Un hombre de verdad

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No se trata de contar con un hombre que se vea bien, que tenga un buen cuerpo, que tenga dinero, que te de todos los lujos que pidas. No se trata de un hombre que te de como te gusta y ya. Se trata de un hombre que pueda estar en las malas y en las peores.

Un hombre constante. Un hombre que conozca el valor de una familia, que no te abandone. Un hombre que te ame con todos tus defectos e imperfecciones. Un hombre que jamás te deje sola, que te apoye, te escuche y se lo mejor de sí. Un hombre que te escuche, que te trate como una reina. Hay buenos hombres, buenos padres y buenos padrastros. Algunos padrastros hacen mejor trabajo que un padre biológico, diciendo presente en todo y aportando más de lo que debería.

Hay otros hombres que tienen cojones, forman su familia y aún con esas altas y bajas jamás abandonan a su mujer porque saben que no hay nadie perfecto, y saben la importancia de una familia unida. Un hombre de verdad estará presente en todas las actividades de su hijo, en esas noches largas de hospital, en su deporte favorito, en sus recogido de notas, en todos sus logros y etapas, un hombre de verdad aporta con mucho más que una pensión.

Un hombre de verdad aporta con su tiempo, amor, valores, comprensión, apoyo, y buena educación.

JhonwilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora