Detrás de las canchas //Haikyuu x Reader //

Fukurodani

~Pov. Kōri ~

Me encontraba lejos de casa, había ido a comprar algunas cosas que necesito para un evento que tendrá mi madre, me dejaron ir sola ya que cerca se encontraba la universidad de mi hermano y se supone que lo vería en una hora en la fuente central pero no, me fui a pasear por el centro comprando lo que era necesario, de momento a otro me dio hambre así que decidí irme a comprar algo.

Fui a comprarme una hamburguesa, me senté alejada de los demás no estaba acompañada pero en eso dos chicos se me acercaron para coquetear, eran intimidantes.

-¿Te hacemos compañía?

-No gracias

Respondí rápido pero aquellos chicos no se iban, estaban insistiendo mucho y eso me preocupaba, no sabía si llamar a alguien así que fingí que iría al baño para hablarle a Kuro o a Adolf para que viniera por mi pero sentí como uno de los chicos me jaló del brazo para que no me fuera.

-No te vayas, apenas estamos comenzando

-Suélteme...

-Vamos muñeca

-Que la sueltes -

Escuche la voz de Keiji quien venía acompañado por los de Fukurodani lo que  era de esperarse es su equipo, el chico me soltó y se fue junto con el otro.

-¿estás bien? No debes de venir sola

La voz agradable de Bokuto se hizo sonar, sonreí aliviada.

-Si, muchas gracias

-Deberías de quedarte con nosotros

Voltee para ver a Keiji a lo que negué ligeramente, sin embargo insistieron y me llevaron a su mesa, al principio me sentí incomoda pero Bokuto era muy gracioso y decía cosas sin sentido bien tontas, de momento a otro ya me encontraba bromeando con todos más con Bokuto quién era el más llamativo, incluso los de otras mesas nos volteaban a ver por lo escandalosos que éramos.

Recibí un mensaje de mi hermano "Se me olvidó ir por ti, deja voy " me sentí tan cómoda con los chicos que respondí "Iré más tarde, estoy con unos amigos ". Después de comer fuimos a un centro de juegos, era divertido no pensar en el pasado, todos reíamos y jugamos en diferentes cosas, trate de ganar un peluche de la máquina que tenía una garrita pero no podía, Konoha uno de los chicos me ayudó y me regaló el peluche un conejo hermoso de color blanco y ojos verdes.

Duramos así hasta anochecer, me quede al final con Bokuto y Keiji, hablábamos de diferentes cosas, no podía parar de reír por lo que decía Bokuto, Keiji reía de vez en cuando. Al final los chicos me acompañarían a casa, tomamos el transporte público casi lo tuve que tomar por obligación pero no fue para nada malo.

Nos tocó ir parados y si era algo apretado, tuve que sostenerme de ambos chicos para no tocar los tubos. Pasaron muchas cosas, Bokuto golpeó a una viejita sin querer, Keiji nalgeo a un señor y yo casi me siento en las piernas de un muchacho, al bajar del transporte no podíamos parar de reír.

-Eres genial Kōri!

-Gracias Bokuto, tú no te quedas atrás

Al parecer le di justo en su autoestima, ya que se vio como se le subió lo que le dije lo que era de esperarse, Keiji parecía tranquilo y yo también, después de aquel incidente hace meses, ahora parecíamos amigos.

-Aquí nos separamos

Les dije, ya que mi casa estaba un poco más lejos que su camino, sin embargo ellos no me hicieron caso y caminaron a mi lado.

Cuando íbamos a mitad del camino vimos un puesto con muchas luces y nos detuvimos para observar, al parecer se acercaba el festival de verano.

-Vayamos juntos! Kōri vamos!-

Bokuto me lo pidió como si fuese un niño pequeño, a lo que yo asentí a modo de aprobación, mire de reojo a Keiji y por costumbre le hable.

-¿vamos?

Keiji se sonrojó y dio una sonrisa, me di cuenta de lo que había dicho y me avergoncé, ¿que estaba haciendo?

-Claro, vayamos

Keiji me dio palmaditas en la espalda aún dedicándome una sonrisa cariñosa, Bokuto se acercó a nosotros con su celular.

-Tomémonos una foto!

Los tres nos acomodamos, yo en medio, Keiji a mí lado izquierdo y Bokuto a mi lado derecho, Bokuto me abrazó con un brazo y con el otro sostuvo su celular, yo abraza con un brazo a Bokuto y con otro a Keiji, Keiji por su parte me sujeto de la cadera con un brazo y con la otra saludo a la cámara. La foto salió muy bien parecíamos muy felices los tres.

De ahí el camino fue muy divertido, hablábamos de casi todo, me dejaron en casa y se retiraron, yo me fui a acostar, revise mi celular tenía mensajes de Kuro "Estoy en casa, acabo de llegar " le envié para que no se preocupara, me acosté en la cama boca abajo pensando en todo lo que hice, debía de aceptar que me había divertido mucho, Fukurodani tiene muy buenos chicos.