Volviendo a enamorarme...

Capítulo 14

-Dios santo- logre susurrar...
Clara traía un conjunto de encaje negro debajo de una bata de tul del mismo color -Clara yo... Nunca..
-Shhh- me interrumpió - los regalos no se devuelven me susurró.

No se sí estaba respirando, si realmente esto estaba pasando, lo único que se es que no podía sacar mi vista de sus curvas, no podia creer que con esa carita de ángel que tiene,  debajo de esa ropa que muchas veces le quedaba grande escondiera ese cuerpo que lleva a uno al pecado.

Me hizo un baile sin música, por miedo a que mis padres o tíos escucharan algo. Cantaba una canción tan bajito que sólo yo podia oírla, me perdía en su voz y en su baile... La vi sacarse lentamente su bata y sentarse en mis piernas, de a ratos olvidaba como respirar, toda ella me estaba volviendo loca.

Me sonrió, me beso el cuello y luego subió hasta mi oído - No tengo mucha experiencia en esto, sólo esperó que disfrutes mi regalo y trataré de hacerlo lo mejor posible- no respondí sólo la miré y ahí me di cuenta que esto iba más allá de juntar nuestra piel... Esto iba más alla de todo...

Me besó, tan lento que parecía una tortura pero a la vez tan delicadamente que me hubiese quedado horas besandola de ese modo. Su cuerpo comenzó a bailar arriba mío y sus besos fueron más salvajes.

Se levantó y me levanté con ella, seguimos besandonos, me llevó hasta la cama y antes de acostarme en ella me quito el vestido.

Me acostó lentamente y beso mi cuello con desesperación, ambas necesitabamos más la una de la otra pero amabamos esta tortura lo estabamos disfrutando.

Bajo a mis pechos y beso lo que salía de ellos por el corpiño, quise quitármelo, necesitaba sentirla pero me hizo que "no" con la cabeza y una sonrisa maliciosa.

Bajo hasta mi cintura y jugo con mi ropa interior, disfrutaba torturarme con quitarmela y luego no. Subió hasta mi boca y susurró -Date vuelta mi amor- le hice caso y puedo jurar que fue un mundo de sensaciones desconocidas cuándo paso sus uñas por mi cabeza lentamente apartando  el cabello de mi cuello y mordió levemente mi hombro seguido de un chupón, mordi mis labios y contuve un gemido.

-Mmm-
-Shhh- me dijo al oído y mordió mi lóbulo de la oreja. Beso y mordió dulcemente toda mi columna vertebral, desabrocho el corpiño, mi sexo cosquillaba y yo explotaba por dentro con esas sensaciones que me daba al sentir su boca morder y succionar.

Bajo a mi trasero y quito la última tela que cubría mi piel. Levante la cola para ayudarla a terminar de quitarmela, la bajo lento e hizo un sonido cómo disfrutando de aquello.

-Me vuelves loca- la oí susurrar, comenzó besando mi cola con besos humedos y cortos, paso sus uñas por cada cachete y paso su lengua, trate de retener el gemido pero se escucho más fuerte de lo que pensé, de todas maneras a Clara no le importo siguió jugando con su lengua en mi trasero, me estaba volviendo loca y tuve que morder la almohada para poder apaciguar mis gemidos de placer.

Estaba realmente mojadisima, Clara me dio vuelta y me beso con desesperación ese beso tenía lo dulce de su boca y a la vez un sabor amargo. Por extraño que parezca eso me prendió aún más y ya no podía dejar que sólo ella disfrutara de tocarme.

La hice girar y comence a besarla yo con desesperacion, desabroche su corpiño mientras mordia su hombro y jalaba suavemente su pelo hacía atrás, la oí gemir lento y entre pequeñas mordidas y besos baje a sus pechos y los lami con desesperación, Clara gemía bajito y de vez en cuándo mordia su labio para no gemir fuerte, la sente en la cama y me sente arriba de ella con una mano jugaba con sus pezones y la otra rasguñaba levemente su espalda, ella comenzó a hacer lo mismo y nos besabamos desesperadamente para no gemir, se tiro encima mío y comenzó a chupar mis pezones, para aguantar mis gemidos lamia su hombro, podía oír cómo retenia sus gemidos con mi pezón en la boca, estabamos pasadas de placer.

Junto mis pezones y comenzó a lamerlos al mismo tiempo, luego metió sus dedos dentro de mí sorprendiendome y dandome un placer tan inmenso que mordi su hombro y ella gimio alto. No se si ya nos habían escuchado, la realidad es que aunque estuviesen todos tirando la puerta abajo ninguna podía parar.

Me besaba desesperadamente mientras me penetraba y movía su pelvis contra mi muslo, baje mi mano y comencé a frotar su clítoris.

-Mmmm, el... Mmm.. Re - ga ahh lo era para ti - dijo entrecortadamente
-A mi me gusta compartir- logre decirle mientras girabamos, me puse arriba de ella y comencé a penetrarla.
Me quito de encima y se sentó en mi cara, se recosto hacía delante quedando ella frente a mi intimidad.

Hicimos el 69, en la habitación se escuchaban gemidos ahogados, me encantaba su sabor, era exquisito, no me cansaba de lamer su clitoris y apretar su trasero hacia mi boca. Ella hacía de maravillas su trabajo allí abajo. Nos vinimos juntas.

Nos quedamos en esa posición unos minutos, me bebí cada gota de ella con mucho placer.

Se recosto a mi lado, aún ambas estábamos agitadas.

-Creo que fue la mejor decision de mi vida venir a pasar navidad aquí
-Creo lo mismo- dijo ella basándome.

Nos tapamos con las sábanas y nos quedamos mirando, me recoste en su pecho pero con la mirada aún en ella.
-¿Crees que nos habrán escuchado?- susurró tímida
-Creo que no sino ya estarían aquí, por pervertir a su hija - ambas reímos fuerte y se escucho la voz de mi madre.
-Niñas ya duerman que es tarde para andar a las risotadas

-Sí mamá!- grité y nos reímos. Nuestras miradas cómplices lo decían todo.

Nunca me había sentido tan viva en mi vida.

La noche pasó entre besos y charlas, me habló de sus viajes, su vida en el avión, lo poco que veía a sus padres y lo feliz que estaba de compartir navidad con nosotros.... Conmigo...

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El rayo del sol entró por la ventana directo a mi cara, estire mis brazos en busca de Clara, estaba sola en la cama, mire debajo de la sábana y no fue un sueño, realmente estuve con ella, aún tenía su perfume en la cama, aún tenía el sabor de ella en mi boca.
Miré hacia la mesita de luz y había una carta. "Mila..." decía al frente y la abrí...
-Hija de su p...-
-Mila ven a desayunar- dijo mi tía entrando a la habitación y cuándo vio mi rostro...- No me digas, no te lo dijo cierto?! - dijo indignada mirando mi cara de tristeza y viendo como leia la carta negando con la cabeza.

Millones de perdones tuve finales y cumpleaños perdón!!! Espero les guste!!!!😙😙😙😙😙😙