C A P I T U L O 9

4.1K 287 6
                                    

Narra Alvin

Tras ver como ese chico, mataba a Sebastián y escucharle decir que no estaba hecho para ser un vikingo, me levanté del trono y camine hacia este, para ver cómo esté toma de nueva la espada y la apuntaba hacia mi, mientras yo me acercaba a el

--Quita eso de mi camino...---le dije

--No...---dice el chico, por lo cual tuve que quitársela a la fuerza, para seguidamente empuñarlo, haciendo que este cayera al piso y se quedara mirándome con fastidio

--Mientras no aceptes mi propuesta, chico...---le dije

--Tu nunca volverás a ver a tu dragón...---le dije

--Ni volverás a saber que es lo que se siente ser libre...---le dije, para luego darle la espalda y caminar lentamente de regreso hasta mi trono, pero antes de que llegara, este se levanto y dijo "Espera..."

--Si acepto tu propuesta...---dice el chico con resignación

--Que garantías hay de que...---lo Interrumpí antes de que pudiera continuar

--Por eso no te preocupes...---le dije

Narra Hipo

El escuchar que este me dijera que no me preocupara era motivo para preocuparme, pero sabía que si no aceptaba, no podría averiguar dónde tienen a Chimuelo, por lo que me acerque aún más a este y le dije que aceptaba, para luego hacer que lo siguiera hasta una de sus bases del otro lado de la isla, donde me presento a la persona que se encontraba cuidando en ese momento allí, el cual se llamaba Viggo

--El va a ser tu compañero de ahora en adelante...---le dice a Alvin, para luego darse la vuelta y marcharse de allí, dejándome a solas con este.

--Por que estás aquí...??---Pregunto Viggo, al cual le conté todo lo que me había pasado desde que llegué a la isla, por lo que lo único que logré conseguir de este, fue una pequeña risa, para luego darme una palmada en la espalda y decirme "Ya te acostumbras a este lugar..."

⚡⚡⚡⚡⚡

Mientras en la Isla de los Marginados, Hipo estaba a punto de tomar una mala decisión, los chicos se encontraban reunidos en el ruedo listos para entrenar antes de la siguiente prueba, pero se quedarían con las ganas, pues Estoico aparecería para avisarles a estos que este lugar iba a estar cerrado por una semana, debido a unos arreglos que le iban a ser, cosa que no le gusto a ninguno de ellos, pero que aún así tuvieron que aguantarse eso, pues no podían hacer nada al respecto

Narra Astrid

Después de que Estoico se marcharán, luego de decirnos de qué el ruedo no iba abrir sus puertas durante una semana, los chicos y yo nos quedamos hablando allí por unos minutos, hasta que cada uno empezó a irse por su lado, dejándome a mi allí.

Al no tener nada que hacer, empecé a caminar en dirección al muelle, cuando de repente me detuve, para ver el camino por el que Hipo siempre se iba a aquel lugar donde lo descubrimos con "su dragón", por lo cual me dio algo de curiosidad, y decidí ir hasta allá.

Al llegar, vi todo tan calmado que me dieron ganas de regresarme inmediatamente, hasta que vi de reojo la cabaña, a la cual decidí entrar, para ver esta como muchos papeles en el piso, y muchas otras cosas a las cuales no le di mucha importancia, por lo que minutos después de observar todo espero, me di la vuelta para salir de la cabaña, cuando de repente, vi algo que me llamo mucho la atención, la cual estaba llenando de polvo, por lo cual lo tome y lo limpie, para darme cuenta que este había conservado un dibujo que le había hecho hace muchos años atrás, lo cual me lleno de nostalgia, así que como no había nadie y sabía que este no volvería más por del destierro, me lo lleve para mí casa, a la cual apenas llegué, lo puse sobre la mesa, para seguidamente tirarme sobre mi cama y quedarme dormida.

CONTINUARÁ

Corazon MarginadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora