Capítulo 2: A veces pienso en ti

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-¡Feliz cumpleaños!-Me desperté saltando de mi cama, abrí mis ojos como platos y observé la situación. Stefan estaba a mi izquierda con un regalo, y Bonnie a mi derecha con una torta de chocolate. Sonreí con alegría y suma nostalgia--Oh-Dije ahora sentándome en la cama-Chicos que lindo-Bon con puro entusiasmo me abrazo--Feliz 19 años-La abracé fuerte, muy fuerte-Se alejó y me dió un dulce beso en la mejilla. Y luego de eso, Stefan se me acerco con esa típica sonrisa dulce.-Feliz cumpleaños amor-Me beso profundo, llenandome de su sabor y calidez suave, esa que te estremece dulcemente--Gracias-Me extendió el regalo, lo desate y lo abrí-Un hermoso vestido blanco descansa envuelto en finas hojas de papel suave color blanco, acaricié la tela, era suave delicado. Tenía encaje floreado y se podía notar que era suelto. Eleve mi mi vista con una sonrisa. -Es bellísimo-Dije ahora dando un enorme abrazo a cada uno--Es para hoy en la noche-Los mire con asombro--¿Que? ¿Por que para hoy en la noche?--Hoy haremos una hermosa fiesta en el quincho de la universidad-Sonreí con satisfacción--Bien, veremos cómo sale eso--No creo que sea tan malo-Dijo Stefan con una enorme sonrisa plasmada en su rostro-Puede que tengas una sorpresa más-Eleve mi ceja con astucia-Pero deberás dejarte ir, y no ser...--¿Tan antisocial?-Una pícara sonrisa salió de el-Lo voy a intentar-Me levanté y lo bese una vez más, jamás me cansaría--Te esperamos afuera-Les sonreí. Cuando salieron al fin, me adentre a la ducha..-(...)Ya cambiada y lista, desayunamos y nos encaminamos a la universidad. La jornada fue algo densa, y lo peor de todo, es que Damon ya es popular de boca en boca, y lo otro es que Stefan y Bonnie tuvieron que irse para hacer un proyecto, cada uno con su grupo. En cuanto a Damon, se enteró de mis cumpleaños, y rara vez es bueno conmigo, y esta vez fue de esas veces raras. Me invitó a tomar un café con el, y lo más sorprendente, que lo pago todo el. Claro, que le cuesta con los millones que tiene en su banco.Así era el, irritante mente sorprendente.-¿Ahora me das café?-Le pregunté mirando su rostro con total asombro--¿Que es lo malo? Intento hacer las cosas bien, no lo arruines-Una graciosa sonrisa inevitable se me escapó de entre mis labios..--¿Y qué quieres decir con hacer las cosas bien?-Ahora tome del café, pero al instante mi asco llegó como humo. Casi lo escupo, estaba caliente para colmo parecía que le puso sal-Esto está asqueroso-Deje el café en la mesa y lo mire con reproche--Crei que te gustaba lo amargo, como lo eres vos-Oh Dios ¡Era tan idiota!--¿Y así quieres empezar bien?--No hay otra forma entre nosotros ¿O si?-Suspire aún molesta--Eres impredecible-Dije ahora tomando una galleta--¿Impredecible?--Si, impredecible-Tome mis cosas para empezar a irme--¿A dónde vas?--Stefan me está haciendo una fiesta para mi cumpleaños--¿Es una invitación?-Me interrumpió. Me reí inconciente--Vale, ve si quieres. Pero no será de tu agrado, será una... Amargada fiesta-Su risa era contagiosa--Vere lo que hago entonces-Le sonreí y empecé a caminar en dirección a el departamento que comparto con Bon. Aún podía sentir su mirada en mi espalda-(...)Acá estaba, parada frente al espejo mirando mi aspecto. Me sentía mal, no, horrible, enojada. Stefan no podía venir, dijo que tenía un proyecto que hacer, y lo peor de todo es que se que ya terminó el proyecto, sus compañeros vinieron a la fiesta. Aspire aire y trate de controlarme.-Llora si quieres-Mire través del espejo el dueño de esa voz, era Damon--No voy llorar--Puedes hacerlo, es tu cumpleaños-Yo solo sonreí nostálgica. No estaba muy de buen humor-Escuché sus pasos acercarse, me di media vuelta y lo mire. El estaba bastante cerca.-Te traje un regalo-Lo mire exaltada--¿Un regalo?--A veces pienso en ti-Por un momento, solo un momento, mi corazón se paralizó al ver sus ojos. Saco una pequeña cajita de su bolsillo trasero, era pequeña y negra. La abrió y me permitió ver un antiguo collar, y al instante lo reconocí--Mi collar-Mire el collar y luego a el, una enorme sonrisa se dibujó en mi rostro- -Recorde que amabas este collar, y una prima mía lo tenía, así que se lo compre-Me lo quede viendo--Se lo había vendido a una mujer para yo poder comprar mi primer celular-Estaba más que emocionada-Tome el dije en mis manos y pase mi dedo pulgar por el, Stefan me había regalado ese collar, era muy importante para mí, pero cuando mi familia se había quedado en la ruina, mi celular se había roto, y debía comprarme uno, para poder comunicarme con mi familia lejos, así que hable con Stefan, y yo no quería me prestase plata, así vendí el collar, que en ese entonces valía lo que uno.Eleve mi vista, sus ojos delinearon brillo en su rostro, podía sentir mi sangre palpitar con rapidez. Quite mis manos del collar y deje que el lo tomara, me di media vuelta quedando frente al espejo. Ví que el saco el collar de la caja, corrí mi cabello para que el lo pudiera colocar.Su piel rozo la mía, y ahí es cuando mi corazón se detiene. Cuando puedo ver en el lo bueno. ¿Cuántas veces ví lo bueno en el? Solo dos veces. Hoy es una de ellas.Me quedé admirando su rostro mientras el ponía el collar, era un hombre hermoso, sexy. Tenía la piel perfecta, pómulos altos y pronunciados con un rosa que parece rubor. Labios llenos y rosados inteso, con un formato pequeño. Me fijé en sus manos, si, eran tan masculinas, tan varoniles. Al terminar de colocar el collar me di la vuelta, la respiración se esfumó al notar lo cerca que estábamos. Su perfume lleno mi ser, invadiendo mi calor.-¿Vamos?-Dijo ahora poniendo su brazo, sonreí y una dulce risa salió de mi- Lleve mi brazo enredandolo con el de el. Sus brazos eran fuertes, pronunciados. Aspire aire.Bajamos a donde era el quincho, estaba lleno de gente, todos los de la universidad y otros eran viejos amigos de la secundaria. Sonreí, algo de alegría tapo toda aquella nostalgia.-¡Feliz cumpleaños!-Gritaron todos al verme al final de la escalera-Damon me extendió una copa con sidra, el ya tenía una, todos elevaron las copas y brindaron. Tomamos de ella.Si no fuera por Damon, hoy mis ganas por festejar se hubieran ido conmigo a casa, pero no. Tenía ganas de festejar. Tome otra copa y esta vez me giré hacia Damon.-Al final no es tan malo que vengas-El con su típica arrogancia deleitado por mi comentario sonrió--Soy fácil de querer--Y no olvides que también odiar, puedes hacer que las personas se confundan-Una agradable risa escuché de su parte--Espero que ese odio lo puedas olvidar o si no, te haré que lo olvides-Me quede bastante sorprendida ante sus palabras--Entonces espero olvidarlo por mi misma-El volvió a reír--No creo que desaproveches la oportunidad de que te haga olvidar-Fruncí mis cejas, por un instante lo mal pensé, pero no. No era posible con el, así que solo sonreí. Repentinamente quito mi copa y dejo la del en la mesa que estaba junto a él. -Es tu cumpleaños, bailemos-Extendio su palma para que la tome. Estaba extrañada-¡Oh vamos! No seas amargada-Con eso dicho una mirada de reproche me miro, Damon era manipulador--Bien-Dije algo resignada, tome su mano, y como pensé; su calor me envolvió invadiendo hasta mi respiración-Me llevo al centro de la pista y se puso a bailar, y como yo solo movía mis pies, el tomo mis manos y me hizo bailar, me alejo y luego me giro, y luego me volvió a alejar esta vez girando y luego me acerco a su el, con rapidez, choque contra su cuerpo, me reí, era divertido.Al fin y al cabo, Damon es mi compañía en el día de mi cumpleaños y no mi novio.

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