GAME OVER PENDEJO :)

4. La velada

Capitulo cuatro.

¿Como hacer que te ignoren en tres sencillos pasos? Aplicando paso extra: Apendejarse.

Como les recordaba, mi lado pacífico se va a la mierda cuando de esa niña trata literalmente de mandarlo a la mierda. No es que me molestase viviendo de ella pero es algo tedioso que vaya por la vida mandando a la mierda el lado pacifico que todos conservan.

Y no, no soy el primero al que le hace tal atrocidad, luego de que le deje con su amor en la punta de la lengua, mando el lado pacifico de mi madre a la mierda, con su música infernal que se escuchaba a diez cuadras de aquí. Oh bueno esas fueron las palabras de la mujer que me trajo al mundo.

— Bendito sea Dios que me toca turno de noche en la clínica la semana que viene, porque esto no lo pienso tolerar mas de lo debido.— Ahí esta, mi mamá de pie junto a la cocina con su camisón de dormir que le llega a los tobillos y su cabello alborotado, tratando de calmar su lado pacífico con un té. Aunque claramente puedo notar su enfado por ser las dos de la madrugada y que ella no pueda conciliar el sueño.

Me duele decirlo pero si esa nido de pájaros sigue así, por mucho que la ame; tendré que terminar con la relación.

No toleraré cada maldita noche de mi vida, su música. Aunque el baile esta bien, pero bailar a las dos de la madrugada no es algo "Normal" ¿O si?

Esta bien que a mitad de la noche piense en ella y su corta edad.
También esta bien que ella baile por la noche. Por supuesto que esta bien, pero... ¿Por la madrugada? ¡Dios, eso si es de locos!

—Alex, no lo soporto más, ve y dile a la vecina que nos deje dormir. — Un pequeño tic se puede notar en el ojo derecho de mi madre, su intento de calmar su lado pacifico también se fue a la mierda y si no voy. Seguramente mañana y el resto de mi vida, me prohibirá acercarme al amor de mi vida.

— ¿Que se supone que le diga? ¿Apaga eso ya o dice mi madre que si nos puedes dejar dormir? — Mi madre comienza una cuenta regresiva de diez a uno y luego sonríe.

Estoy en problemas.

— Ve allá y dile que si no apaga eso de una maldita vez, verán a tu madre realmente molesta. Dile que las personas con juicio sano duermen a las 2:34 de la maldita madrugada. ¿Entendiste?

No espero un minuto más y salgo de casa, es un barrio tranquilo. Así que no me molesta andar por aquí a horas de la noche. La madera de la puerta cruje al hacer contacto con mis nudillos. Nada.

Toco de nuevo y espero una respuesta. Pero nada. Una vez más.

Y bingo.

— Te dije que ya había tenido suficiente de ti, no puedes simplemente dormir y dejarme en paz.

— Amm —asiento con la cabeza aunque sus palabras no tienen ni la mas mínima lógica.— Si, pero dijiste que ya habías tenido suficiente de mi ayer, osea hoy es hoy. ¿Entiendes? —Su mueca vuelve a aparecer, junto a su rabia. Esta claro que tengo razón.— Y si, debería de estar en mi séptimo sueño pero sucede que las personas "Normales" —digo, haciendo comillas con mis dedos— No bailan con musica a todo volumen a las dos y media de la madrugada.

Touché.

Como su boca esta sellada, simplemente continuo.— Mira, no tengo ni la mas mínima intención de molestarte o arruinarte tu velada-madrugada, solo deja a mi madre dormir. Esta con los nervios a flor de piel y creeme no querrás ver a mi madre molesta. Aquí entre nos es capaz de hacer todo un escandalo. Si algo he aprendido en mi corta vida es que con el sueño de Marta Julia Castillo nadie, absolutamente nadie debe meterse.

Y río.
Y mi mundo dio un giro de 180° grados.
Y todo dejo de existir en ese momento.

— Dile a tu madre que me disculpe, creó que no note que había aumentado el volumen de la música y mucho menos la hora que era. —Volvió a sonreír,— Lamento que allás tenido que venir hasta acá por mi imprudencia.

Esta vez no cargaba su chongo, mucho menos una pijama de abuela, y estaba mas que claro que tenia la sonrisa mas hermosa que había visto en mi vida y un culo espectacular.

—Okay, ¿Te quedaste pendejo o que? —por supuesto que estaba apendejado— Esto esta asustadome.— Sus manos pasan frente a mi cara, pero Dios. Yo seguía fascinado.— ¿Estas bien?

—Muy bien.

—Ok.

Y señoras y señores, me cerro la puerta justo en la cara. Ahora se que sintió ella cuando cerré la ventana.

Fue entonces que entendí que era hora de armar un plan y darle la noticia a mi madre de que ya podía descansar tranquila.

Creo que el lado pacífico de todos se va a la mierda cuando se meten con algo tan sagrado como lo es el sueño.

Cada capítulo me gusta mas que el anterior y espero también les este gustando a ti

Dejenme tu votito aquí y comentarios por todos lados, gracias por leer.
Chau.

~M. DB.