2: Verde sí, rojo no

310 21 1
                                    

Llegamos a la fiesta y todo era aun mas grande, brilloso y escandaloso de lo que me esperaba, literalmente ahora si que no escatimaron en gastos con nada, parece como si estuviera en Tomorrowland o algo así, todo es muy grande, muy espacioso, hay una increíble cantidad de gente, es un club extremadamente grande donde caben al menos unas tres mil personas.

Antes de poder pasar a donde estaban todos, hay una enorme cola afuera del club donde supongo que todos los que ahí están, esperan para poder pasar.

Yo me dirijo al final de la cola, la cual no logro ver porque es muy larga, pero siento que Scott me detiene.

— ¿A donde crees que vas hermanito? - Pregunta él soltándome el cuello de la camisa.

— ¿Al final de la fila no? - Respondo irónicamente como algo obvio, pero a manera de pregunta.

— ¿Y eso para que? Yo puedo entrar y salir cuando me plazca, soy el chico mas popular de la universidad - Dice con su tono de arrogancia que muchas veces lo caracteriza.

— Scott, tú te graduaste hace dos años, ya no formas parte de la universidad - Le digo cruzándome de brazos.

— Pero aun tengo poder, solo ven - Me toma del brazo y me guía hasta la entrada donde hay dos tipos gigantescos y muy fornidos con traje negro y lentes oscuros cuidando la entrada y al lado izquierdo esta la fila de gente mientras que en el lado derecho, hay un hombre delgado con una gorra que lleva el emblema del local, sentado y apoyándose en una pequeña mesa que tiene unas cintas de varios colores.

Mi hermano llega con una sonrisa genuina, como si ya conociera al sujeto.

— ¿Que tal Blaise, como va todo? - Entonces si lo conoce - Dame una cinta roja por favor.

Mi hermano le da el dinero y el hombre toma una cinta y se la coloca a mi hermano en la muñeca ¿Para que Diablos se utiliza eso?.... Scott se hace a un lado y el hombre me ve dubitativo.

— ¿Quien es el chico Scott? - Pregunta sin quitarme la mirada de extrañeza.

— Él es mi hermano Blaise, comenzará a estudiar el lunes en la universidad - Responde mi hermano como si fuera la cosa mas obvia del mundo.

— Oh wow - Responde el hombre - El hermano menor del gran Scott Finix, el chico mas popular de la Universidad, impresionante, es obvio que todos esperan grandes cosas de ti.... Dejame colocarte tu cinta roja.

— Espera Blaise - Lo detiene mi hermano - Explicale para que son las cintas.

— Oh sí, bueno te explico rápido, como esta es una fiesta donde hay demasiada gente y queremos evitar peleas debido a confusiones, hemos creado estas cintas de diferentes colores, las cintas rojas son para los heterosexuales como Scott y tú - En ese momento mi corazón comienza a bombear rápidamente pero no detengo al sujeto, dejo que siga con su explicación - Las cintas amarillas son para los bisexuales, los blancos para los pansexuales, los negros para los asexuales y los verdes para los homosexuales o lesbianas, así antes de conocer a alguien, ya sabes para que bando tira y se evitan confusiones y peleas innecesarias.

En ese momento entendí porque Scott quería que Blaise me explicara todo eso, él no quería que yo estuviera al tanto de eso, lo que quería era que yo escogiera el color que debía ser, porque el hombre ya había dado por echo que debía ponerme el color rojo igual que a Scott, mi hermano me está presionando, quiere que me sincere conmigo mismo y con los demás.

— ¿Entonces Tayron? - La voz de Scott me saca de mis pensamientos - ¿Que color vas a escoger?

— Pues obviamente el rojo - Dice Blaise tomando mi muñeca y colocándome la cinta, yo prefiero quedarme callado y no decir nada mientras que Scott me mira con cara de desaprobación y decepción ¿Que esperaba que hiciera? esto no es fácil para mí, además hay mucha gente viendo.

Ambos entramos y se escucha el bullicio de mas de tres mil personas en aquel club, dicen que aquí hay de todo, alumnos, profesores, personal de limpieza, de comedor, de dirección, de control de estudios, de biblioteca y gente que no tiene nada que ver con la universidad, antes de poder perdernos, Scott me detiene y me dice en voz alta al oído para poder escucharlo a través de la música.

