—Que conversación tan intensa teníais Kagami y tú, ¿no? —Yumi es la primera en hablar, después de alejarse lo suficiente de Kagami y Kuroko para que no los oyesen.
Midorima la ignora, porque, en fin, la gente que rodea a Midorima es así, solo suelta idioteces por su boca, bueno, Floy no tanto, pero lo hace.
—¡Oh, eso me recuerda que nos encontramos a Akashi cuando estabais en los vestuarios! —Kioo se empezó a reír al recordar lo que pasó. Kioo intentaba contar la historia, pero no puede ni pronunciar bien una palabra ya que se empieza a reír de nuevo.
—Lo contaré yo ya que a Kioo le ha poseído el Dinosaurio de Navidad, o Satanás, da igual —comenzó Yumi —. Mi estúpida hermana y yo íbamos de camino al baño y nos encontramos con Akashi en uno de los pasillos. Empezamos a hablar, una cosa llevó a la otra y acabamos en una pelea verbal llena de sarcasmos. Obviamente ganamos nosotras la pelea porque somos geniales, y al final, bueno, Kioo vomitó, encima de Akashi, repetidas veces.
—¡Es que su cara era muy graciosa! —habló Kioo, aunque al terminar siguió riendo.
—¿Eso... Eso es todo?— pregunta Takao confuso. Yumi solo asiente como respuesta, dejando a Takao más confuso —. A ver, imaginarse a Kioo vomitando encima de Akashi es gracioso, pero no para reírse de la manera de la que lo hace Kioo.
—Déjala, es retrasada la pobre, nuestra madre niega haber bebido durante el embarazo, pero, tan solo míranos, algo tuvo que haber pasado, algo ilegal —Yumi entrecerró los ojos y solo le faltaron las gafas de sol para ser del CSI.
Después de unos minutos en silencio en los que Kioo intentó tranquilizarse, esta habló —. Ey, ¿no tenéis hambre? —Y así los cuatro adolescentes se fueron a un restaurante barato, puesto que no llevan precisamente mucho dinero encima, a cenar algo nutritivo después de tan exhaustivo partido.
—El número 7 del Kaijō, Kise Ryōta, no jugará debido a una lesión, por lo que el partido será relativamente fácil —dice Kioo mientras lee unos papeles con información, que cómo leer una cosa y decir otra diferente, no lo sé, pero nada en esta historia tiene sentido así que continuemos.
—Eso sí, jamás, pero jamás, subestiméis a vuestro oponente —continúa Yumi.
—O ese será vuestro fin —finaliza Kioo.
Dicho eso ambas gemelas se retiran para preparar los banquillos, dejar al equipo cambiarse tranquilos y que el entrenador les diga las típicas frases motivadoras.
—¿Soy el único al que le da miedo cuando se continúan las frases? —pregunta Takao una vez las gemelas ya se habían ido, levantando la mano a su vez, a lo que todos levantan la mano también, concordando con el moreno de primer año.
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Polos Opuestos
FanficEsta es la historia de dos gemelas que por asuntos personales entran a la preparatoria Shutoku, donde conocen a Midorima y Takao, sus polos opuestos y con el paso del tiempo se acaban enamorando de ellos. -Quién diría que mi hermanita seria se acaba...