—Marco es muy poético, habla de estrellas y amor, ¿no crees que puede gustar de ti?— pregunté de camino a la biblioteca.
—¿de que hablas, Luck?— soltó una risita— Marco es homosexual, él es gay—
No me lo veía venir.
Veía que todas las chicas se morían por él, me pareció extraño, pero ahora todo está más claro. Ninguna es su estrella, porque a él le gustan los chicos.—de todos modos, soy más vieja que él. Nos hicimos amigos por lo mismo. Marco no era el joven de siempre, él tenía depresión. Su padre nunca lo apoyo. Deseaba y desea más que nada encontrar el amor, pero en su caso, no es tan fácil— la tía Suzanne negó con la cabeza.
Asentí con la cabeza.
No logré decir nada.
Creo que la tía Suzanne se conformo con mi silencio, no volvió a tocar el tema.Al llegar a la biblioteca coloque mi maletín sobre una de las mesas. Saqué mi agenda y empecé a escribir mi especialidad; poemas de amor.
El romance corría por nuestras venas.
Me coloque los lentes y las palabras empezaron a surgir, una trás otra.
Estaba concentrado, me mordia el labio cuando no hayaba la palabra correcta.
Un estruendo causado por un maletín contra la misma mesa donde me encontraba, hizo que levantará la vista confundido.
—¿Que miras? Gringo de mierda— gruño dejando libros en la mesa.
—Claro, puedes ser ruidosa y fastidiosa. No importa— respondí en tono sarcástico. Volví a perder la vista en mi agenda.
Seguro creyó que hablaba inglés y no lograría entender sus malos tratos. Y más aún, que los aguantaría.
—lo siento, en definitiva no he tenido un buen día— suspiro — y veo que estás siempre a la defensiva, pequeño saco de rabia—
—¿estas segura de que ese nombre me queda a mi?— reí viendola a los ojos.
Eran pardos, su pelo color miel, ondulado.
Parecía ofendida. Al final ambos sonreimos y me ofreció la mano.—Soy Taylor—
—Luck— estreche su mano.
Parece de mi estilo, de caracter fuerte. Es agradable. Al fin y al cabo, terminó siendo mi primer amiga en aquel lugar.
Compartimos libros y escritos.
Me contó datos sobre ella, como que su madre era Estadounidense y su padre Argentino.
Sus padres se habian conocido en Argentina, cuando su madre era pintora y su padre dueño de una libreria. Se enamoraron y ella nació allí. Su amor no dio muchos frutos, se divorciaron cuando ella tenía 14 y decidió quedarse junto a su padre, junto a todos sus conocidos.
Tenía 17 años, un año mayor que yo, amante de los libros, había venido a Estados Unidos a visitar a su madre.
Luego de salir de biblioteca compartimos nuestros números de teléfono para mantener contacto.
—Voy a una fiesta...— escribía en su teléfono — ¿no te agradaría venir?—
Me lo pensé un momento.
No tenía nada que hacer en casa, por lo que acepté. Cambiar de aires de vez en cuando no está mal.•••
Descuiden, Taylor será sólo una muy buena amiga.
Agradecería que votarán...
En realidad no me siento muy motivada.
Siento que no les gusta en lo mínimo.Supongo que todas las fujoshis esperan acción. Pero debe de llevar tiempo.
ESTÁS LEYENDO
Mi estrella -yaoi.
RomanceAlguien alguna vez, me aclaró el significado de amor. Ese alguien me abrió los ojos. Me enamoró. Me hizo darme cuenta de lo que es amar. Que te demuentren que no eres una estrella entre muchas, que te identifiquen como su favorita. Tener claro, que...