— ¿Sabes que el rojo no era tu color verdad? - Me dice con mirada desafiante.

— No me presiones Scott, quiero hacer esto con calma, además me parece degradante que quieran diferenciar nuestra sexualidad con colores - Le digo al oído con el mismo tono para que pueda escucharme.

— Solo digo que cuando vean tu cinta, solo se te acercaran chicas.

— ¿No era lo que tu querías? - Le respondo de mala gana.

— Sabes que no me refiero a eso - Responde tranquilamente - Lo que quiero decir es que ahora debido al color de esa cinta vas a ahuyentar a las personas en las que si puedas estar interesado, por eso te digo, hubiera sido mejor.... Verde sí, rojo no.

— Creo que es mejor así, no vine a emparejarme con nadie - Respondo secamente y levanta los brazos en son de paz, odio cuando me hace quedar como el malo, él se pierde entre la gente y dice que me buscara a las dos de la mañana para irnos, pues mañana comienzo la uni, yo asiento dándole a entender que estoy de acuerdo, aunque no entiendo cual era su afán de traerme si igual me iba a dejar solo.

Pido un coctel sin alcohol en la barra, no pienso embriagarme y mucho menos perder el control o la noción del tiempo en un lugar como este en el que puedo salir hasta violado.

Después de dos cócteles, observo por un rato a la gente bailando y disfrutando de manera alocada, bebiendo sin parar y riendo por cosas triviales, después de un rato, veo que son la una de la mañana, falta una hora para Scott me busque y yo ni sé en que se me fue el tiempo.

Bueno sí sé, veía chicos lindos.

Lastimosamente, todos los que veía que me atraían, tenían cinta roja o si era verde, venían acompañados por una pareja, hubieron quienes me miraban con algo que podría denotarse como lujuria, pero, en cuanto veían el color de mi cinta, volteaban la mirada.

Era irónico que a pesar del color de mi cinta, ninguna chica se me acercara y por supuesto que yo no tenía ningún interés en acercarme a ellas, ya estaba harto de todo eso así que pensé en salir de ahí y esperar a mi hermano afuera, pero antes de llegar a la salida, veo una puerta entre abierta con escaleras de mármol que van hacia un piso superior, al principio evité entrar porque creí que era una zona privada, pero al ver a una pareja de dos mujeres bajar mientras reían, me dio curiosidad, así que subí, era bastante alto, incluso el sonido del bullicio de abajo se silenció, llegué al final encontrándome con una terraza.

No era muy grande, pero tan poco tan pequeña, creo que estaba echa a la medida, estaba solo, excepto por un hombre que apoyaba los codos en el respaldo del muro y yo, aquel hombre veía la ciudad como si fuera lo mas maravilloso del mundo, ni siquiera había notado mi presencia.

Afuera se podía escuchar la calma y la tranquilidad y la vez se podía escuchar un poco del ajetreo de la ciudad, todo estaba iluminado en los edificios, lo cual compensaba un poco la falta de luz que había en la terraza, pero era agradable, creo que me quedaré y llamaré a Scott para que me busque aquí, no pienso volver a bajar.

Me apoyo también del respaldo del muro y observo lo maravillosa que puede ser la ciudad.

— ¿Hermoso no crees? - Escucho esa imponente, pero dulce voz a mi lado, sé que es el hombre que vi, pues no hay nadie mas aquí arriba.

— Sí, es hermo.... - Me había girado para contestarle, pero me quedé estático y sin habla cuando lo veo, antes no lo había detallado por la oscuridad, pero ahora que lo tenía mas cerca, no podía creerlo.

Piel clara y ojos muy profundos, azules como un cielo despejado, portaba unos anteojos que lo hacían lucir demasiado sexy, su cabello es castaño con una combinación entre liso y ondulado, cejas pobladas, su sonrisa era impecable y perfecta, sus labios se veían suaves y carnosos, era al menos quince centímetros mal alto que yo, su cuerpo estaba muy bien trabajado, pues se podía diferenciar sus músculos a través de la delgada camisa que portaba.

El hombre mas bello que haya visto jamas.

Destinos cruzados: (Trilogía enlazada 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora