Recuérdame (Percabeth)

Epílogo

Bueno, empezamos esta historia con una boda... Lo justo sería acabarla con una boda ¿no creen?

Veinte años después...

Los nervios me carcomían internamente pero eran buenos estaba segura que era lo correcto, mire mi silueta en el espejo, cabello rubio miel el que normalmente estaba en cascadas de rizos cayendo por mi espalda, estaba recogido en un moño que al principio me parecía imposible pero mi tía Pipes tenía una paciencia increíble, sólo dejó unos mechones para enmarcar mi cara, una base ligera de maquillaje ya que no era tan necesario, apenas labial y máscara en las pestañas, unos pendientes de búho que solía usar en conjunto con mi mamá, papá decía que parecíamos chaladas sacadas de alguna fraternidad cuando vestiamos pequeñas cosas en conjunto con mi hermana más pequeña, May, una vez más no pude más que sonreír a la chica que veía, era mi boda, mi papá solía bromear que era un calco exacto de mi madre, excepto por los ojos, eran una copia exacta de los suyos, por que no podía ser de otra forma, por que era una mezcla perfecta entre ellos.

-¿Estás nerviosa cariño?- la voz de mamá me sacó de mis pensamientos, me sonreía examinandome de pies a cabeza con sus ojos grises tormenta, siempre lista para arreglar el mundo para mí si algo me molestaba, le dirigí una sonrisa torcida, ella se rió, decía que esa sonrisa era igual a la de papá -. Estás hermosa Zoë.

-Gracias, pero mírate dudo que me hagan caso a mí en cuanto te vean mamá- ella alzó una ceja.

-Por supuesto que tienen que ver a mi pequeña, es su boda, no querrán que saque mi daga y los haga mirar a otros sitios más convenientes- eso me hizo reír.

-Wow chicas dejen de planear la dominación del mundo, tenemos una boda en camino, no creo que el pequeño Grace este muy agradecido si lo dejas colgado en el altar ángel- papá estaba viendo todo con diversión desde el marco de la puerta - además, no se hagan ilusiones, en cuánto me vean a mí se olvidarán de ustedes -agregó en un tono engreído acomodando la corbata de su smoking, acercándose a nosotras, acarició mi mejilla con el dorso de su mano, sus ojos, tan similares a los míos me veían con todo el amor del mundo.

-Ya quisieras verte la mitad de fantástico que yo papi- él me sonrió, una sonrisa torcida como la mía, dejó un beso en mi frente.

-Sí, mi estrellita, ya me quisiera ver tan guapo como tú, eres tan hermosa como tu mamá Zoë -mamá le dirigió una sonrisa satisfecha, lo que me hizo reír, quisiera que mi vida de casada fuera tan feliz como la de mis padres.

Aún seguía nerviosa papá debió notarlo apretó mi mano con la suya, quería que lo viera sus ojos chispeaban con diversión.

-Todo saldrá bien cariño, ese chico te quiere, lleva pidiéndome tu mano desde los doce años- eso me hizo sonreír recordaba las de veces que mamá había dicho que papá era un celoso pero sabía que le gustaba el hijo de los Grace, cuando le preguntaba por que era así, él reía y me decía «simplemente eres mi niña especial Zoë» - además aún puedo darle un correctivo sino se porta como un caballero con mi pequeña niña, nunca estaré lo suficientemente viejo si algún bribón quiere dañar a mi hija- me guiño y supe que quería distraer mi mente. Cosa que me hizo reír, era cierto que físicamente era igual a mamá, pero siempre había tenido una afinidad especial con mi papá, él siempre bromeaba diciendo que yo era su pequeño gran amor, mamá siempre sería el amor de su vida, pero yo era su niña, era difícil encontrar un sólo momento en que mi padre no hubiese estado ahí para mí, siempre constante en mi vida y la de mis hermanos, Maya Nicole y Charles Damasén, los gemelos, eran la adoración de mi madre, unas mini versiones de ellos mismos decían mis tíos, ellos tenían ya quince años; y el pequeño Ethan Luke una versión de papá con los ojos de mamá, todo lo contrario a mí, él tenía trece años. Papá nos amaba a todos, pero mi abuela Atenea decía que mi papá sentía especial debilidad por mí por que había sido su pequeño milagro, una tregua entre ellos dos, la aceptación de la relación entre mis padres a los ojos de mi abuela, por supuesto mi abuelo decía que mi abuela dramatizaba, pero que no me preocupará, era de familia.