Bukkukaba - BSD

Amor verdadero nos une por siempre

En aquel día Atsushi y Chuuya estuvieron libres de rumores, si, quizás había rumores, pero estos eran menores, si Lucy salía con Kyoka o si el profesor Kunikida usaba tinte, los rumores ya no iban a más, parecía que en la universidad todo comenzaría a ser más pacífico, el día termino y los cuatro chicos como siempre se reunieron en la entrada/salida de la universidad

- ¿Qué tal su día? – pregunto Dazai

- Tranquilo – sonrieron el albino y el pelinaranja

- ¿Qué tal el suyo? – pregunto Chuuya

- Como siempre – respondieron el castaño y el pelinegro

Los cuatro chicos no pudieron evitar reír sobre su conversación, fueron a comer, uno de sus restaurantes favoritos donde para suerte del albino servían chazuke, pero para ojos sorprendidos de los mayores pudieron ver al albino completamente pegado a su pareja y haciendo uno que otro cariño

- Hey ¿Qué tanto hablaron anoche para estar así? – pregunto Chuuya

- Chuuya que entrometido eres – dijo el albino – solo entendí – sonrió con un ligero rubor en sus mejillas – que cuando quieres a alguien no basta con decirlo, demostrarlo y darle su lugar es importante

- Por todos los dioses – dijo sorprendido Chuuya – tenía años de no verte cariñoso ¿recuerdas Osamu?

- Si, Atsushi-kun no se nos despegaba cuando tenía 7 años

- Dejen de decir cosas así – decía irritado el albino

- Está bien Atsushi – sonrió el pelinegro – tu siempre eres tierno

Ante las palabras de su pareja el albino solo se sonrojo, pero para su suerte, la comida llego. Los chicos por fin comían en paz, Atsushi ya había dejado de ser tan grosero, intentaba ser más amable como antes y menos apartado.

Los días siguieron, la universidad dejo los rumores de Atsushi y Chuuya por un lado y rápidamente se vieron ambos chicos rodeados de amistades, Atsushi salía más seguido así como también podía hacer trabajos en equipos que no fuera solo con Chuuya, esto hacia que tanto Ryunosuke como Atsushi sintieran celos pero ahora sabían hablarlo. Por su parte, Chuuya podía convivir con otras personas, pero no rechazaba una velada con Dazai, eso era algo que jamás cambiaría el pelinaranja.

Llego el mes de diciembre y a los pocos días las vacaciones, nuevamente nuestros cuatro chicos se encontraban en el departamento de Dazai descansando

- Atsushi-kun ¿tienes planes con tus amigos? – pregunto el castaño tumbado en el mueble

- No, le dije a Ryunosuke que las vacaciones serian para él y Seijuro – respondió el albino tirado en el piso

- Es el primer día de vacaciones y ¿ninguno de los dos va ayudarme a limpiar?

- Chuuuuuyaaaaa – se quejaron ambos hermanos

- Nada de quejas, ayúdenme – decía Chuuya molesto

- ¿Por qué no te lo llevas a la cama a ver si así piensa en limpiar otra cosa? – pregunto Atsushi a Osamu

- Por qué no mejor limpias tu parte y así no nos hace limpiar todo a los dos – respondió Osamu

- ¡Los escucho! – grito molesto Chuuya – solo limpien malditos bastardos

- Ya empezó a insultarnos – dijo Atsushi

- Mejor limpiemos – comento Dazai levantándose