SANTA MIERDA

974 41 4
                                    

Me dejo caer en la cama suspirando.

Y ahora se preguntaran: ¿Qué paso?

La respuesta es simple: tres horas de castigo, pero no el tipo de castigo a lo "gringo" donde estas en una sala con todos y justo, justito conoces al típico tío que te vuelve loca y terminan enamorados.

Si se imaginaron eso déjenme ser la primera en decirles cuan equivocados están.
En mi mundo castigo es una sala, de el porte de un cubículo de baño, donde pasas solo mirando las paredes o estudiando.

En mi caso es tratando de mirar las paredes.

Así que ahora estoy tirada en mi pieza sin saber qué hacer.
Así es mi vida.
Tampoco es como si quisiera que Edward Cullen apareciera por mi ventana pidiéndome sangre... o quizá sí.
Todas alguna vez hemos soñado con el chico perfecto, ya sea de nuestra imaginación o sacado de un libro, yo por ejemplo, esperando que Augustus resucite.

El sonido de la puerta sonando me saco de mis "inteligentes" pensamientos.

- Señorita Leah, su padre la llama a la sala de estar.-dice Elsa, mi nana o algo así. Ella es la que se preocupa que no se inciende la casa en otras palabras, y siempre ha estado ahí. - ¿Desea que la guie?

- No, gracias Ele pero yo puedo.
Con ella es la única que me contengo la rabia de que sienta compasión conmigo.

Bien, mentiría si les digo que no estoy nerviosa.
En un caso normal estaría ya haciendo en mi mente una lista de las cosas buenas y malas que he hecho, PANICO sería una gran palabra que me estaría definiendo antes.

Antes.

Porque conociéndolo seguramente me llamo para desahogarse y echarme la culpa de todo.

Voy bajando las escaleras a paso de tortuga con diarrea.

Todo por tratar de que este momento se atrase lo más posible.
Que al final es lo que todos hacemos, me acuerdo de que cuando era niña y mis padres me llamaban yo me daba 20 vueltas por la habitación tratando de relajarme y hacia una lista de cosas que había hecho, y cuando descubría que iba mal ya tenía el discurso listo.

Justo cuando estoy en el marco de la puerta me detengo. Son voces.

Voces.

¿Voces?

Inhala, exhala, inh-

JODIDA MIERDA, VOCES.

Vale, vale hay que tranquilizarte, todavía no es seguro que tu "padre" te haya regalado al zoológico

Espera, ¿he dicho zoológico?

- Leah, querida. Ya estás aquí.

Santa mierda, ¿dijo querida?

Quizá sí que necesito ir al doctor después de todo.

- Emm si supongo.

- Ay, pero que niña más linda, tú debes ser Leah, ¿verdad?-dijo una voz dulce.

No señora soy Paris Hilton.

- Si -carraspee con la garganta- Disculpe quizá no la reconozca pero, ¿Quién eres?

Educación ante todo people.

- Oh, es cierto que desconsiderada, soy Trisha. La prometida de tu padre.

SANTA MIERDA.



Ahi les dejo un gift del que sera Mike, Douglas Booth. 

Papito sensual..... anyway, espero que les haya gustado el capitulo!


CiegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora