Al volver Sasuke a la aldea, no la encontró. Había vuelto con sólo motivos de venganza y matar a un hombre, pero algo salió mal. Él no estaba, y ella... se había ido.
-¿Quieres matarme? -Le preguntó con sus ojos negros, algo vacíos.
- Sí. -Respond...
Tras un asentimiento, ambos se coordinaron para atacar. Era una emboscada.
Sasuke en medio segundo se encontraba detrás de la garganta del penúltimo ninja en pie, pero cómo era de esperarse, ni una gota de sangre había sido derramada.
Apretó contra su cuello su kunai, y dijo de forma tétrica: -Dónde están los demás.
No era una pregunta, sino exigencia.
El hombre traía varias marcas en la cara. Cómo si... – ¡SASUKE!
<<"Maldición...">>
Se alejó. Una explosión derribó todo árbol y que estuvo a por lo menos tres kilómetros de distancia. Con su Sharingan verificó la posición de Naruto... Que no estaba lejos.
-Menuda broma... ¿Sasuke, estabas bien?
-Sí... -Respondió poniéndose de pie. -Pero volvimos a perder la pista.
-Bueno... No tenemos nada que hacer. Esos idiotas prefirieron morir a traicionar a los suyos.
-Jhm... -Miró a su alrededor, efectivamente. Todo había quedado destruido. - ¿Y el pálido?
- ¿Sai? -Preguntó comenzando a caminar. -Debe seguir en la base. Nos reuniremos con el resto para una nueva expedición. De seguro Shikamaru apreciará la recolección de datos.
El pelinegro bajó la mirada. Verdaderamente era impresionante que Naruto confiara tanto en sus compañeros. Se preguntó si algún día él alcanzaría ese nivel.
Después de unos instantes oscureció y la lluvia calló sin previo aviso. El frío comenzó a herirles la piel, pero todo aquello poco importaba.
Sasuke no se detuvo. Desvío la mirada para activar el poder de sus ojos y detectar Chakra. Entonces palideció. Los rayos y la tormenta le daban un aire de majestuosidad, pero dudaba. Simplemente no podía creerlo.
<<¿Es... Real...?>>
Naruto le divisó preocupado: -Sasuke, ¿Qué suce...
Al igual que su amigo, miró en dirección recta hacia los árboles. Allí estaba. Con el rostro tranquilo y sus ojos apagados. Para sorpresa de ambos, vistiendo con la única ropa que no se esperaban. Una túnica negra... Con nubes rojas.
Ella de pronto sonrió desde su altura, y dijo en matiz frío: -Tiempo sin verlos, muchachos.
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Naruto y Sasuke tragaron seco. Se acercó hasta quedar de frente. Sin realmente quererlo, Sasuke se puso en guardia y Naruto en cambio la contempló boquiabierto.
-Sakura-chan... ¿Qué... Es lo que haces vestida... Así?
-Vine... Por ti, Naruto. -Sonrió con delicia. -Esta vez, voy a conseguirte por completo. -Ambos se contemplaban. Por varios segundos el aire pareció congelarse.
Un churiken cortó el canal maldito y los ojos del Uchiha brillaron. Sakura se quedó quieta, dejando que los pétalos de flor desintegraran el metal. El pelinegro alzó el ceño, sorprendido.
<<Sakura... ¿Tenía ese poder?>>
La vio sonreír. -Sasuke-kun, lo siento de veras... Pero no estoy aquí por ti. -En un segun... No. En la tercera par,.. en un instante ella estaba allí a su lado, susurrando con su tibio aliento en su oído y enloqueciendo cada vena de su cuerpo. - ¿Quieres irte? Realmente no quiero matarte. ... No será como aquella ocasión.
Junto a un latido descomunal, Sasuke retrocedió un paso. Ni siquiera su Sharingan la había visto acercarse.
En otro instante estaba con él. La chica había congelado su aliento, besando la punta de su oreja. - ¿Me extrañaste, Naruto?
