Fume un cigarro,
pensé que habría fumado tu recuerdo, así que a esto sabe el olvido.
Tú mejor que nadie sabías cuanto podía odiar el cigarro, pero las cosas cambian tu eres ejemplo de eso; mírate, en otros brazos, rozando tus labios en otra boca,
mintiendo a otros ojos, y dedicando otras canciones de Ed.
Es casi lo mismo porque el cigarro mata, igual que tú terminaste haciéndolo.
La única diferencia es que este cigarro puede durarme un poco más de lo que duro "nuestro amor", y mi muerte puede ser más dulce y menos dolorosa de lo que fue morir mordiendo el corazón tras tu partida.
Ahora dime, ¿en cuántos cigarros te olvido?
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«Versos a las estrellas»
PoetryLas estrellas serán testigo de cada verso escrito para ti y que tú nunca leerás.