Pequeñas Historias

El viaje del espejo.

   ¿Nunca habéis pensado en regresar en el tiempo? ¿ O viajar mas adelante?. Poder arreglar errores de pasado o saber qué pasará en un tiempo,  viajar décadas, años, meses, días o hasta minutos todos hemos soñado en algún momento eso, en todos los problemas que evitaríamos o, causaríamos en la continua línea del espacio tiempo, jugar con el destino.  Pero la pregunta de siempre, que aun carece de respuesta  es ¿cómo lo haríamos?.

 Pues, yo lo logre. Hoy en día es mi mayor secreto, pero un  día conseguí viajar en el tiempo al pasado, de la manera menos convencional y lógica que puede existir. A través de un espejo, un espejo que me transportó a un preciso momento crucial en mi vida en el pasado. Para arreglar mi mayor error en el pasado.  Hace  2 años  cuando tenia 19, tenia un viaje con mi familia a una casa en el campo que habíamos alquilado por vacaciones, yo iba conduciendo, y el mas insignificante de los errores, el no revisar lo frenos, cuando mi padre me había avisado, pero yo hice caso omiso, producido un terrible accidente que había ocasionado la pérdida de mis seres queridos.

 Antes de encontrar el espejo, salí del hospital después de un año, había sido la única que había sobrevivido al terrible accidente, aun cuando yo era la conductora, todavía acudía diariamente a ayuda psiquiatra, en unos días cumpliría dos años del accidente, había pasado 7 meses en coma, y casi un año con depresión. Era imposible superar la muerte de las personas mas importantes de mi vida al mismo tiempo, mi hermano, mis padres y mi hermana pequeña. Dudaba seriamente poder recuperarme, sentía que mi vida acabo, era un dolor que dudo poder explicar, todavía era tener el  desasosiego de que todo había sido culpa mía, de un ínfimo error que había arruinado el resto de mi existencia. 

  Por órdenes de mi psicólogo no podía vivir sola, mi depresión podía llevarme a cometer algún otro error con tal de acabar con  mi dolor, por ello me mudé con una amiga con la que estudiaba en la universidad, era el único ser querido que me quedaba con vida. Ella siempre estaba pendiente de mi, pasaba todos los días conmigo sin dejarme sola ni un minuto, siempre intentaba hacerme sonreír por al menos algunos segundos. Sencillamente le debía todo, ella estuvo vistiéndome los siete meses que estuve en el hospital en coma, y aguantaba mi llanto constante, mis lamentos. Los días parecían semanas, los meses años, no existía un segundo donde no me comiera la cabeza en pensar las miles de cosas que pude haber hecho para evitar que todo pasara. No podía imaginar el futuro, sencillamente no me importaba que pasaría el día de mañana, los recuerdos de carcomían tortuosamente, era como una llama que se encargaba de quemar lentamente mi alma, tan solo respiraba, estaba comatosa día tras día, no tenia un propósito, no tenia vida. 

 Un día ella salio a comprar unas cosas y yo decidí quedarme en casa  limpiando, no había tenido tiempo de ver toda su casa, aunque llevara viviendo aquí casi un año, hasta hace pocos meses logre salir de la habitación, ni siquiera sabia que tenía un ático. Cuando subía este fui limpiando el polvo de los objetos, cuadros viejos, libros,  muebles. Estaba bastante oscuro, la única bombilla no funcionaba, solo tenia la tenue luz de un ventana, estaba en medio crepúsculo del atardecer, por ello debía limpiar rápido antes de que se fuera la ultima luz del día y quedara totalmente a ciegas.

 Seguí limpiando hasta que encontré detrás de unas repisas, escondido, había un enorme espejo, era tan grande ocupaba la mitad la pared, el marco era muy elegante y dorado, estaba muy sucio, tanto, que casi no podía ver mi reflejo,  se notaba a simple vista que era una antigüedad, pero no era una sorpresa ya que a los padres de mi amiga eran coleccionistas.  Moví las repisar para poder acercarme al espejo.

