Capitulo 6

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Es un creíble lo incómodo que puede llegar a ser este sofá. Me levantó estirándome un poco. Busqué mi móvil para revisar qué hora es, casi las ocho.

Caminé al baño hice mis necesidades y me duche un poco, algunos de los rasguños ardieron pero fue soportable.

Salí en busca de ropa comprobando que Mason aún siguiera dormido. Tomé unos jeans no tan apretados y una camisa. Un pequeño bulto de gordura se formaba en mi barriga. Maldita sea, mis brazos parecían los de una ardilla voladora.

Me coloqué la camiseta suspirando. Unos quejidos me alertaron, mi amigo se estaba despertando.

- Maldita sea

- Buenos días a ti también

- Me duele todo

- Y como no, si estas todo golpeado - todo sus ojos y se levantó para ir al baño.

Bajé las escaleras y entre en la cocina. Tomé mis cereales en silencio, la casa estaba desordenada. Si mama ve esto, Eitan morirá.

- Jodida resaca - la voz de mi hermano llegó mis oídos - ¿Que fue esa pelea de ayer?

- La zorra de Lorena me provocó

- No debiste golpearla - la voz de Dorian nos interrumpió a ambos.

-¿Ahora la defiendes?

- Buenos días - las miradas de ambos chicos se posaron en Mason de la peor forma posible.

- ¿Que hace él aquí?

- Necesitaba donde quedarse

-¿No tienes casa? ¿es huérfano o que?

- ¡Eitan! 

- Está bien - la voz de Mason interrumpió nuestra extraña pelea, su risa me tranquilizo por unos momentos.

-¿Que te sucedió en la cara? - la pregunta de Dorian me dejó helada.

- Una pelea - respondió mi amigo.

- Por supuesto

- Deberíamos irnos

Mason asintió tomando sus cosas al igual que yo. Salimos en dirección a su auto, gracias a los santos hoy es viernes, lo que quiere decir no más instituto.

-¿Me dirás que fue lo que te ocurrió? - de pronto el camino se había envuelto en una gran tensión, un suspiró de su parte llamó mi atención, no me fijé en lo rápido que condujo ya que nos encontrábamos entrando al estacionamiento del instituto.

- Yo... tengo que presentarte a alguien - le miré extrañada

- ¿La chica misteriosa? - algo en su cara  cambio, podía ver tristeza y culpa.

- No

-¿Cuando me la presentaras? - dije refiriéndome a la otra chica.

- En este preciso momento - dijo mientras se bajaba del auto, sentí miedo por unos segundos. Jamás en toda nuestra amistad lo había visto de aquella forma.

Me coloqué a su lado esperando que hablara o dijera algo pero en vez de eso una chica llegó a su lado y tomó su mano de forma cariñosa. Observé sus manos y luego sus caras para luego volver a sus manos.

-¿De que me perdí?

- Tessandra ella es Persy. Persy ella es Tessandra mi... prometida - tosi ya que me ahogaba con mi propia saliva.

-¿Que mierda dijiste?

- Es un placer Persy me han hablado mucho de ti - la chica me habla de manera suave y dulce.

Nobody like youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora