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Nada

A penas soy capaz de recordar mi edad y nombre, ¿Cómo tengo estas heridas? Supondría que en ese auto andaba yo, pero, ¿Qué sucedió?. 

Creo que llevo mas de tres horas caminando, ja' esa chica era bastante hermosa, fallé al no preguntarle como podría comunicarme con ella, ademas, hace mucho sol y estoy sediento, siento que llevo mas de una semana sin comer nada, creo que voy a morir de hamb...

Caí abatido al suelo por la cantidad de hambre, sed y esfuerzo al que estaba exponiendo mi cuerpo con todas esas heridas. Al momento de despertar noté que estaba vendado y puesto en los asientos traseros de un auto , y delante de mi había un hombre que aparentaba de unos 50 años quien me dijo:

-¿De dónde eres y cual es tu nombre? Contesta solo eso o tus heridas van a abrirse.

-Mi nombre es Keyler señor, lo demás no lo recuerdo, no recuerdo absolutamente nada.

-Perfecto, espera a que lleguemos.- Contestó el señor.

-¿A dónde vamos?-. Pregunté

-¡¡¡ Dije que contestarías sólo mis preguntas!!!- Contestó aquel anciano exaltado.

-(...).

El auto se estacionó y al lado de aquella carretera solitaria había un granero donde parecía que aquel extraño se hospedaba, noté que el hombre no salia del auto y solo nos quedamos estacionados.

-Abre la puerta y sal del auto-. dijo el hombre

Salí asustado del auto y al momento de intentar correr, el hombre enunció:

-Por favor abre la puerta y ayúdame a salir chico.

Aterrorizado fui a ayudarle, y observé que aquel hombre al salir le faltaba el pie izquierdo y aprovechó la ocasión para pedirme que sacara sus muletas. Luego fuimos dentro de aquel granero, aquel lugar era el hogar del hombre quien inteligentemente lo dividió en secciones distintas convirtiéndola en una casa, aquel hombre me pidió que me sentara y me preguntó:

-Chico, ¿Tienes familia?

-Señor, ni siquiera sé como tengo estas heridas y apenas recuerdo mi no...

-Te pregunté si tenías familia-. Interrumpió.

-No recuerdo nada señor, pero supongo que sí-. Contesté.

-¿No hay algo que puedas recordar?-. Preguntó el hombre extraño.

-Nada.- respondí pasivamente.

El hombre sonrió ligeramente, y yo sin aguantar le pregunté: 

-Señor, ¿Cuál es su nombre?

-No quiero que escapes de aquí luego de decirte quien soy y pienses que soy una mala persona chico, y no quiero que pienses que voy a hacerte daño, solo te diré... Olvídalo, en cambio, no has dejado de observar mi pierna, jaja, la perdí en una pelea no tienes de que preocuparte.- Me respondió amablemente.

-¿Usted vive solo aquí?-. Pregunté.

-Vivía aquí con mi esposa, pero hijo, es increible como alguien que tiene tu felicidad en sus manos puede hacerte sufrir tanto-. Respondió con un nudo en su garganta.

Me disculpé con el señor por mi atrevimiento y con una sonrisa continuó hablando:

-¿Tienes novia chico?

- No estoy seguro, no recuerdo.- le contesté

-Si conoces a alguien que ames, entrégale todo lo que tienes , no importa si es con la persona equivocada, quizá esa persona ''equivocada" logre convertirse en la correcta al ver que le entregas todo sin importar. Aquella persona perfecta o ideal para ti no existe, tú eres quien la hace y aunque tenga lo que pidas siempre tendrá algún defecto que ignorarás porque la amas y si a alguno de los dos le hace daño, le ayudaras a mejorar-. Decía aquel hombre mientras brotaban lágrimas de sus ojos.

Permanecí callado, mientras el secaba las lágrimas de sus ojos dijo:

-Ve por aquella puerta,ahí hay una cama donde puedes quedarte el tiempo que desees ¿Quiéres algo para comer?

- No quiero nada, tomaré un baño, gracias-. le respondí.

Me acosté despues de tomar un baño y al no haber comido nada desperté para buscar algo que comer, al levantarme de la cama escuché el sonido de una TV en una de las secciones del granero y en frente de él estaba aquel señor que habia quedado dormido, pero me llamó mas la atención al ver que el rostro del hombre lo estaban pasando por TV, no quise entrometerme en nada y decidí ir a buscar que comer, instantáneamente me alimenté fui a acostarme y allí me dormí.