 Me acerque a limpiar el espejo, justo cuando me apoyé en él, la superficie se distorsionó y antes de que pudiera reaccionar caí dentro de este caí a gran velocidad por un túnel negro que parecía no tener fondo.  No se ciertamente cuanto tiempo pasó, o que había pasado, pero sentí un terrible impacto con una superficie que parecía ser una alfombra, cuando logré levantar la mirada, me encontraba en mi antigua casa, en  mi antigua habitación,todas mis cosas estaban allí, como antes del accidente.

 Me levante y observe todo, una gran nostalgia se apoderaba de mis emociones, me atreví a ver por la ventana de mi antigua a habitación, el coche estaba allí, estaba mi familia y yo metiendo las maletas al vehículo, mis ojos se llenaron de lágrimas, la fuerte ola de emociones hizo que cayera al suelo de mi habitación donde sollozaba fuertemente. No podía ser real, estaba soñando y sabia que en breve me despertaría, todo seria un recuerdo de mi pasado y al despertar volvería a mi arruinado presente donde la tristeza, el dolor y la nostalgia reinaba en mi vida.

 Estaba petrificada, miles de emociones y sentimientos vagaban en mi mente en el mismo instante, eso no era posible, me levante,di la vuelta y mire el calendario que solía tener al lado de mi cama, y efectivamente había viajado al pasado hace dos años, al día del accidente.

 Por un momento la felicidad se apodero de mi mente, podía evitar el accidente. De repente entro mi yo del pasado, era yo con 19 años, intente gritar pero, como si no existiera, nada se escucho,  no me podía ver a mi misma, tampoco podía avisarme a mi yo del pasado.

 En una reacción de frustración golpee el escritorio,  y debido al impacto se cayó un libro rojo que estaba en el borde del escritorio, eso significaba que podía mover cosas, aunque no pudiera hablar. Mi yo del pasado se sobresalto del susto y fue a recogerlo, rápidamente tome un lápiz y escribí en la mesa de madera blanca, ¨Revisa los frenos¨, mi yo del pasado ahogo un grito de terror, corrió por la escaleras y se encerró en el baño.

  Rápidamente baje al baño,  abrí la puerta aunque no podía verme, ella estaba en sentada en una esquina del baño tapándose la cabeza y los oídos con sus brazos, escribí con el bao del espejo del baño ¨por favor te lo ruego, créeme, ¡revisa los frenos!¨. Mi yo mas joven seguía gritando,  levantó la mirada y leyó en mensaje con mas cuidado, rápidamente yo borre el primer mensaje, creé más vapor y seguí escribiendo ¨por favor, soy tú del futuro, revisa los frenos antes de salir, o si nos todos morirán¨, la mas joven grito mas al ver ese mensaje intento abrir la puerta, pero sus manos temblaban tanto que le era imposible abrirla. 

 -¡ Esta bien! ¡ esta bien! ¡lo haré! - grito la adolescente, estaba llorando y temblando del miedo, logro salir y se dirigió al coche, desesperadamente revisó los frenos con mi padre,  obviamente se dio cuenta de que estaban rotos, así se dio cuenta de lo que yo le decía era verdad. Después susurro un "gracias" con la intención de que yo lo oyera.

 Unas horas después de haber arreglado y revisado el coche con ayuda de un mecánico, partieron rumbo a sus vacaciones. No sabia si todo lo que estaba pasando era real, pero mis esperanzas habían vuelto a renacer, si en realidad viaje al pasado, tal vez  el presente cambiaría, sin pensarlo dos veces, corrí a mi  antigua habitación y volví a a atravesar el espejo, necesitaba saber si todo había sido real. Todo era un pasillo negro con una luz al final, iba flotando muy rápido, cerré los ojos hasta que segundos después sentí el impacto de la caída, sentí el peso de la gravedad azotaba en mi cuerpo, había sido un cambio muy repentino. Al abrir los ojos pude ver que regrese al presente, al ático de la casa de mi amiga, todo exactamente como antes, me decepcione al darme cuenta de que parecía que nada había cambiado me levante y la voz de mi amiga  me interrumpió antes de poder hacer algo. Juro que fue las mejores palabras que he escuchado en mi vida, cada silaba todavía están tatuadas en mi mente, como el alivio mas grande que he sentido, la felicidad de ese momento era inefable:

- ¡Loren baja!¡ tus padres ya llegaron a buscarte!-

                                                                                                   FIN