome a los ojos y cada vez más cerca se aproxima el gorila (bueno así lo he nombrado),

-pero no podemos dejarlos a ellos- digo señalando a Esteban y a Sara

- lo siento pero solo complicaran las cosas-me dice agarrándome fuerte marcando sus manos en mi piel.

- no me iré sin ellos- lo desafío con la mirada aunque sé que se aproxima cada vez mas

-oh rayos, vámonos ahora, tu ganas –corremos hasta donde está el coche llevándome jalando a Sara y Fermin a Esteban, volteo para ver si nos siguen pero por mala suerte no solo es uno sino siete que ahora nos siguen. Arranca el coche aunque vamos a una velocidad alta aun nos siguen cada quien en motos los siete gorilones..

-en la que nos metimos- digo tratando de calmarlo pero su cabeza solo la sacude en negación.

-¿aún nos siguen?- pregunta veo por el espejo, pero no hay señales de ellos por ningún lado

-creo que los hemos perdido-digo un poco más calmada aunque me están comiendo los nervios y las dudas de lo que estaba sucediendo y los chicos aún siguen con mirada perdida