¡ME QUIERO CASAR CONTIGO AMOR!

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Sentada en mi lugar puedo ver como todos mi "queridos" compañeros entran al salón, algunos con una cara de "matame tierra", y otros emocionados por ver a sus amigos después de un fin de semana, Cris aún no ha llegado lo cual se me hace super raro, porque si no es la primera en llegar es como la segunda o la tercera, todo lo opuesto a mi que suelo ser de las ultimas en llegar. Escucho atentamente mi música, mi escapatoria, no estoy nojada, ni triste, ni feliz, en pocas palabras no se como me siento, siento que a veces soy un bicho raro rodeada de personas que sólo esperan que falles, bueno no tanto así, simplemente me siento como un pez en marte y si no esta Cristina pues aún más. Reviso la hora de mi celular y confirmo que sólo faltan dos minutos para que las clases empiecen, me pongo muy nerviosa porque si Cristina no llega me quedaré sola y eso no es divertido, incluso no ha llegado Mateo. Empiezo como desesperada a marcarle a Cristina,le mando millones de mensajes, pero no responde a nada tampoco contesta mis llamadas, marco por ultima vez cuando la veo pasar corriendo con el celular en la mano moviendolo de un lugar a otro y riendose de mi.

-ya estoy aquí Violeta, me quede dormida

-maldita pense que no llegabas, ya me iba a suicidar 

-no digas tonterias, sólo fue un poco de tiempo

-falta 1 minuto para que las clases empiecen 

-bueno y que quieres que haga

-ya callate, para la otra ni me preocupo por ti 

Mi mayor preocupación en ese momento era que Cris no llegara, pero al verla me calmo un poco, pero una parte de mi también desea verlo hoy, pasar un rato con él, pero después recuerdo a su "chocolatito" y se me pasa. Volteó ligeramente la mirada cuando lo veo caminando tranquilamente con sus audifonos puestos, la puerta del salón ya esta cerrada, veo como toca la puerta mientras la profesora le permite entrar, entre más se acerca a su lugar el corazón se me acelera, mi estómago empieza a hormiguear y no puedo evitar que mi rostro se pinte de un ligero color rosa.

-holaaa

-hola Violeta

-¿por qué llegaste tarde?

-tome la combi de 7:25 y de mi casa hasta aqui es media hora

-ooo

-uuu

-jajaja

Sólo sonrie y aparta la mirada de mi, esa sonrisa me esta volviendo loca y no lo quiero aceptar, Mateo es amigo, no novio, recuerdalo bien Violeta.

La primera clase comienza, pocos alumnos ponen atención y entre ellos estoy yo.