Adoptada: Charly (ALHDE #1)✔

capítulo 10

–no hables demasiado rápido

   —Odio hacerlo

   —No hables con la boca llena

   —No soy una cerda

   —No le respondas con mal carácter.

   —Evans, he estado viviendo contigo, y no te he dicho nada malo

   —No...

   —¡agh! Respóndeme gran tonto –solte de repente, haciendo sobresaltar a evans

   —¿Qué pasa?

   —Pasa que llevo tratando 2 meses de que connor hable conmigo, pero al parecer desapareció de la faz de la tierra –dije lanzando el celular al otro lado de la cama

   ¡Si! Mi mejor amigo no ha hablado conmigo durante mas de 2 meses, y por mas que he tratado NO.ME.CONTESTA a mi, que soy un amor.

   —Bueno, eso no se hace, pero da igual, arreglate casi son las 7 y a la abuela le gusta la puntualidad

   —¿creés que a mi no? –pregunte

   Él solo  sonrió y salio de la habitación.

   Después de las confesiones, y el trato, evans y yo empezamos a mejora un poco, hasta me dijo que me daría una clase exclusiva para "mantener feliz a la abuela" la cual, parece ser muy estricta en todo... Tengo una mala  sensación.

   Arreglé lo que iba a ponerme, me decidí por unos vaqueros azules, botas negras, y una blusa negra suelta que tenia un corazón formado con brillantina azul.

   Me pondría un vestido... No a quien en engaño, odio con toda mi alma los vestidos.

   Puede que me gusten los videojuegos, los libros, y patinar, pero si hay algo que nunca me falto, fue el sentido de la moda, puede que antes de entrar al hogar fuese prácticamente un palito que se la pasaba durmiendo, pero si dormía, dormía con una pijama muy elegante, hasta mi ropa de estar en casa era muy tipo "voy a salir con el príncipe de Europa al cual le gusta ser rebelde".

   Aunque por mas que mi ropa fuese muy bonita, yo no actuaba así, sólo me encantaba verme bien aunque prácticamente, mi carne estuviera pegada a mis huesos.

   Esa fue una de las pocas cosas que me enseño mamá.

   Mérida, charlotte, Mérida

   Ajá, Mérida, me enseño que lucir bien te hacia sentir bien, y en cierto modo era así, me hacia sentirme un poco bien de ese modo.

   Pero dejando de lado ese tema, seguí con mi outfit para la mamá del señor o'brien.

   Decidí dejar mi cabello rubio suelto, aunque tenia las puntas abiertas, pero después me di cuenta de que se veía mal, así que decidí cortarlas, y ahora si me veía bien.

   Ahora si, a conocer a la señora O'brien.

(...)

   —Ella ama los vestidos... –dijo Evans

   —Yo los odio

   —apero te ves bien... De hecho, si, te ves bien, aunque a la abuela no le gusta que las niñas lleven pantalones... Espera, ¿te cortaste el cabello? –dijo de repente

   —Si, me corte las puntas.

   —¿Eso es bueno? –dijo él

   —Si, si sabes hacerlo –respondí mirando el celular –se tarda mucho.