Sus ojos se abrieron con lentitud debido al sueño que tenía, miró por la ventana que se encontraba abierta dejando entrar los rayos del sol, y comenzó a murmurar cosas que ni él era capaz de entender. Se levantó de la comodidad de su cama para caminar con flojera por su casa hasta llegar a la cocina donde su madre hablaba por teléfono alegremente.
Cuando la mujer se dió cuenta de la presencia de su hijo dio un pequeño respingón.
—¡TaeHyung, por Dios!—Se quejó la mujer con el susto que le dio su hijo –zombie–, que apareció repentinamente en el lugar. —¿ A qué hora te dormiste ?—Le preguntó la señora mirando la tez más pálida de lo normal de su hijo y aquellas grandes y notorias ojeras, además de eso su cabello se encontraba totalmente desordenado.
—No lo sé, a las seis o siete...— Murmuró mientras movía sus dedos tiernamente mirando el suelo, tratando con esto convencer a su madre para que no lo regañase por las pocas que éste había dormido.
—Desayuna, está todo servido en la mesa de la cocina para que no desordenes. Hoy tengo turno en el trabajo, hoy no podré almorzar contigo y creo que tampoco podremos cenar juntos.—Dijo apenada la mujer, sí bien ser enfermera no le dejaba mucho tiempo para estar en la casa con su hijo.
Él castaño asintió con una sonrisa en su rostro, la verdad nunca le había molestado en lo más mínimo que su madre se fuera a trabajar, porqué él cuando era pequeño pudo ver como los ojos de su madre brillaban al atender a las personas, sentía aquella pasión que tenía por su trabajo y el nunca sería capaz de quejarse por lo que apasiona a su madre, y tampoco la dejaría como lo hizo su padre hace un par de años atrás.
Su madre dejó en beso en su cabeza para luego salir de ahí, con su cartera y las llaves del auto. Tae, comió todo lo que su madre preparó para él y luego caminó hacia el living donde estaría todo el día. Que mejor que un sábado lleno de series y películas.
Encendió el televisor y ven el control presionó el botón que decía Netflix, esperó un rato a que cargara y seleccionó la película que estaba viendo hace un par de días.
Su teléfono comenzó a vibrar mientras que la melodía indeterminada sonaba, leyó el nombre del remitente de la llamada y sus ojos se abrieron al ver « kook🐰 »
—¿Aló?— Contestó la llamada .
— Hola Tae, umh me preguntaba...hoy...¿Tienes algo que hacer? — Preguntó con un notorio nerviosismo provocando que él castaño sonriera estúpidamente, realmente era demasiado tierno.
—¿Por qué?— Le preguntó mientras mordía su labio inferior levemente para esconder su sonrisa.
— Me preguntaba sí quisieras salir conmigo, digo como amigos... tú sabes, tomar un helado y esas cosas que hacen los amigos.— Dijo rápidamente, lo que se le hizo muy tierno al castaño.
—Por supuesto kook,¿ a qué hora?
— Bien, ¿a las cuatro está bien?
— síp, no vemos a las cuatro.
— Sí... Adiós tae.— Dicho esto cortó la llamada.
Una risita se escapó de los labios de TaeHyung mientras se removía como un gusano por el sofá al sentir ese extraño pero agradable cosquilleo en su estómago.
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¡Ojalá les guste! Le quiero decir que estoy muy agradecida con ustedes por todos los votos y los 2k de lectura 💖
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Estoy muuuuuy feliz por esto ksksksks muchísimas gracias por todo 💖💖
