3

222 32 35
                                    

Se sentía tonto, nervioso, ansioso, sin poder hablar. Todo eso y más cosas inexplicables era lo que Moonbin lo hacía sentir.

–¿Qué haces aquí?.- mirando con curiosidad al chico quien ahora tenía un paquete de tinta en sus manos.

– ¿No es obvio?.- señalando la tinta.

– Ah... ya veo.

Volvió a lo suyo ignorándome completamente a su compañía, se sentía humillado y con un humor pésimo.

–No recibí ninguna llamada tuya.- dijo mientras lo miraba directo a los ojos.- ¿Quieres que te pida tu celular para así poder marcarte yo?

–¿Qué te hace pensar que te daré mi número? .-Mirándolo incrédulo.- No te conozco, no sé nada sobre ti.

–Conoces mi nombre, eso es suficiente.- sonriendo.- podemos salir a comer para conocernos mejor.

-Hum...

–¡Perfecto! Te estaré esperando cuando salgas de trabajar, nos vemos más tarde.

Solo lo ha visto 2 veces, y solo dos veces  han sido suficientes para dejarlo sin palabras y con ansias. ¿Quién eres Moonbin? Pensaba y no lograba entender porque el chico insistía en querer salir con el. Trató de no pensar en el, al menos en sus horas de trabajo, pero le era imposible no hacerlo. Con una sonrisa grande que alumbraba aquel lugar regreso a su puesto mientras que clientes que estaban cerca de el lo miraban raro por su actitud. Pero a el no le importaba.

- Woonie, ¿Qué pasó? .-Observando si el chico no tenía algo raro en su uniforme.-Ahora estas súper feliz, me alegra.

– No es nada Young Mi.-Sonriendo Tímidamente.

– ¿Por qué tanta platica? ¡Vamos pónganse a trabajar!

La tarde se pasó a sumamente lenta. Demasiado. No podía imaginarse a donde iría con Moonbin o de que hablarían. Ni siquiera sabría si podría seguir guardando la calma cerca de el.
Lo único que lo animaba más es que solo le quedaba una hora para salir de su trabajo.

– ¿Qué escondes? .- Dijo.- Dime, anda.

Como cualquier chica Young Mi sabía cuando su mejor amigo estaba emocionado, feliz o enamorado. Siempre en cuando notaba que estaba deprimido le compraba su helado favorito y eso lo alegraba un poco.

-Young Mi... ¿Es normal enamorarte de un completo extraño en dos días?.- Bajo la cabeza mientras jugaba con una pluma.- Es decir... solo eh hablado con el dos veces, es raro que me guste.

Como si de su idol favorito se tratara. Young Mi dio un gran salto mientras tenía la sonrisa más  enorme de la semana. Con mucha emoción se colocó a un lado de Dong Min para escucharlo mejor y poner atención a cada pequeña cosa que el dijera.

- Woonie, no sé si es normal. Pero tampoco es algo malo.-golpeando levemente su brazo.- ¿Es apuesto? ¿Cómo es aquel chico? ¿Es mayor? ¿De esos que llaman señores?

- Young Mi, No, ¿Qué dices?- habló mientras la miraba con un leve sonrojo de mejillas.

- Esta bien, esta bien. Ahora ya hablando seriamente. ¿Cómo es?

Dong Min trato de ocultar la pequeña sonrisa que se había formado en su rostro. Pero le fue imposible ¿Cómo es Moonbin?

- Es... Delgado, Coqueto,bonitos ojos , sus piernas son tan sexis y su sonrisa lo es más.

- Uhh, debe de ser muy apuesto.-sonriéndole.- espero verlo pronto.

-Pues... Vendrá en unas horas.

Paint Me. [Binwoo] EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora