El día había sido bastante interesante, o eso era lo que Jun Hui creía tras regresar de su hogar tras un día de instituto; sus amigos habían estado intentando ayudarlo a elegir algún plan para conseguir averiguar quien era aquel chico que aparecía en sus sueños quien terminaba siendo el que ocupaba gran parte de sus cuadernos de dibujo; su mente vagaba por todas y cada una de las palabras que sus amistades habían dicho hoy mientras se encontraba sentado sobre la la silla giratoria de su escritorio, y sin siquiera ser consciente de ello su mirada terminó por posarse sobre el croquis que estaba sobre la mesada de noche junto a su cama, en aquel solía dibujar los fines de semana o simplemente cuando no se quería levantar de la cama para ir por algún otro de sus blocks de dibujo, por lo que entre sus hojas fácilmente habían unos cuantos dibujos de aquel extraño que le perseguía en su mente .
De forma calma, se puso de pie y dirigió sus pasos hasta su cama, donde tomó asiento sobre el colchón antes de estirar su diestra y alcanzar su croquis; una a una comenzó a pasar las páginas de éste hasta conseguir llegar al primer dibujo en el que aparecía aquel chico de sus sueños. Según la fecha escrita al final de la página junto a su firma, aquel bosquejo tenía cerca ya de cuatro meses en ese trozo de papel y en el podía verse claramente el perfil de aquel desconocido.
No pudo deducir cuanto tiempo fue el que estuvo observando aquel dibujo, pero cuando abrió sus ojos, ya no estaba en su cuarto, sino el que siempre encontraba a aquel muchacho, y esa vez no fue la excepción, pues ahí estaba, frente a él.
El chico parecía verle extrañado, incluso con la expresión de curiosidad mezclada en ella, pero Jun no era capaz de saber la razón de que le dedicara aquella mirada, puesto que después de los primeros días de soñar con él, aquel joven parecía haberse acostumbrado a su presencia en aquella habitación; no fue hasta que movió un poco su brazo que notó la presencia de pequeños carteles puesto que se habían regado por todo el suelo, cuando fue capaz de identificar el contenido de este la sorpresa iluminó su mirada, y es que era la primera vez que no estaba ahí con su cuaderno de dibujo.
Frente a él dispersaban un sin fin de caracteres que el podía identificar fácilmente como chinos, su idioma de cuna, y sin saber porqué de forma veloz comenzó a buscar cada uno de los que pertenecieran a su nombre, y bajo la atenta mirada de aquel desconocido poco a poco comenzó a formar su propio nombre sobre el piso del cuarto; cuando hubo terminado se puso de pie y caminó hasta quedar frente al extraño, era la primera vez que se acercaba tanto a él, la rutina siempre había sido aparecer y dibujarlo, pero ahora nada de lo que sucedía era normal, era nuevo.
No sabía que tal lejos podía llegar, por lo que ya cuando estaba a pocos pasos de él, comenzó a avanzar paso a paso, como temiendo que algo malo pudiera ocurrir; consiguió llegar lo suficientemente cerca como para ver detalles del rostro ajeno que de su común posición nunca pudo haber notado, y con miedo levantó su mano que fue de manera lenta en busca de la diestra ajena, cuando consiguió que ambas manos estuvieran juntas, por un segundo terminó congelado solamente sintiendo el calor que le producía el contacto ajeno, como si aquello realmente estuviera ocurriendo y no fuera solamente un sueño.
Tras espabilarse y recordar lo que necesitaba hacer, comenzó a jalar la mano del contrario, consiguiendo que se pusiera de pie para de esa manera guiarle hasta la parte en donde su nombre estaba escrito con los caracteres encontrados, el chino estaba convencido de que esa había sido una idea estupenda para darle a entender al chico cual era su nombre, pero cuando se giró a ver su rostro pudo ver una marca de confusión es su mirada; quiso decirle algo, pero en ese instante todo fue negro.
Cuando Jun abrió nuevamente sus ojos estaba otra vez en su propio cuarto, no sabia exactamente cuanto tiempo había dormido, pero no le tomo mucha importancia, puesto que su mirada fue directamente hasta su mano, la misma con la que en aquel sueño había conseguido tomar la ajena, en la cual ahora sentía un extraño cosquilleo presente, como si algo se hubiera rozado en ella; estuvo en blanco un par de segundos, eso hasta que su mente le ordenó dibujar algo del sueño que acababa de tener.
Nunca se había movido tan rápido desde su cama hasta su escritorio, como pudo con tanto apuro prendió su lampara y sacó de su mochila su croquis de dibujo y un lápiz de carboncillo, su mente rápidamente vagó por los recuerdos de aquel sueño, y tomando la imagen de una escena comenzó a dibujar; necesitaba mantener presente que había estado cerca de él, por lo que por primera vez dentro de todos los dibujos que mantenía del chico misterioso, no lo estaba dibujando solo a él, sino que también se estaba plasmando así mismo sobre aquel papel, el momento exacto en el que él le tomó la mano.
Simplemente con recordar aquello una sonrisa se posaba en sus labios, había sido capaz de presentarte ante el contrario de manera formal, ahora el extraño sabía que el era Wen Jun Hui; pero algo pasó rápidamente por su mente, consiguiendo que dejara de mover el lápiz sobre aquella hoja... había escrito su nombre en chino, porque eran los caracteres que ahí se encontraban, pero... ¿aquel chico sabía lo que decía? ¿qué pasaba si no entendía chino y era de algún otro país asiático?
Montones de preguntas llegaron a formularse en ese instante en su mente; después de todo estaba más que confundido ¿por qué solo eran caracteres chinos los que aparecieron es su sueño y no otros?. Después de todo el hablaba coreano también, incluso pudo escribirlo en hangul si hubiera podido, pero ¿por qué chino?
Cuando aquel cuestionamiento apareció en su mente, miró nuevamente hacia su cama, lugar donde continuaba estando su cuaderno de dibujo abierto; teniendo eso presente se paró y camino una vez más hasta su lecho y tomando entre sus manos aquel objeto que se mantenía en la hoja del dibujo del extraño se dedicó a mirarla con mucha atención, hasta que lo vio, en el inferior de la página justo al lado izquierdo de esta estaba su nombre a modo de firma... escrito en chino .
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My I ~ JunHao
Fanfiction"Es verme en el reflejo de un espejo, es como darte cuenta de que no puede existir un solo tú.. es como saber que de una u otra forma tú y yo estábamos destinados a estar juntos en todas nuestras vidas." Historia original inspirada en la canción "My...