Día 3 (Pt.3)

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Acabó la fiesta y llevo aquí más de 15 minutos, es mejor que vaya a buscar a Jimin y a su "amigo" llamado Yoongi (si ahora tiene alguien más que a mí) pero bueno, ellos me estarán esperando en el carro.

Dirigiéndome al carro me encontré a JungKook recargando en un carro rojo y viendo su celular.

-Hola, sabes, te he estado esperando por 15 minutos allá atrás, dijiste que en el mismo lugar.

-Bueno, hubo unos cambios.

-Ok...y ¿dónde está Jimin y su amigo?

-Les dije que se llevaran el carro y se fueran a su casa, para que se pudieran divertir sin tus reglas.

-Está bien, ¿ahora a dónde me llevarás mocoso?

-No me hables así, sólo le hice un favor a tu amigo y a su acompañante que también es mi amigo así que entra al carro, iremos a mi departamento. - dijo mientras que abría la puerta del carro.

-¿Y por qué debería de entrar a un carro de un desconocido?

-Porque quisiera platicar acerca de tus sueños y quisiera que pasara la parte que yo soñé así que, anda. *lo toma de la mano para que entre al carro*

Este chico ya me hizo molestar, ¿quién le dio el derecho de decirle a Jimin que se podía llevar el carro a donde él quisiera? Y con más razón, con alguien que ni siquiera conozco y que el acaba de conocer. Espero que esta situación no influya en mi trabajo.

Después de 30 largos minutos de camino llegamos al dichoso apartamento que no estaba tan mal aunque era demasiado para ser de un hijo del jefe de un solo negocio. Tal vez y ahorre demasiado o quien sabe, no debería de hacer prejuicios tan rápido.

-Bueno, sal del carro; sé que es bonito pero no podemos quedarnos aquí. *JungKook abre la puerta del carro*

-Está bien, aunque me des un poco de miedo.

-No te preocupes, no muerdo. Ten cuidado al pasar hay un perro muy escandaloso ahí adentro que él si muerde y nunca he traído visitas. - dijo mientras que abría la puerta.

Bueno, al menos tenía un perro y eso me agrada de la gente, que sepa tratar a un animal. Era un perro esponjoso y blanco con café, una hermosura de perro. Obviamente lo acaricie y voltee a ver el departamento que estaba gigante, en serio no creo que el jefe se lo pudiera comprar porque no le alcanzaría para pagar su propia casa con lo poco que nos pagan.

-Bueno, bienvenido. Ahora podremos hablar a gusto, toma asiento. *ofreciendo una silla en el comedor*

-Amm, gracias.

-¿Agua, café, té?

-Agua, por favor. - dije mientras que me sentaba en la silla.

Mientras que me servía el agua veía sus piernas de la manera más disimulada posible pero no funcionó y me volteó a ver, dio una risita mientras que me veía con unos ojos de pervertido.

-Eres la primera persona que se fija en mis piernas.

-Ammm, no fui...¿perdón?

-No tienes porque disculparte, así es como va mi sueño así que haré lo posible para que se cumpla. Me estoy dando cuenta de que valdrá la pena. *se sienta junto a él*

-Bueno, empecemos. Quiero saber si tu sueño es igual que el mío. Veremos, yo estaba en una oficina dormido y tú estabas al lado mío; te desperté y buscamos una salida juntos, después de salir te besé y querías venir a mi casa porque la tuya estaba muy lejos.

-Sabes, cuando me besaste me pediste permiso, eso fue hermoso, es por eso que me llamaste la atención. - dijo mientras que tomaba de su café.

-Es que...te acababa de conocer y...pues...no lo sé...

-Ahora yo te pediré permiso a ti, ¿puedo hacer el amor contigo? - dijo mientras que se acercaba hacia a mí.

-¡¿Qué?! *se atraganta con el agua*

-Si, pero ya veo que necesitamos más tiempo para eso así que, vamos a ver una película al cabo y mañana es sábado y no trabajamos. *se sienta en el sillón y prende la televisión*

-Ok...

Nunca pensé que iba a decir que hiciéramos el amor tan rápido, creí que sólo iba a ser para conocernos mejor que en los sueños. Me sorprendió la verdad, aunque le iba a decir que sí pero me quedé paralizado.

Vimos una película de comedia, no fue de las mejores pero había unos chistes muy buenos. En los créditos Jimin me mandó un mensaje.

Chimchim

Hyung, nos quedaremos en casa toda la noche, no te espantes si es que nos ves. Posdata: es el mejor día de mi vida. Pásatela bien.

Me quedé un poco impactado ya que Jimin estaba en mi casa y llevaba a su amigo así que sabría lo que pasaría con ellos y conmigo así que, sólo esperaré.

-¿Sabes qué...? No aguanto más no poder cumplir mi sueño.

-Man...de~

Se sentó en mis piernas quedó en frente de mí, cara a cara. Me puso mis manos en sus piernas y me dijo al oído: Quiero cumplir mi sueño, ¿me dejas? *muerde la oreja de Tae*

Tenía que hacer esto porque sentía que era parte de mi sueño aunque eran involuntarios todos mis movimientos, pero tenía que ser a mi modo así que lo tiré a la alfombra y me puse encima de él. Ahora yo le dije al oído: Será a mi manera si es lo que quieres.

Inmediatamente que le dije eso me abalancé hacia su hermosa boca y lo besé primero con tranquilidad y después con sensualidad, recordé lo que dijo Jimin; si este era el mejor día de su vida también sería el mío.

Empecé a tocar las piernas de JungKook empujándolas hacia mi costado, él empezó a tocar mi erección que se notaba a simple vista, tenía que ser a mi modo así que yo metí la mano a su camisa y toqué con delicadeza su abdomen bien formado.

Desabroché su camisa, lo levanté y quedamos sentados en el piso. Toqué su miembro por dentro del pantalón y con la otra mano acariciaba su cara con delicadeza. Hice lo mismo con el pantalón que con la camisa, la puse fuera mientras que él hacía lo mismo con mi camisa.

-Espera...un poco...Tae~ *respiración acelerada*

-¿Qué pasa?

-Tengo frío, trae esa cobija que está en el sillón.

-¿No te basta con lo caliente que estoy?

-Me encantas.

Reanudamos lo que estábamos haciendo y ahora yo me quedé sin pantalones en poco tiempo. Después de un minuto quedamos en total desnudez y en cuanto pasó eso lo detuve y le dije que no dolería. Le metí toda mi erección y gimió, fue el gemido más delicado que he escuchado. Nunca creí que un hombre gimiera mejor que una mujer, me excite más y fui metiendo y sacando mi miembro; subí de velocidad hasta que él se corrió, al poco tiempo pasó lo mismo con él pero estaba dentro.

-De verdad...lo haces demasiado bien...- dijo JungKook mientras que se tapaba con la cobija que me había dicho que bajara.

Como dijo Jimin fue el mejor día de mi vida. Y valió la pena haber dejado las llaves aunque el mocoso de Jimin tenía unas de repuesto.

El Chico de las MariposasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora