mi maldicion. (starco)

capitulo 3

El duque... Un ser misterioso. Yo pude ver en los primero días que no es una persona mala como muchos dicen. Marco diaz es una persona atormentada y lastimada. Lo se con solo mirarlo a los ojos. Aquellos ojos rojos brillantes, son muy tentadores y en mi experiencia es muy difícil apartar la mirada de ellos.

Han pasado un mes desde que llegue a esta mansión. Sigue siendo un lugar muy apagado, pero al menos logre que convencer a mi duque de quitar toda esa mala hierba que se expandía por las paredes y el interior de varias habitaciones. Incluso arreglamos unas ventanas rotas.

Estoy tranquila con él. En mas de una ocasión he creado circunstancias en las que mi señor fue tentado a tocarme. No lo hago por el simple echo de que deseo ser tocada por él sino mas bien por aquellas lindas reacciones que pone.

Yo: aquí tiene el desayuno. —dije colocando la bandeja con un jugo y ensalada.

Marco: star, sabes que odio la ensalada.

Yo: lo se, pero sabe que no debe comer pura chatarra, eso le hace mal a su cuerpo.

Marco: llevo 8 años comiendo de esa forma y no me a pasado nada.

Yo: bueno, creó que será mejor que le de yo misma para que se la coma más a gusto. —agarre el tenedor y pique una lechuga. —por favor, diga ah.

Marco: n-no es necesario esto.

Yo: veo que no hace resultado. ¿me preguntó que más le podrá gustar para que coma su comida?

Me acerque a su rostro con una mirada tentadora. Mi duque se puso rígido. Se que por esa molesta máscara no puedo ver su lindo sonrojo. Me preguntó si algún día me dejar ver su rostro por completo.

Marco: no es necesario que te acerques tanto, star.

Yo: pero mi duque no puedo evitar sentirme preocupada por su alimentación. ¿hay algo que pueda hacer... Para convencerlo. ?

Marco: s-sabes que si te acercas mucho puedo tocarte sin querer... —miro la ensalada.— de acuerdo.. Me comeré esta... Cosa.

Yo: no es cosa, es ensalada y a parte de saber muy bien es muy nutritiva.

Marco: dudo mucho que esta ensalada sea buena.

Yo: diga ah...

Marco.: n-no me trates como un niño... —mi duque me miro y yo le indique que no bajaría la mano hasta que abriera sus labios. — tu ganas...

Yo: me alegro... —respondí con una sonrisa y le di de comer.

Durante los próximos minutos eh estado alimentando a mi duque. Esto es algo muy placentero de hacer. En este mes mi relación con mi duque fue por buen camino hasta llegar al punto de confiarnos Todo entre los dos. Marco tiene secretos que me diría cuando estuviera listo.

Lo comprendo, ha estado sólo durante mucho tiempo. ¿quien sería esa maldita bruja capas de hacerle algo así una inocente criatura? Mi duque es una persona que busca la paz y encontrar la cura a su maldicion. Siempre que toca el piano crea esa hermosa melodía que a la vez es triste, en ocasiones me daban ganas de llorar.

Siempre que tengo tiempo suelo acompañarlo mientras toca. Una vez que acabo el desayuno junte los cubiertos y el plató para ir a lavarlos.

Marco: star...

Yo: ¿si mi duque? —me detuve al frente de la puerta para mirarlo.

Marco: gracias por Todo... Por cuidarme hasta ahora....

Yo: no tiene que agradecerne. Más bien yo le agradezco por confiar en mi. —le Sonreí.

Marco: no. Gracias por ser la primera persona en verme como alguien normal. Se que quieres acercarte mas a mi pero sabes que por ahora no puedo hacerlo. Yo... Gracias por todo, por cuidarme y por...

Yo: ¿si...?

Marco: gracias por tu compañía... Me siento menos solo contigo a mi lado...—me dedico a sonrisa triste.

Yo: no haga eso...

Marco: ¿que cosa?

Yo: no me gusta que ponga esa sonrisa triste... —salí de la habitación sin esperar respuesta.

Pase lo que pase.... Siempre estaré para él y ya no estará mas solo... nunca mas.

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