Dark book

Sesión 2

No hay nada que decir, veremos que tan bueno puedo ser para cambiar los roles.

Por aquella tarde me dirigía hacia el consultorio de la psicóloga, todo muy normal me recibió y todo pero, era diferente, había más silencioso que nada, un silencio profundo, podía escuchar su respiración, decidí iniciar la sesión, todas las personas tienen su punto débil ¿no es así?...

Me enteré que usted perdió un familiar cercano ¿Acaso es cierto?

Bueno, eso es un tema delicado, pero en efecto es real, por ello mismo no pude dar terapia como una semana, pero ¿a que viene esa pregunta?

Disculpe pero me gustaría charlar con usted, apuesto que esto será útil para que conozca más de mi y yo de usted, ¿puedo?

Suena interesante pero estoy dudando

Empezemos, dígame, ¿como se siente al saber que un ser querido ya no está, que ya jamás, nunca jamás lo volverá a ver, que ya no estarán frente a frente... Duele ¿verdad?

(Solo escuchó con una mirada baja, y con un rostro lleno de tristeza)

Se que duele, todos hemos pasado por lo mismo la cuestión aquí es superar eso, ¿como?, Conociendo personas nuevas, como yo, dejando a lado la relación psicóloga-paciente, pero dime... ¿Aprovechaste el tiempo a su lado?

Mmmm....

No lo se realmente, trate y trate pero no tenía mucho tiempo, desde que terminé la carrera y me dediqué al trabajo descuide a mi familia
(Dijo tristemente)

Fui una mala hija, la última vez que lo vi, lo trate mal, el hizo lo posible para que yo terminará la carrera, pero fui cruel con el, le dije que el no sabia por lo que pasaba, me arrepiento de todo, no pude estar a su lado en su lecho de muerte.

(Rompió en llanto)

Esto en este momento sabía que podría manipularla, había encontrado la información de aquello que la hace romper en mil pedazos, puedo formar parte de ella o usarla...

¡Descuida, descuida, señorita descuida!, No estés triste, no es culpa tuya aveces no podemos cambiar el futuro por venir, no podemos saber lo que vamos a perder para valorarlo...

Ella moría por dentro, decidí abrazarla, romper ese pequeño estrecho que había entre nosotros, justo en ese momento, en ese instante, en aquel segundo, sentía aquello que tanto aclaman, que tanto mencionaban, ¿acaso estaba enamorado?, o solamente estaba confundido...