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-¡Corre!

Después de eso empezó a alejarse del lugar, yo estaba sumamente nervioso y no tenía la menor idea de lo que debía hacer al respecto. Así que, corrí tan rápido como pude.

Unos tipos forrados en una camioneta negra habían llegado sin más hasta el lugar donde nos encontrábamos sentados. Nos tomaron desprevenidos, pues yo no tenía la menor idea de quién eran ellos y al parecer ella tampoco. Nos miramos por unos segundos antes de que gritara desesperada y la persecución comenzara.

Era de noche y el lugar no era para nada iluminado, los postes de luz con lámpara eran menos que un ornamento y simplemente seguía la silueta de la pequeña en apuros. Ellos comenzaban a gritar y hasta entonces no había nada completamente atemorizante. Sin embargo, conforme nos metíamos a las calles el estruendo de armas de fuego al aire me habían elevado la adrenalina al máximo. "¡Por aquí!" gritó la castaña y me guíe por las sombras con solamente su voz como pista.

Entramos a un callejón sumamente estrecho y lleno de bolsas de basura. La chica se movía hábilmente por el lugar mientras me llamaba la atención por tirar todo lo que mi cuerpo tocase. Finalmente salimos de ahí y los disparos y el sonido de las llantas corriendo se fueron difuminando a la distancia.

-¿Q-Qué fue eso? -pregunté tratando de recuperar el aire- ¿L-Los conoces?

-Claro que no. Por esta zona es bastante común que alguno de eso tipos te "levante".

-¿Qué quieres decir?

-¿De dónde vienes?¿Eres de la realeza?

-Ja, ja -sarcásticamente- No es mi culpa nunca haber vivido cosas cómo estas.

-Tonto. Son perros de narcotraficantes. Buscan a gente joven para que distribuyan droga o sirvan como halcón.

-Ya veo.

-Si bueno, adiós.

Se dio media vuelta para comenzar a caminar.

-¿Te vas ahora?

-Em... Sí.

-Espera. Para empezar tengo un par de dudas...

-Agh, no me importa. Mejor vete a tu casa princesa.

-Tonta.

Se marchó sin mirar hacia atrás ni una sola vez. Me guíe por las calles hasta quedar enfrente de mi apartamento. Esta no era una noche que yo planeara. Por un momento el recuerdo de mi bella pelirroja abarcó mi mente de nuevo. Normalmente, ella no se iría tan fácil de mi cabeza, pero en una noche como esta sucedió lo inesperado.

Mi bella simplemente dejó mis recuerdos y está vez fue sustituida por la desconocida.

***

Al siguiente día no tenía nada que hacer. Seguía de vacaciones y hasta ahora no había trabajos pendientes. Espere unas horas a que Lola llegara a regañarme, pero eso no sucedió. Al contrario, cuando pasé por la puerta de su apartamento no había rastros de ella. No olía a que estuviera cocinando algo, ni siquiera aquellos boleros sonaban en su vieja radio.

Decidí salir, me sentía abrumado y aburrido. Caminé unos minutos hasta que me di cuenta de que estaba de nuevo por aquella colonia de la noche anterior. Definitivamente no me dirigí hasta el parque o el supermercado. Preferí deambular un rato hasta que encontré un pequeño local con la leyenda en una lona gruesa "Café".

Ciertamente no era un lugar innovador. En la entrada simplemente estaba el menú del día y todo estaba forrado de madera en un tono chocolate. Me senté en uno de los angostos asientos de la barra y tomé mi celular esperando ver a alguien que pudiese atenderme.

Mind Matter. (Yoongi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora