Soldier 2 [j.b.}

067.

A ____ le entró un terrible sentimiento de nostalgia cuando la mañana de último día había llegado. La noche anterior le ordenó a Justin que arreglaran sus maletas porque ella no quería estar con prisas y con aquel temor de que algo se les fuera a olvidar. Les habían comprado regalos a todos sus amigos y _____ cuidó de que estuvieran hasta el fondo de su maleta para que estuvieran bien protegidos. Le daba tristeza saber que tal vez no volvería y porque Atlantis había sido la mejor experiencia de su vida, todo gracias a Justin quien en silencio se dedicó a vestirse después de darse un baño. 

La habían pasado de maravilla los días anteriores, Justin ya había dejado a un lado su actitud sobre protectora en cuanto a ____ y sus ganas de meterse a nadar. Él nunca paró de tomarle fotografías, ella consciente de que en la mayoría, salió mal. Sus apetitos no habían cedido ni un poco, comió mayormente en el área del snack y Justin la acompañaba porque comía igual o más que ella. Ambos habían quedado increíblemente bronceados, sobretodo Justin, quien fue tan terco e ignoró las súplicas de _____ diciéndole que se pusiera protector solar. Aunque no le molesta, se veía tan atractivo con aquel tono de piel. 

Era una verdadera pena tener que despedirse del lugar de sus sueños, _____ había disfrutado cada segundo de su estancia en Las Bahamas que admitía el ya no poder esperar para estar de nuevo en casa, con Eva y dejar que el curso de su embarazo siguiera. 

—¿Lista? —le preguntó Justin en cuanto puso su malta en el suelo. 

_____ asintió sin decir palabra alguna y salieron de la habitación. Esta vez Justin no dejó que ella arrastrara su propio equipaje y así fue hasta que llegaron al mostrador. Justin se encargó de todo ello, mientras ____ miraba alrededor por última vez, llevando en su memoria el hotel más maravilloso que hasta ahora, había visitado. 

—Gracias, Justin —murmuró ella al salir del hotel para esperar al transporte que los llevaría al puerto.

_____  disfrutaría del único día abordo del crucero hasta que llegaran de nuevo a Miami.

—¿Por qué? 

Ella dejó recargar su cabeza en su hombro y sonrió aún cuando no pudiera verla. 

—Por la mejor luna de miel que pude haber soñado. 

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LAX. 

Poder estirar las piernas era un verdadero alivio para Justin, haber estado en el asiento de en medio durante todo el vuelo no fue para nada bonito y cómodo. Odió al adolescente que estuvo a su lado, no dejó de moverse, de hablar con la mujer al otro lado del pasillo y su música a todo volumen lo sacó de quicio. _____ se había quedado profundamente dormida durante el viaje y él no había dejado de estar alerta de su rostro por si sentía algún malestar, aún seguía sin confiar del todo que estuviera realmente capacitada para viajar en avión. 

Pero ya no importaba porque desde este punto, _____ no viajaría más hasta que tuviera a su hijo en sus brazos de una buena vez. 

El cielo estaba milagrosamente despejado, ya estaban de regreso y ____ caminaba somnolienta por el túnel. Esperaron con paciencia sus maletas y una vez tomadas, Justin le dio un beso para sonreírle después. Las ganas de ver a Eva eran inmensas y sus largos pasos hacia la salida lo demostraban, seguramente Sandra estaba ya esperando por ellos. Salieron con rapidez y Justin alzó el cuello para ubicar a la madre de _____. 

—¡Ahí está! —exclamó ____ apuntando hacia un punto fijo. 

Al momento de ver a Eva en los brazos de su abuela, Justin no pudo evitar sonreír ampliamente, la había extrañado como un verdadero loco. No sabría decir si era su imaginación o no, pero Eva se veía más grande, agitó sus brazos en cuanto estuvieron lo suficientemente cerca y ____ soltó su mano para estrechar a Eva con fuerza y llenarla de besos.