Darkness and light - REESCRIBIENDO

Capitulo 5. ♠ Déjame conocerte ♠ REESCRITO

Déjame conocerte.

Viernes 10/Octubre/2014

Las horas pasaban sin prisa, entre una larga charla sobre ambos, hablar con ella era tan fácil como respirar, los temas de conversación nunca se terminaban, mi cerebro absorbía ávidamente todo lo que esta hermosa chica decía.

Sabía que tenía 21 años, vivió en Montesano hasta los 5 años cuando sus padres se divorciaron, ella y su madre se mudaron a Las Vegas donde conoció a su segundo esposo por algún motivo al cumplir los 13 años Anastasia regreso a Montesano a vivir con su padre a Portland hasta que se mudó a Vancouver para estar cerca de la Universidad Estatal, al parecer tenía un par de meses de haber empezado la universidad – a los 17, casi 18 años - cuando la dejo para dedicarse al modelaje y luego a la actuación, no fue reconocida en sus inicios pero aun así ganaba más que suficiente para vivir y ayudar a su padre hasta que un día, a sus 19 años, fue seleccionada para un papel protagónico en una película importante que le valió varias nominaciones a los Teen Choise, su fama creció conforme pasaba el tiempo convirtiéndola en lo que es ahora dos años después de sus inicios en Hollywood, una talentosa actriz y modelo reconocida mundialmente. Hoy vivía en Los Ángeles, pero vino a Seattle a pasar una temporada con su mejor amiga antes de empezar a promocionar su nueva película que se estrenaría en dos meses.

Y descubrí que el tipejo de las fotos es el hermano de su mejor amiga, ambos hijos de Edmund Kavannagh, fundador de Kavannagh Media. Al parecer eran muy buenos amigos, pero eso no me dejo más tranquilo.

Había algo en sus ojos, una tristeza y soledad, que opacaba ese brillo travieso que en las últimas horas había descubierto. Esperaba que confiara en mí y me contara lo que la preocupaba y si había algo que yo pudiera hacer para hacerla sentir mejor lo haría sin dudarlo.

Por mi parte le conté como con ayuda de mis padres y mi abuelo Theodore funde mi empresa y que con mucho esfuerzo hoy era de las empresas más importantes del mundo, le hable sobre mi familia y lo mucho que los amo, aunque no lo demuestre, era fácil abrirme a ella, sus ojos podían mirar dentro de mi alma y desnudándome a su merced sin embargo había algo que no le dije. Me ganaría su confianza para conquistarla y luego hablarle sobre mis gustos en lo que se refiere a relaciones sexuales y con suerte ella se entregaría a mí. Nunca me considere un tipo de Flores y Corazones, pero si tengo que hacerlo para para poder ganarme la confianza de esta hermosa princesa de ojos color zafiro lo hare.

¡Maldición! Me tiene hipnotizado. Si ella me dice que salte le preguntare que tan alto quiere que lo haga, si me pide que me lance de un vehículo en marcha yo lo hare solo para complacerla. Para tenerla como mi sumisa.

¿Pero es solo eso Grey? ¿O te estas enamorando?

Aparto rápidamente esos pensamientos de mi cabeza, no sé qué es el amor, nunca lo he sentido y tampoco pensé que eso pasaría algún día. Solo la quiero como mi sumisa, la moldeare en mis manos haciéndola perfecta para mí.

Solo quiero follarmela hasta que me aburra, no puedo darle más que eso. Anastasia tiene que saberlo, no quiero que se ilusione esperando algo más que eso.
Ella merece a alguien mejor que yo, estoy dañado... No podre hacerla feliz.

¿Entonces porque el solo hecho de pensar que algún día estará con alguien más te hace enfurecer?

-¿Christian? ¿Estás bien? -la dulce voz de Ana me regreso a la realidad.

-Lo estoy Anastasia. Solo pensaba- murmure en un amago de sonrisa.

-Uhmm ¿Puedo saber en qué pensabas? -su mano apretó la mía, aun sujetábamos nuestras manos como una pareja que no desean soltarse pase lo que pase. Su piel se sentía muy bien junto a la mía. Su mano pequeña y delicada encajaba a la perfección con la mía grande y fuerte.