Cap. 28 Bajo Ataque

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(Pv Jacob)

El ave gigante resultó ser un esqueleto de pterodáctilo ¿Cómo demonios vuela? Espera ¡¿Soy estúpido o qué?! Es obvio que es por una persona poseída y encima puede controlar los objetos del museo, debe ser el director o el encargado del lugar.

En eso las esculturas de arcilla que nos rodeaban comenzaron a moverse rompiendo los cristales que las aprisionaban, la gente comenzó a correr aterradas esquivando los vidrios rotos.

- ¡AHH!

- ¡Sofía! ¡Perla!- Frank corrió para proteger a sus chicas, seguido de Josep y Katy.

- ¡Hay que sacar a la gente de aquí!

Mikael y yo nos escondimos detrás de la mesa de bufete ahora derribada, Kaoru corrió hacia nosotros y nos transformamos.

- Seres como ustedes no saben apreciar el verdadero arte, solo disfrutan pisotear a otros, ¿No quieren que el mundo sepa que son unos enfermos que usan esclavos como juguetes sexuales? Pues es una lastima ¡La prensa sabrá la clase de basura que son y con ello el mundo entero!

La gente corría hacia la salida pero entonces las armaduras que decoraban el pasillo principal se movieron apuntando sus lanzas hacia ellos. Kaoru lanzó sus cartas derribandolos, provocando un fuerte sonido metálico.

Mikael lanzó una llamarada a la puerta principal pero esta se mantuvo intacta. Los aspersores se encendieron y el agua cayó sobre los invitados.

- Bien, nuevo plan.- dijo Mikael furioso.- Hora de usa mi nueva habilidad.- levantó su mano y el agua se detuvo, luego tronó los dedos y el agua que había caído se acumulóy se congeló formando una enorme lanza.- ¡Estocada Helada!

La lanza abrió un enorme agujero en la pared sorprendiendo a la gente.

- ¡Salgan en orden!- gritó.- No se peleen y tengan cuidado.

Se escuchó un ruido en las otras secciones, la gente huía aterrada de soldados e indios de cera que disparaban al aire sus escopetas y flechas respectivamente, como si quisieran asustarlos ¿Qué estaban haciendo? ¿Reuniendo a la gente en la entrada principal? ¿Para qué?

Mejor sacamos a la gente antes de averiguar qué demonios pasaba. Entonces noté algo muy extraño, los reporteros no estaban siendo atacados, y estos aprovecharon la confusión para subir fotos de la situación.

- ¡Todos salgan deprisa!- les grite a los reporteros que se habían quedado cerca de la puerta mientras Mikael ayudaba a la gente a salir.

- ¿Estás loco? ¡Esto sí que es noticia!- dijo un hombre con un micrófono mientras su compañero grababa.- Hemos esperado toda la noche para revelar la verdad al mundo ¡Esto es oro! Al fin todos sabrán la clase de ricos que gobiernan el país.

Sentí que me hervía la sangre ¡La gente estaba en peligro y estos imbéciles sólo querían una noticia!

Antes de que comenzara a gritarles un carruaje controlado por una especie de conductor hecho de tela bajaba las escaleras dispuesto a arrollar a la gente, entre ellos se encontraban Frank quien tomó a Sofía y a Perla y trató de correr. 

¡No van a escapar a tiempo! tal vez....si hacia que mi cuerpo se endureciera como el diamante...

- ¡Cuidado Señor Diamante!- gritó Perla al verme correr hacia el carruaje.

- Cálmate, puedes hacerlo.- me decía a mi mismo, si no funcionaba esa cosa me mataría. Pero ¡No puedo dejar que lastime a nadie!

Me detuve viendo a los caballos de cera a punto de aplastarme, aquella vez que mis brazos se cristalizaron solo pensaba en proteger a Mikael, así que debo pensar en proteger a todos.

Los Ases de la Ciudad PokerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora