Recuerdos

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Después de un año...

Se iba a cumplir un año desde que Yui llegó a la mansión Sakamaki, un año desde que se fue de su amada iglesia, un año desde que no ve a sus hermanas-por profesión-,un año desde que no ve a su amigo peludo Hachiko.

Los tres clanes decidieron celebrarlo con una cena formal entre todos en la mansión Sakamaki, ese hecho le sorprendió de sobremanera a la humana porque entre los tres clanes hay mucha rivalidad, pero lo que no sabía ella era que cada uno quería invitarla a salir pero para evitar problemas, ya que lo que menos querían era preocuparla, decidieron que sería una cita grupal.

En lo largo de la estadía de la joven, sin darse cuenta, ablando los fríos corazones de los vampiros y ellos terminaron amándola, ya no querían con ellos solo por su dulce sangre, sino que también por su cálido corazón.


(...)

─Bitch-chan, deja de ver la ventana, te vez melancólica ¡Hoy debemos festejar!

En ese momento los Sakamakis y Yui estaban en la limusina con dirección al instituto nocturno.

Durante todo el dia los vampiros notaron a la chica algo extraña, pensaron que no era nada y talvez era por la anemia pero desecharon esa idea cuando recordaron que la joven siempre les daba una sonrisa pese a las tantas mordidas y torturas que le imponen.

─Hai...-Respondió en voz apagada aun viendo la ventana del transporte

─Teddy dice que Yui-chan se está comportando raro

─¡Oí!¡¿Que te pasa Chichinashi?!-Grito cabreado el pelirrojo levantándose de su asiento

─Ayato, compórtate-Exige Reiji cerrando el libro que tiene en sus manos-Y estoy con la misma duda que los demás ¿Tiene algo que compartirnos, humana?-Pregunto viendo fijamente a la chica

─No es nada que sea de vuestra importancia, solo son cosas mías-Respondió sin ver al vampiro.

No es que la chica haya querido ser descortés o maleducada pero era la verdad, eso era solo cosa de ella y dudaba que ellos quisieran escucharla.

─Tch, que molestia-Masculló el rubio soñoliento-Habla ya ruidosa o te sacaremos de otra forma la respuesta-Dijo al final con una sonrisa cínica mostrando sus dientes a la rubia

Todos los demás imitaron su acción, la chica estaba temblando del miedo y para su suerte, como si su Dios le hubiera tenido compasión, habían llegado al instituto. Apenas se estacionaron en la entrada la chica salió corriendo de la limusina perdiéndose entre los demás estudiantes.


(...)


Yui corría hacia su salón, no quería ver a los Sakamakis hasta que terminara la jornada escolar, quería tener un respiro y estar sola por una vez.

Tan solo debía girar a una esquina y ya estaría llegando a su salon pero apenas pasó fue interceptada por alguien.

─Ohayo M~Neko-chan-Saludó sonriente el idol

─O...Ohayo Kou-kun-Dijo nerviosa la chica dando un paso para atrás chocando con otra persona

La chica de orbes rosados se dio la vuelta para ver de quien se trataba y se encontró con otro de los Mukamis, Yuma.

─Hola cerda

─Hola...Eva

Nuevamente dio un giro y a su lado se encontró con Azusa quien le regalaba una de sus tímidas sonrisas.

─Hola

GIro su vista y a su otro lado estaba Ruki.

─Ohayo chicos

Entrenando a mi mascota [Diabolik Lovers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora