Cap. 3

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No sé por que lo hice pero lo abracé no me importó si estaba a punto de desmayarse ó dormirse, lo abracé con fuerza sintiendo el olor de su perfume combinado con el alcohol que habría ingerido anteriormente.

Creo que el alcohol me hizo demasiado segura y acosadora.

Simplemente me dejé llevar abrazandolo, fueron varios minutos que pasaron para que él apoye su cabeza encima de la mía apoyando sus brazos en mi cintura quedandonos así por varios minutos.

Me intenté separar de él pero él no se movía, levanté mis manos tomandolo de las mejillas levantando su rostro, y vaya que estaba inconsciente.

Se había dormido y me uso como almohada.

Hice una mueca incómoda soltando su cabeza con cuidado de lastimarlo al pinche poste por que estaba jodidamente alto, lo empuje como pude pero fue imposible por que mientras mas intentaba que me suelte más se aferraba a mí.

- Tom, Tom, Tom despierta.- hablaba mientras le golpeaba la mejilla rápidamente.- te vas a congelar y me vas a dejar sin pulmones o costillas buenas.

Él gruño murmurando varias cosas  las cuales me parecian en otro idioma, pero lo bueno fue que me soltó y pude hacer que despierte, hice que su brazo rodee mis hombros y yo tomandolo de la cintura empezamos a caminar lentamente cuidando que no se me caiga por dar un paso en falso.

Caminé varias cuadras sola sosteniendo a un hombre demasiado alto y pesado que se encontraba inconsciente por lo ebrio que estaba.

No voy a mentir, me dolian las piernas y en sí todo mi cuerpo por sostener tanto peso, pero si lo dejaba tirado en una esquina durmiendo sería demasiado grave para su vida, moriría de hipotermia ó coma etílico.

Preferí llevarlo conmigo hasta mi departamento, luego rebuscare entre sus cosas y llamare a quien sea para que venga por él.

No se como pude, pero logré llegar  viva a la puerta del edificio donde vivía, abrí la puerta con mi mano libre dejando a Tom apoyándose en la pared.

Subí a mi piso abriendo la puerta agradeciendo de que abriera al primer intento caminé con cuidado al sofá  acostandolo en él.

Estaba dormido como una piedra, tome una bocanada de aire, estaba demasiado cansada y mareada.

Lo dejé descansar entrando a mi habitación quitandome la ropa tomando una toalla enrrollandola en mi cuerpo caminando a la ducha.

Media hora despues salí con mi pijama puesta secando mi cabello.

Corrí a mi cama acostandome en ella soltando un suspiro de satisfacción, estoy agotada.

Lo único que planeo ahora es dormir hasta el fin del mundo.

- Que exagerada eres Max- murmure en voz baja.

D R U N K       》 T.H.《 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora