Traviesas aventuras (NozoEli)

El castigo de Elicchi

Nozomi POV

Como sabrán, luego de ver a Elicchi y Elichika pelear — de nuevo — decidí tener una conversación con mi novia. Una vez la hice venir conmigo a la cocina, esperé a que ella se sentara y me puse frente a ella; mis brazos estaban cruzados y mi mirada estaba posada en sus ojos. Ella se sonrojó por alguna razón, ¿quieren saber por qué? El motivo de su comportamiento es sencillo: cada vez que hemos seguido este patrón, mi función es torturar a Elicchi... sexualmente, claro~.

— Tienes claro el porqué te llamé hasta aquí, ¿verdad? — susurré en su oído.

— S-Sí... — sus manos parecían de gran interés para ella — S-Solo... no seas mala conmigo — se mordió el labio.

— A veces pienso en si realmente te estoy castigando con esto o no — suspiré — Pero no puedo resistir tu cara cuando te niego algo.

— N-Nozomi....

Cuando estaba a punto de comenzar con mi jueguito, sentí un ruido a mis espaldas; cuando me volteo, veo a la pequeña Elichika siendo golpeada en su pequeño trasero por nada más ni nada menos que Non-chan; aquella vista se me hizo muy graciosa y tierna, sobre todo por la forma en que mi pequeña réplica inflaba sus mejillas y fruncía el ceño. No pude evitar reír ante la escena, lo que provocó que Elicchi se levantara de su asiento para poder mirar. Cuando me rodeó por la cintura y apegó su cuerpo al mío por detrás supe que su castigo tendría que esperar.

Elicchi y yo decidimos dejar al par de tórtolas en paz y nos dirigimos a nuestra habitación; supongo que ahí seguiré impartiéndole disciplina.

Non-tan POV

Una vez Nozomi se fue de la cocina junto a Elicchi, dejé de golpear a mi pobre Elichika; ella hacía un adorable puchero mientras unas pequeñas lágrimas se asomaban en sus ojos. Me acerqué a ella y besé su rostro mientras secaba sus lágrimas; ella escondió su rostro en mi hombro mientras dejaba que mis pequeños brazos la rodearan.

— Elichika... ¿estás bien, yan~? — susurré mientras se calmaba.

— N-Non-chan... — su puchero era demasiado adorable — ¿M-Me perdonas por ser una mala chica?

— Por supuesto que sí, yan~ — volví a abrazarla — Eres mi zorrita preferida, yan~ — froté nuestras narices, pero nunca imaginé que ella me besaría en los labios.

— Non-chan — ella siguió acercándose más y más hasta que logró acorralarme contra una pared — Yo... yo... te amo — volvió a besarme, pero esta vez sentí su pequeña lengüita rozar mis labios.

— E-Elichika, yan... — nos miramos a los ojos y, fue en ese momento en que supe lo que ambas queríamos.

POV Omnisciente

En la habitación de Nozomi y Eli el caos estaba comenzando a reinar; la mayor de ambas, Nozomi, tenía a su completa merced a una atada rubia. Eli había sido atada de las manos con el propósito de ser inmovilizada por completo, lo cual era bastante sencillo una vez la peli púrpura se lo proponía. La menor estaba únicamente cubierta por su ropa interior, la cual incluía un brasier blanco y un bóxer gris. Nozomi comenzó a frotar su pie contra la entrepierna de la rubia, causándole una enorme frustración y gemidos al mismo tiempo. Eli no disfrutaba estar atada sin poder hacer nada, pero vaya que le gustaba cuando Nozomi utilizaba sus tácticas dominantes con ella.

— Alguien ya está animado... — dijo Nozomi en tono de burla al ver la obvia excitación de Eli a través del contacto con su ropa interior.