Mission: Reconciliation and peace || K.SJ; M.YG

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Hoseok intentaba alegrar el desayuno tal como lo estaba antes de que sus hermanos mayores -así se llamaban después de mucho tiempo de amistad- se sentaran, sin embargo, era todo en vano.

  O eso pensó hasta que SeokJin se animó a sonreír por una de sus travesuras.

  –¿Quieres parar de hacer eso, por favor?– YoonGi levantó la mirada al fin y desearía que no lo hubiera hecho. Daba miedo, mucho miedo.

  –Hoseok puede hacer lo que se le dé la gana.– Oh, no. Jin había dejado de sonreír.

  –Ah, él sí puede y yo no. ¿Por qué eres tan injusto, SeokJin?

  –Porque Hoseok a pesar de hacer lo que quiera le dedica un poco de tiempo a la persona que dice querer, no se pone de malas cada que le piden un poco de cariño y...

  Ay, no. Ha fracasado otra vez y las miradas cansadas de sus otros cuatro hermanos se lo gritan. NamJoon quiere decirle que al menos lo intentó, pero la discusión en voz alta de Suga y Jin no lo permiten.

  Dos años de ser amigos que se veían bonito (palabras de Taehyung), luego dos de ser pareja, ahora tres semanas de no hablarse si no era para reclamarse por cosas del pasado. Eso estaba hartando a sus menores y los sacaba más de quicio que SeokJin le dijera a YoonGi que era lo peor que le pudo haber pasado, que YoonGi contraatacará con que estaba totalmemente arrepentido de haberle dedicado su tiempo; y que aun así SeokJin se negara a cambiar de habitación y YoonGi conservara como fondo de pantalla la foto de Jin con Holly. ¡Sus hyungs eran molestos!

  Jin salió de la cocina una vez que terminaron de discutir mientras  YoonGi lo veía alejarse, suspiró abatido, evitando que sus compañeros vieran sus ojos llorosos y pudieran percibir el arrepentimiento por las palabras dichas.

  –Si aún quieres tanto a hyung, ¿por qué no le dices que vuelva contigo?

  YoonGi, sin mirar a Jungkook, respondió: –De ninguna manera, yo no voy a decir eso. Jamás o al menos, no si él no lo dice primero.

  Orgullosos, raros, tsunderes, ¡tontos! Eso y más eran. A los menores -o sus hijos, como ellos solían hacerse llamar para molestar a YoonGi y Jin- les tocaría encargarse de hacerlos entrar en razón.