Hablemos Del Pasado

cosas del pasado

Estoy en un camino largo, tan oscuro que mis ojos se lastiman por buscar un poco de visibilidad, me siento flotante en un campo magnético. Cuando voy caminando veo pequeñas luces azules, como las que solía dibujar mi hermano Ian cuando era niño, era tan magnífico en artes visuales, las empezó a seguir, pero salían más y más, de repente veo a mi hermano Ian con mi hermano Xander, ¡Dios! ¿Ya es mi hora de partir con ellos?, Espero que sí. Corro con todas mis fuerzas estoy a punto de llegar cuando, veo recuerdos de mis hermanos, y de mi pequeña hermanita Susan, cuando aprendió a caminar, luego Xander llegó tomando su pequeña manita, después no entendí como pero ella lo seguía a cualquier lugar del departamento. Seguí corriendo cuando siento un nudo en el pecho, veo a mi hermana Susan siendo golpeada, por varios hombres, cuando tenía apenas ocho años, ella gritaba pedía ayuda...no alcance a llegar a defenderla, les gritaba bastardos! Dejenla! No! No! Es solo una niña!, Mi respiración se cambio más fuerte, de repente algo me golpeó...
Ahí fue cuando desperté, estaba ella con una cara de miedo, diciendo ¿estás bien?, No te preocupes es solo un mal sueño, todo será mejor, ya podrás soñar mejor.
Seguía congelado, siempre era el mismo sueño, todas las noches desde que ellos partieron, desde ese maldito día.

Me levanté después de un rato, ella se había asustado, pero al final me levanté y me fui a dar una ducha. necesito saber dónde está el cuerpo de mi hermana, quiero saber si está viva o no, ah pasado tiempo y no pierdo la fé de encontrar algo que me lleve a ella, mi pequeña Susan.

Estaba con uno de los mejores matones del país, hablando de nada sin importancia, todos decía que era muy rara nuestra amistad, claro que sí, no todos los días se vé, a los dos hombres más temidos del mundo juntos.
- el asunto está en que no puedes tener a esta mujer contigo, a menos que la quisieras muerta en un par de meses
-yo sé que no la debí ni siquiera de meter aquí, de hacerla mía
Elian voltea a verme con cara de asombro, no entiendo cómo puede ser tan pendejo en ocasiones.
-espera wey...la estás llamándola de tu PROPIEDAD, de pocas palabras es el buen entendedor.
-no! Claro que no, solo con lo de esta vieja, tenía que desaogar mi cancancio con alguien, y pues ella fue lo que me encontré
-no Vian tu la llamaste tuya, con todas las letras completas, tuya, tuya y tuya...lo dejaste muy claro hermano
- no me pongas esas madres en la cabeza, que sabes muy bien que no tengo tiempo para tomar nada enserio, además es mia hasta el momento que ya no la quiera...y aún así seguiría siendo de mi propiedad.
Me voltea a ver, meneando su cabeza como oposición a lo que acabo de decir, más sin embargo me reprende
-estas bien pendejo, pero bueno me voy tengo a alguien esperando en casa, mi pequeña hija con mi mujer, me esperan...mi casa tu casa hermano, cuando gustes ven a visitarnos.
Como podía estar tan tranquilo, nunca lo entenderé.

Suena mi celular uno de mis celulares, no había cambiado mi número celular desde hace años, tengo la esperanza de que mi hermana me llamé, diciendo que está bien.
Contesto la llamada;
Solo se escuchó un largo y estruendoso suspiro acompañado de una risa rasposa, como queriendo pasar su rabia en ello
-Vian, Vian...- arrastraba un poco el sonido de mi nombre- deberías de dejar las cosas en el pasado, porque te podrías llevar la sorpresa de tu vida
- ...
- ¿cual será mi siguiente paso?
-no tengo miedo al siguiente paso, sabes que puedo hacer muchas cosas contra ti
-no cuando, no sabes quién es el enemigo
Y colgó.
Sabía que estaba cayendo, pero no caería sólo, no me importaba nada, no tenía nada.
Pero solo no iba a caer esta vez.

Las llamadas eran constantes, y más de una ocasión habíamos sido saqueados en nuestras embarcaciones de mercancía, sabía que había un traidor y sabía bien quien era, pero no lo iba a dejar así, esperaba mi mejor momento para llegar a su líder.
Esa noche íbamos a atacar a unos enemigos, me preparé traía de las mejores armas, junto con mi chaleco de antibalas, sabía que algo grande iba a suceder lo podía sentir, para bien o para mal, algo iba a suceder.
Las cosas iban bien habíamos reclutado a dos de los traidores, y habíamos matado a casi todo un cartel, no teníamos miedo, esto es lo que somos...di un par de balazos al aire, solo para dar memoria a los que cayeron está noche, al dar el primer balazo me siguieron todos. Pero al estar dando balazos al cielo estrellado, mi destino me la quiso jugar, pues un balazo de un franco tirador me trabezo cercas de los pulmones.
Y todo se volvió negro, después de tanto tiempo senti un poco de paz en mi interior.