Vida de humanos. Camren.

Capítulo 2 "Frutitas"

Era una bonita mañana, Camila se despertó, parpadeando varias veces, notó que había una ventana en su nueva habitación, se paseó junto a ella y paró para abrirla, el viento era algo frío y lograba trasmitirle una extraña sensación.
El día parecia estar nublado, más tarde seguro llovería.

Camila bajó, y sólo había una nota pegada en la nueva nevera que estaba en la nueva cocina.

" Tu padre y yo ahora tenemos que estar en el negocio temprano, los electrodomésticos y muebles no se venderán solos!... Hazme un favor y lee el primer borrador del nuevo libro de tu padre y lleva a Sofía a la escuela, está a un lado de la tuya, alguien las recibirá.
Con amor, tu madre. =) ♡"

Camila solo suspiró, esperando que fuera fácil el día.

- Levantate, mija!- Gritó Camila entrando a la habitación de su hermana.

- Tú no eres mi mamá... largo. - Dijo de malas.

- Pues ahora con mamá y papá ausentes, yo soy la autoridad en la casa y te levantas...- Dijo, la más pequeña solo gruñó y Camila no era la clase de chica que le gustara lidiar con niñas rebeldes, así que tomo un extremo de la sábana que cubría a la menor y tiró de ella, destapando a su hermana.

- Cinco minutos más...- Se quejó, haciéndose bolita a mitad de la cama.

- No te lo queria decir... pero sabes quien viene a la escuela de acá?...- Preguntó, impregnando misterio en la mente de Sofía haciendo que se levantara de la cama muy interesada.

- Quién?... - preguntó en un susurro, estando más despierta incluso que Camila.

- Bob Esponja...- Mencionó, como si su hermana le fuera a creer. Y la menor solo correspondió con una cara de decepción y confución, claramente notó que la estaban timando.

- Buen intento, se que Bob Esponja es una simple animación... No tengo tres años- respondió indignada.

- Me atrapaste, Sofí... pero yo si quiero ir a la escuela, a la mía asiste Shina...- Mencionó antes de un corto silencio.

- ...De The Lilas?...- Preguntó la pequeña boquiabierta.

- Si... pero como no irás a la escuela, supongo que tendré que hablarle sólo yo...- Finalizó, y la pequeña niña salió disparada a la caja que estaba en un rincón de su habitación, sacó un cambio de ropa y miró a Camila a los ojos...
Ambas lo sabían...
Tendrían que pelear por quien se bañaría primero...
Luego del pequeño duelo de miradas Camila salió disparada junto con Sofi hacia el baño... Pero la menor le ganó, dejando a Camila afuera.

- Tu ganas... voy a preparar el desayuno, avisame cuando termines...- Avisó Camila, recibiendo un "Aja" muy apresurado por respuesta.

Camila caminó a la cocina y revisó la alacena, donde estaba el único sartén en el que hubiera podido preparar posiblemente algo comestible... Pero encontró una pequeña nota

"Llegaste hasta aquí, muchas felicidades por tratar de cocinar algo. Pero ahora revisa la nevera."

Y Camila obedeció la nota que era un trozo de papel mal cortado que parecía tener la letra de su madre. Y al abrir la nevera encontró otra nota

" Habrás notado que no hay nada para cocinar, en la alacena hay una caja de avena, que no tiene avena pero sí dinero, como para que Karla y Sofia vayan a comer a algún buen lugar y se compren algo de ropa nueva después de la escuela."

Camila halló el dinero, y recogió las notas, a veces los pequeños juegos que incluían notas le desesperaban pero hoy se sentía totalmente diferente y llenas de paz interior.