Ups

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-Los vez sin ropa/ en ropa interior-

Tony:

Tony necesitaba un descanso, su próximo gran invento estaba consumiendo toda la paciencia y energía que tenia, dejándolo echo un mar de nervios.

Lo único que se le ocurrió en ese momento fue que una ducha caliente podría ser la solución para recuperar su paz mental y no le costo tiempo para encontrarse gozando de esta.

Al sentir las gotas calientes correr por su piel se sintió mucho mejor; y cuando todo el baño se lleno de vapor supo que ya había tenido suficiente.

Al de salir de la ducha, su cabello seguía mojado y por esto varias gotas caían por su piel.

Apenas se estaba quitando la toalla que estaba atada alrededor de su cintura y en medio camino de quitarse esta la puerta se abrió abruptamente, mostrándote a ti.

-¿Donde estarán aquellos guantes?- te preguntaste a ti misma, buscando en la primera gaveta que te encontraste.

Al escuchar como alguien aclaraba su garganta te volteaste en dirección al sonido

Tony solo sonrió en forma de saludo; no tiene vergüenza alguna de que lo vieras en esas condiciones. Después de todo eres su esposa, ya los has hecho antes.

-Oh Tony, lo siento- te disculpaste entrando en la habitación.- No sabia que estabas aquí.

-No se preocupe, Sra. Stark.- Tony dijo en tono seductor, guiñándote un ojo en lo que lo viste.

Peter:

Ambos estaban en una cita de estudio,bueno más bien tu estabas en la sala esperando a que aquel chico apareciera.

Ya cansada de esperar fuiste a su habitacion solo para dejarle los apuntes del proyecto.

Lo que sin duda alguna no se te paso por la mente es ver a Peter Parker, tu mejor amigo desde tercer grado, en boxers con el traje de Spider-man a sus pies. Peter estaba mortificado, avergonzado, ¡rayos no sabia que hacer!

-¡(t/n)!- exclamó sorprendido.

-¿Que demonios...?- lograste decir, no apartando la vista del avergonzado chico.

- Mierda,¡puedo explicarlo!- hablo desesperado.- Yo, uh, bueno...

Comenzó a balbucear y a dar excusas por el traje y el porque de su llegada tan tarde. No pudiste escucharlo del todo, seguías en shock.

Steve:

Principalmente su objetivo no era que lo vieras así, no en esos instantes por lo menos.

Llevaban seis meses saliendo, ambos estaban muy felices con su relación y todos sabían de esta, pero Steve todavía creía que no estaban listos para el siguiente paso.

El soldado estaba en las duchas, un momento para él antes de impartir el entrenamiento. Cuando sintió el familiar aire frío supo que alguien había abierto la puerta.

-Hey,Cap.- escucho que dijeron y supo de inmediato que eras tu.

Se volteo frenético, sus mejillas rojas de la pena al verte ahí con él.

- ¡Dios mio!- grito por la sorpresa.- ¿que haces aquí?

Mantuvo su distancia de ti, intentando ocultarse de alguna forma.

-Solo voy a tomar una ducha con mi novio.- dijiste como si fuera lo más obvio del mundo.-¿por qué te alejas,Rogers?

-Yo,no...yo no, eh...- comenzó a balbucear tratando de buscar una explicación creíble.

-Mejor calla y acércate.- lo interrumpiste, posando ambos brazos alrededor de su cuello.

Pietro:

Son pocas las ocasiones en las cuales Pietro se ha despertado antes que tu,la razón de esto es simple odia levantarse temprano.

Sin embargo, es fácil deducir cuando esto sucede ya que parece que un mini huracán hubiese arrasado con el apartamento que ustedes comparten, aparte el olor a comida que proviene de la cocina. Aunque esa vez fue un tanto diferente...

Te despertaste con tus músculos doliendo de una manera agonizante, habían llegado de una terrible misión la noche anterior y todos los síntomas se estaban mostrando ahora mismo.

Fuiste al baño con los ojos cerrados, el sueño y cansancio era lo único que te controlaba en ese instante.

Abriste la llave del grifo y te dispusiste a cepillarte los dientes; el agua de la regadera estaba, de alguna forma, siendo obviada por ti.

-Buenos días,princezna.- saludo Pietro desde la ducha, tomando una toalla que estaba guindada en la pared afuera de esta.

-Hola.- contestaste simplemente, llenado tu boca con agua antes de escupirla.

Al oír la puerta de la ducha abrirse te volteaste, siendo bienvenida por el pecho tonificado de Pietro, por el resbalaban gotas de agua,al igual que su cabello.

Beso tu mejilla antes de decirte: -Nos vemos en la mesa.- con una sonrisa en sus labios.

Bruce:

Estaban en una misión, todos peleaban alrededor tratando de mantenerse con vida a toda la población de la pequeña ciudad y a ellos mismos.

Al ver como un gigante verde aparecía golpeando todo lo que estuviera a su paso y gritando con todas sus fuerzas supiste que algo andaba mal.

Corriste lo más rápido que pudiste, estando cerca de Hulk en unos cuantos minutos. Por suerte para ti, Natasha te había impartido unas clases sobre la canción de cuna, por lo cual estabas m!s que preparada.

Al terminar la canción Bruce yacía al lado tuyo, acostado sobre un montón de escombros de edificios y calles.

-Me alegra que estés de vuelta.- sonreíste aliviada, aganchándote a su lado.

-Si...- dijo desorientado, observando a su alrededor las personas corriendo por sus vidas y todo el equipo peleando por estas.

-Oh no...no me digas que ocurrió de nuevo...- la notificación en su voz era notoria, siendo ajeno a la situación de que estaba sin ropa.

-Si,pero ya no importa.- trataste de cambiar el rumbo de la conversación.-¿Por qué no mejor buscamos algo de ropa para que te pongas?- le propusiste, sonriendo ante el sonrojo que de un momento a otro se apoderaron de las mejillas de Bruce.

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