El comienzo

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Kōri Fujimoto

Si, ese es mi nombre, soy una estudiante del instituto Nekoma. Vivo con mis padres y mis dos hermanos mayores, mi vida era muy común más bien sigue siéndolo solo que ahora tengo una razón más para ser feliz.

El despertador sonó, eran las 5:30, desperté sin ningún problema y apague el despertador, tome mi ropa y me fui a bañar, dure más o menos 30 minutos. Me seque y termine poniéndome el uniforme lo que era la camisa blanca y la falda para después bajar a desayunar, mi madre siempre tenía el desayuno listo desde muy temprano. Esta vez el desayuno consistía en huevo con tocino, pude escuchar la puerta del baño abrirse, voy a la preparatoria con uno de mis hermanos, Albert, él era muy alegre y muy sociable sus amigos no podían ser contados ya que no había ninguno del instinto que no supiera de él.

Al terminar de desayunar, lave mi plato y fui al baño de abajo donde me lave los dientes, volví a subir a mi habitación para terminar de vestirme, el ligero suéter café y las medias de color negro que me llegaban por arriba de las rodillas mientras que la falda si era algo corta, me coloqué los zapatos negros, me peine y coloque un poco de maquillaje. Me coloqué un collar que era una llave dorada y una pulsera que significaba mucho para mí ya que era un lazo de amistad.

Tomé mi mochila y salí de casa despidiéndome de Albert quien se encontraba desayunando. Yo no voy al instituto sola, siempre voy con mi "vecina " Shinju, ella está conmigo desde secundaria y vive solo a una cuadra de la mía, me quede esperando debajo de la sombra de un local, cuando pude verla a ella en cuanto cruzamos miradas dimos una sonrisa,

-¿Me tarde?- Me preguntó ella, Shinju es algo llenita, su cabello es negro y largo que suele agarrarlo con una liga , sus ojos son grandes y llamativos, tiene una gran sonrisa resplandeciente y es linda aún si es algo llenita ella es linda, su falda es demasiado larga a comparación de las demás, también utiliza calcetas largas. -

-Para nada, acabo de llegar, será mejor irnos Karin nos espera-

Ambas partimos, mientras caminábamos gritábamos y hacíamos relajo algo no muy común entre los japoneses pero juntas realmente no nos paraba la boca. Karin era otra amiga nuestra qué iba en la misma preparatoria, Karin era más callada y relajada a comparación de nosotras.

-¿trajiste las hojas tamaño tabloide?- Le pregunte a Shinju, ambas estábamos el el club de arte, éramos buenas dibujando aún que siempre digo que ella es mejor en ese aspecto, pude ver como ella se quedó quieta y dio un sonoro grito de desesperación a lo que yo me reí a carcajadas - Yo me las quede la vez pasada - le dije para calmarla aún que si era verdad, pude sentir un ligero golpe de ella regañándome por asustarla, así estuvimos hasta cruzar el puente donde nos esperaba Karin, ella era de cabello claro y una piel blanca muy bonita, siempre mantiene un rostro inexpresivo pero suele sonreír cuando nosotras estábamos con ella, en cuanto la vi le di un abrazo que duró pocos segundos para después seguir caminando todas juntas.

Nosotras somos 4 amigas, Lakeisha no iba al mismo instituto que nosotras sin embargo los viernes al salir de clases nos reuníamos todas a comer o algo por el estilo. Lakeisha es la más alta de nosotras, su piel es algo morena a comparación de las demás, tiene una figura muy llamativa sin embargo es una chica muy respetuosa, su cabello es corto y castaño.

Nos conocimos todas en secundaria, yo vivía en otra ciudad hasta que mi padre tuvo una mejor oportunidad de trabajo aquí en Tokio, cuando entre a secundaria no conocía a nadie pero el primer día Lakeisha me pregunto si tenía un lapicero que le prestara y desde ahí comenzamos a ser muy unidas, después conocimos a Shinju y Karin, Shinju era molestada por ser algo llenita mientras que Karin no sabia como defenderla aún que se notaba que trataba, fue ahí cuando entramos y las defendimos desde ese día nos volvimos cuatro unidad amigas, lamentablemente nos separamos al estar en diferente preparatoria pero nuestra amistad puede más.

Llegamos a la preparatoria, entramos a nuestra aula y tomamos nuestros lugares, en cuanto me senté escribí un mensaje para un amigo de infancia de mi antigua ciudad "Espero que te vaya muy bien hoy " fue el mensaje que recibí, no pude evitar el sonreír algo que noto Shinju la cual comenzó a molestarme

-Viste el mensaje de tu esposo -

La escuche decir a lo que me sonroje y negué

-Claro que no -

Tobio era mi amigo de infancia, cuando éramos niños prometimos casarnos al crecer algo que bueno era cosa de niños que no comprendían nada.

-Pero bien que sonríes-

-Cállate!!-

-Cállate tu!!-

Karin comenzó a reír, Shinju y yo también por lo que sucedía pude sentir la mirada de nuestros compañeros. El maestro entro y guardamos silencio.

Después de clases Shinju y yo fuimos al club de dibujo, donde la líder nos dijo que buscáramos inspiración, decidimos ir juntas a pasear en busca de algo que nos llamará la atención, escuche ruido en el gimnasio, era el club de voleibol, le dije a Shinju que entráramos ya que me recordó a mi amigo de infancia, también a un ex amor, Shinju volteo para decirme

-Tu amado "amigo" -

Se refería a Tobio, iba a responderle pero en eso una pelota impactó contra ella justo en el rostro haciéndola retroceder.

Un chico de cabello bicolor se acercó para disculparse.

-¿que te pasa?!!!

Grito Shinju toda enojada, yo apenas y podía entender lo que sucedía.

-Lo siento no fue mi....

Lo interrumpimos con un gran grito.

-Arrodíllate!!

Todos los chicos del club voltearon y se acercó uno de cabello negro, al verlo quede embobada, era hermoso, su cabello negro, su mirada, todo de él. El rubio teñido se iba a arrodillar pero lo detuve, note el enfado de Shinju quien si quería verlo arrodillado.

-Era broma.

El chico teñido solo observo y se alejó, sin querer cuece miradas con aquel pelinegro fue como un amor a primera vista.

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Soy algo nueva en esto, si les gusta por favor continúen leyendo~

Detrás de las canchas //Haikyuu x Reader //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora