No creí lo que estaba viendo...Había regresado a mi casa, ¿pero como?
— ¿Por qué, llegas a estas horas? — dijo mi mamá, mientras observaba la televisión.
— Fue, qué perdí el bus, mamá. — dijo Jamie.
— Sube, a darte un baño, y, cuando termines baja a comer tu cena... esta en la estufa. Y no hagas ruido tu papá esta durmiendo. — dijo Mamá (mientras continuaba observando la televisión).
—No, sabía que había sucedido. Estaba en un bosque, siendo perseguida por un hombre y dos perros, y, ahora estoy de vuelta en casa —pensaba (mientras subía las escaleras hacia mi habitación).
Tal vez, fue un sueño, o quizás solo lo imaginé. Lo cierto es, qué ya no puedo hacer nada. Aunque por un lado me alegra, estar en casa de nuevo.
Después de darme un baño, baje a cenar. Mamá, se había quedado dormida en el sofá, viendo la televisión. Traté de no hacer ruido, mientras cenaba. Cuando termine, lave unos trastes y luego me fui a mi habitación.A la mañana siguiente...
— Jamie lee, levántate y baja. — dijo Sonia, hablando con firmeza, y seriedad.
—Pero, hoy es sábado, no se porqué me hace levantar temprano. — pensé, a la vez que le conteste, ¡ya voy mamá! — dije.
Baje las escaleras, algo molesta y a la vez con ganas de no bajar.
— Aquí estoy mamá, ¿qué ocurre?— dije.
— ¿viste como dejaste el pórtico de la casa? Haz mé el favor y lo limpias. — dijo mamá algo tranquila pero firme.
— No...no lo vi. Pero ahora lo hago. — le conteste.
El pórtico estaba lleno de lodo. Así que no dije nada, y lo limpie. Después de un rato me dio sed. Me voy por la puerta de atrás, para poder entrar por la cocina. Cuando escuché a mi mamá hablar por teléfono.
Sonia — Pensé que nunca llamarías, pedazo de imbécil. ¿Hiciste lo que te pedí?.
...
Sonia — Bien, ¿Cuando vienes?
...
Sonia — esta bien... Hablamos, espero no lo eches a perder, o, sabes lo que te pasará.
— ¿Qué, raro? — pensé
Esperé, a que saliera de la cocina. Luego entre tome un jugo de uva.
—¿Que haces? ¿Terminaste de limpiar el pórtico?— dijo mamá
— Solo tomando algo de jugo, y si ya termine de limpiar. ¿Y papá? — dije
— Tuvo, que salir. ¿Que te pasó en el rostro? — dijo mamá.
— unas chicas, me pegaron. — dije sintiendo algo de vergüenza.
–Pues a ver si aprendes a defenderte. Uno no debería estar abusando de nadie. Pero tampoco uno debe dejar que lo demás abusen de uno. – dijo mamá.
–Lo se mamá... –dijo Jaime.
Par de horas más tarde, escucho que alguien esta tocando la puerta. Me asomé por la puerta de mi habitación. Pero, no logro escuchar, muy bien. Voy y al asomarme. Veo que es el comisario Bennett. ¿Qué raro, nunca había venido a la nuestra casa? — pensé.
De repente mamá, comenzó a llorar.
— ¿Mamá, qué ocurre?— dije.
— Es tú papá, al parecer lo atacó un sujeto. Voy a tener que ir al hospital. — dijo Sonia (Mamá).
— Deja que me vista y te acompaño mamá. — dijo Jaime.
— Necesito, que te quedes. Tú tía viene en camino. Y necesito que la esperes. — dijo Sonia) Mamá.
— Está bien, pero llama cuando sepas como esta papá, por favor. — dijo Jaime.
— Esta bien, Jaime. Solo cierra la puerta y no le abras a nadie, solo a tú tía. Cualquier cosa me llamas. — dijo Sonia (Mamá)
Después, mamá se marchó con el comisario Bennett. Él no nos dio muchos detalles, sobre lo que le había ocurrido a mí papá, lo cual me dejo muy preocupada. Fui a la sala y encendí la televisión. Pensaba que así podía distraerme para no pensar mucho en lo sucedido a mí papá.
continuará...
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No Hay Felicidad Completa
De TodoLa vida puede, ser dura y en la mayoría de los casos, muchas veces no sabemos que hacer. Días buenos, días malos. Pero, las decisiones que tomemos pueden cambiar nuestra vida y la de otros. Así es la historia de Jamie.