∘₊✧Casada Con Un Extraño✧₊∘ (ɪ.ᴍ ʏ ___)

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Hoy quiero creer que es un día normal como cualquier día, bueno eso pensaba yo sobre este día.

Pero todo empezó cuando mi mamá vino a levantarme en la mañana.

— Cariño, despierta. — empezó a moverme.

— Mamá, diez minutos más, hoy no tengo que salir. — me puse la cobija hasta mi cabeza.

— Tenemos que hablar contigo. — Me quitó la cobija.

— Mmm bueno ya bajo Má. — ella se fue y yo me senté en la cama, ni siquiera me cambie de ropa, tenía puesto mi pijama, solo lave mis dientes y me peine.

Para ser sincera mi familia es rara, todos se casaron antes de los veinticinco años aunque mi papá fue la excepción porque se casó a los veintiséis. Aun no se bien la razón porque.

Baje al comedor en donde vi a mi papá leyendo el periodico, el Kim Su Ho dueño de los mejores restaurantes de Seúl y más conocido por su gran encanto dulce y agradable.

Mi mamá se encontraba sirviendo otro plato para mi. Ella Park Hiesun dueña de una gran empresa de cosméticos y de muy buena familia como mi papá, ella es muy conocida por su gran belleza natural.

— Buenos días papi. — me acerque a mi papá y le di un beso en la mejilla.

— Buenos días cariño. — dejó el periodico a un lado y me sonrio. — Primero sientate... Bueno cariño, mamá ya te hablo de algo,  no es asi. — Yo asenti con mi cabeza lento me sente en la silla. — Esto también nos pasó a nosotros y ahora estamos felices.

— Papi me estas espantando... Me puedes decir que es...

— Esta noticia cambiará tu vida muy drásticamente.... Te vas a casar.

— Ah bue..... — dijo ¿casar? ¿Yo? — Que?

— Cariño tómalo con calma. — dijo mi mamá.

— ¿calma? Si me tengo que casar...! No. No voy hacerlo. — me levante de la mesa y me fui a mi habitación.

Como diablos voy a casarme si aún tengo veintiún años. Que demonios pasa con mi familia ahora.

Me quedé acostada en mi casa y tocaron mi puerta, no hice caso y me tape con la cobija.

— ¿Podemos hablar? — decía la voz de mi mamá, yo solo no dije nada. — cielo, papá y yo nos casaron igual, yo no quería pero mis padres me obligaron y resulto ser el hombre de mi vida cuando lo vi me enamore de el, mira mi amor no es que queremos presionarte, pero puede que tu y el sean una linda pareja en el futuro. — mi mamá sobaba mi espalda por encima de la cobija.

— Pero porque hacen esto.

— Así esta en nuestra familia, te cámaras con el hijo menor de los Im, tu eres nuestra única hija y conocemos a esa familia bien, esto se había hablado desde que tu naciste, aun no entiendo porque ocurrió esto pero así lo deciden tus abuelos. No lo hacemos para presionarte pero debes de casarte con el.

— Cuando se supone que debo casarme...

— Tu boda será lo más pronto posible y la mamá de el ya habíamos hablado de esto, en cuanto les diéramos la noticia así que será dentro de dos semanas, ya todo está arreglado.

— No puedo escapar de esto..?

— No cariño, no te preocupes serás una buena esposa, eres hermosa, agradable, tienes una excelente salud y tienes anchas caderas para tener unos bonitos bebés. — me sonroje y mi mamá me dio un golpe en la espalda. — Bueno mucha charla, arreglate porque vamos hacer unos cosas que faltaron para que este lista la boda.

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Pasaron benditas dos semanas bien rápidas para empezar. Me tenían todo el día decidiendo si estaba bien las cosas de la boda, ni una vez me presentaron a mi "prometido" que sería sorpresa para el día de la boda.

Me puse el vestido pues si es lindo, me maquillaron a pesar de que no estoy acostumbrada a eso pero me obligan.

Estábamos de camino a la Iglesia cuando entre vi mucha gente conocida, amigos de mis padres y gente que no había visto en mi vida hasta ahora.

En todo el trayecto me venía imaginando a mi futuro esposo, no se si es calvo, gordo, chaparro, mafioso.... Bueno eso no.

Pero para mi sorpresa vi al chico vestido de negro me quede sorprendida si que es muy lindo pero basta _____ tranquila. Respira.

¡No es momento para que se te alboroten las hormonas!

Después de toda la seremonia, mi prometido... Mm que no me acuerdo el nombre por andar buscando alguna forma de escapar, bueno lo voy averiguar el nombre después, aunque aún no se donde voy a vivir.

— Bueno ya que se casaron, viviran aparte. — mi mamá tocó el hombro de el, así le diremos por lo pronto.

— Mamá... No puedo vivir contigo....

— Claro que no cariño, ustedes deben de tener su espacio, te encargadas de tu esposo antes de que te enseñe sobre nuestras empresas. — dijo mi papá.

Nuestros padres nos llevaron al carro y el chofer sabia a donde tenias que ir. En todo el camino no dijo ni una sola palabra solo miraba la ventana, lo veo mejor ahora y si es muy atractivo, su cabello muy negro y la piel blanca sin ninguna imperfección.

La casa a donde llegamos si era bonita, una casa no tan grande de dos pisos, color blanca en medio de un jardín, las protecciones de la orilla de la casa color negra, al entrar dábamos con la Sala de estar, algo grande a un costado estaba la cocina aunque era más grande ya no quise saber que había en los otros cuartos porque ya tenía sueño, en la parte de arriba estaba el dormitorio de ambos, aun no sabía si vamos a dormir juntos.

Cuando baje vi que el traia dos molestas una mia y la de el.

— Gracias.. — lo vi a sentir.

Subi mi maleta y me cambie de ropa en el baño que se encontraba dentro del cuarto. Dentro de un rato me quedé acostada en la cama, pero no podía dormir, mire mi celular y eran apenas la una de la mañana, mejor baje a tomar agua cuando chocó con el.

— ¿Estas bien? — me toma del brazo para no caer.

— Ah si si, no te preocupes. — me separó de el.

— Soy Changkyun.

— _____.

— Bueno, ya eres grande así que saldré y vendré en la mañana. — sin más se fue.

Wua... Mi primer día de casada que emoción  hay aja a quien engaño mejor debí de haber escapado cuando tuve la oportunidad, maldito seas ancestro que saber que estupidez hizo para que yo tenga que casarme ahora.