Andy

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-Perdón por eso- dijo volteandome a ver bastante sonrojado.

-No te preocupes- le sonreí de lado- Gracias por la ayuda.

-Es lo menos que puedo hacer después de eso- se encogió de hombros- ¿Te gustaría ir a algún lado?

Me sonrojo su propuesta y el también estaba así.

-Digo si quieres, aún es temprano y podríamos ir por un café...- Lo interrumpí.

-Claro, me parece bien.

-Me iré a cambiar y ahora vuelvo.

Salió de la casa y yo también subí, estaba en pijama.

Que vergüenza, no recordaba eso y ni me fije en un segundo de mi aspecto, me vi en el espejo y no estaba tan mal, solo un tanto despeinada.

Yo me imaginaba un grano nuevo o la baba seca, pero no, lo cual agradezco internamente.

Me metí a bañar rápido, me cepille los dientes y me arregle. Baje y vi a Carrot como corría de un extremo a otro, estaba siguiendo una luz.

Cuando baje se paro, busque de donde estaba la luz, vi a un vidrio en la encimera enfrente de la televisión.

Lo tome y lo volví a soltar de golpe porque me corte.

-Que tonta eres.

Susurre para mi misma y lo volví a agarrar con cuidado, lo tire en la basura de la cocina.

Al voltearme me asuste.

Estaba Andy enfrente de mi.

-Me asustaste no te escuche entrar.

-Pero aquí estoy.

Puso sus manos a mis lados haciendo que me pusiera nerviosa.

-¿Que haces?

-Hay que quedarnos mejor aquí.

Se acerco a mi, mi corazón empezó a palpitar muy fuerte y corrí la cara y me beso la mejilla, pero siguió sus besos al lóbulo de mi oreja haciendo que suspirara, siguió en el cuello pero lo aparte de mi poniendo sus manos en mi pecho.

-Para, por favor

-Se que quieres Nash.

Lo vi a los ojos y me di cuenta de algo, sus pupilas estaban dilatadas, el no las tienes así.

-¿Andy?

Parpadeo un par de veces.

-Eh...- Se quedó viendo y después abrió los ojos- ¿Si?

Escuche el timbre de la puerta.

-Veré quien es.

-No tardes.

Me susurro al oído y me dio un beso ahí, trate de respirar con regularidad, me asome y era Andy...

Abrí la puerta, estaba atentado.

-¿Que pasa?- dijo preocupado al ver mi cara.

-Esta Jacob- susurre.

Entro rápido y volteo hacia la cocina.

-¿Que demonios haces aquí?- le grito Andy y Jacob se puso frente a el- No te pedí que salieras.

-Tome el lugar del insecto.

-Vete de aqui, te espero en la casa.

Jacob salió de la casa y entro a la suya.

-¿Pero porque esta afuera?- le pregunte y me volteo a ver.

-Supongo que cuando regresaron a casa hizo que Lucius durmiera, Jake y Héctor se encargarán de el.

-¿Tu estas bien?

-Si- me dijo sonriendo- ¿Quieres ir a comer?

-Claro.

Me tendió la mano y la tome, y la puso en su brazo, como lo hacían en las películas románticas.

Salimos de la casa y caminamos al restaurante donde lo vi, a Andy.

Nos sentamos en una mesa, el ordenó pasta con queso parmesano y pollo, yo lo imite porque se veía rico.

Me contó de sus gustos, pasatiempos, dejamos a un lado todo acerca de los demás, por un momento solo eramos el y yo.

No hablaba sobre los demás, lo cual me hacía sentir cómoda con el.

Estaba oscureciendo y decidimos irnos a casa.

El camino estaba lleno de risas y bromas entre nosotros, inclusive en ocasiones me decía uno que otro piropo.

No lo negare.

Es demasiado lindo.

-No puedo creer que le dijeras eso.

-No sabia como contestar a esa pregunta, me lo pregunto Lucius.

-Hubieras dicho algo que no involucre comida.

-Héctor me dijo que había estado bien, hasta Jake que es el más grande me dijo que si.

-Pero enserio ¿Los bebés nacen del spaghetti?

-Lo hubieras visto, ese día me pido que le comprará spaghetti y el mismo mencionó a cada palito por su nombre.

-¿Y aun cree eso?

-Tengo la sospecha que tiene esos spaghettis en su cuarto esperando a que crezcan, se reusa a comer spaghetti.

-Estas loco.

Llegamos al portón de mi casa.

-¿Gustas entrar?- le pregunte.

-Claro.

Me sonrió un tanto apenado, abrí el portón con la llave y presencié la peor escena.

Carrot esta colgado en la pared y un mensaje alado de el:

Nadie me rechaza.

Multiple (Andy Biersack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora