La otaku y el popular.

Capítulo 5.

Narrado por David.

POR FIINN!!! EXCURSIÓN!!!!!!!

A ver, en realidad la excursión es una mierda, no me hace ninguna ilusión ir a un museo de arte moderno, pero saber que eso me librará de 5 horas de clase es suficiente excusa para emocionarme.

No es muy común que hagamos excursiones, así que cuando hay una siempre se aprovecha al máximo, aunque cada uno a su manera:

Los más listos cogen y directamente se saltan la excursión y las clases. Yo lo intenté, pero no coló que estuviera enfermo, así que acabé viniendo a clase obligado por mi madre.

Por supuesto, también están los que disfrutan las excursiones de verdad, los que están deseando ir a la excursión para aprender algo.

Lo del autobús es un problema, mi novia no viene a la excursión porque no está en mi curso, y todos mis amigos han conseguido hacer pellas, así que estoy totalmente solo, más o menos.

La tutora empezó a pasar lista, no se muy bien para que si sabe perfectamente quienes faltan.

-Alba! No está.

-Pablo! No está.- Es alucinante, ni siquiera se molesta en mirar si han venido, solo lo deduce.

-David! No est-

-Aquí profe, presente y listo para la excursión!- dije yo con sonrisa de tonto, me encanta dar a los profesores con un canto en los dientes.

-Que sorpresa, no esperaba que nos deleitaras con tu presencia!- dijo ella, no se si lo decía con humor o con condescendencia.

Ya estaba subiendo al autobús cuando me puse a pensar:

-Y que hago yo ahora sin amigos todo el camino? bah, me echaré una siesta.

Y a eso me dispuse, me senté en el primer sitio libre que pude ver y me puse la capucha de la cazadora. Ya llevaba así unos minutos cuando me interrumpieron.

-Así te vas a pasar todo el viaje, no vas a socializar con nadie?- la voz dulce que me hablaba, aunque no conseguí identificarla a la primera, era de Enma, que estaba de pie junto a mi asiento sonriéndome y aguantándose un poco la risa.

-Debo de tener cara de dormido- pensé yo por un momento.

-Es que ya sabes que madrugar no es lo mío, así que aprovecho y recupero horas de sueño.-dije yo incorporándome para seguir hablándole.

-Así solo vas a c-

Enma siéntate en algún sitio, no puedes estar de pie ahí en medio.-le gritó la profesora.

-Lo siento.- respondió levantando la voz para que pudiera oírla- Puedo sentarme contigo?- preguntó un poco más bajo mirándome.

-Si claro, no vaya a ser que te castiguen por mi culpa jajaja.- dije yo intentado despertarme un poco, aun seguía con sueño.

-Lo que te decía es que si haces eso no harás más amigos que los que tienes ahora.

-Bueno, a parte de ti y de mis amigos no hay nadie más que merezca la pena realmente.

-Eso no es cierto jajaja, a mis amigos les caerías bien.

-No mientas, están justo ahí y ninguno de ellos me mira con muy buena cara, sobretodo Jesús.

-Bueno... eso es porque no te conocen, tienen muy inculcado esto de populares y raritos no se mezclan.

-Si... mis amigos también... sabes la frase famosa?