Cap. 4

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No se cómo es posible pero entre sueños escucho el maldito teléfono sonar, ¿Que los hace llamar tan temprano? Joder, estoy agotada...

Entre abrí un ojo tomando el teléfono contestando la llamada.

-¿Hola? -murmure con la voz algo ronca.

-¡Que perra! ¡Me dejaste sola! -gritó por la otra linea mi amiga lastimandome mi tímpano.

Suspire sentandome en la cama.- Tuve que irme por que tuve un inconveniente de último minuto.

-Tivi qii irmi pir qii tivi in incinviniinti di iltimi miniti.-me imitó haciendo que ría al escucharla.- El no alimentar al gordo Tony no es un inconveniente.

-Bien, lo siento, estaba cansada y preferí ir a dormir, ahora déjame dormir.-murmure acomodandome en la cama tapandome entera sosteniendo mi teléfono.

-No te voy a dejar dormir, ya pasaron de las diez y te necesito contar todo.-replicó.

Gruñi en voz baja cerrando los ojos.- Es temprano.-lloriquee.

-Maldición haces mucho ruido, duérmete ya.-gruño una voz masculina rodeando su brazo en mi cintura apegandome a él.

Me quedé petrificada al igual que Charlie al escuchar esa voz.

- ¡QUE PERRA, TE FUISTE POR QUE ENCONTRASTE CON QUIEN PASAR LA NOCHE! -gritó sin importarle el lugar dónde se encontraba ó mi oído.

-Charlie, yo no se quién es, no recuerdo haberlo traído a casa ni haberme acostado con él.-susurre sin voltear a verlo evitando volver a despertarlo.- Ayúdame...

-Voy para allá, cuando llegue me cuentas todo, por que eso se llama tener sexo con un desconocido estando ebria.-colgó.

Por otro lado yo me quedé en mi lugar sin moverme, no puede ser, ¿Que tan ebria estaba?

Aunque... esto se siente demasiado cómodo, y él esta calientito como para volver a quedarme dormida en sus brazos.

D R U N K       》 T.H.《 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora