Alexia nació de manera oficial una noche de desvelo, de tormenta y truenos.
La primera vez que se topó en mi camino, la ignoré por completo.
Alexia suele andar sin rumbo, sin ataduras ni correas, y sin embargo siempre hay un hilo que me ata a ella.
Alexia suele visitarme en sueños y me dedica un par de palabras, unas cuantas canciones y algún que otro insomnio.
Sueña despierta que algún día dejará de ser oruga y se convertirá en mariposa en alguna primavera que la pillle despeinada.
Alexi no sabe su nombre, no sabe que existe. Se imagina que es intangible y se deja llevar por el frío infernal.
Se cuela por los poros de mi piel y soy soy un marioneta hasta que decide marcharse a algún al que ella llama hogar pero no tiene ubicación fija porque Alexia es nómada y no sabe lo que es un hogar.
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Poemas.
PoetryRecopilación de poemas que ocurren en mi cabeza y no se callan hasta que los escribo.