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05-Green pasto ilusionista

Aquella tarde que había pasado con Joshua fue una de las mejores, Jeonghan lo sabía muy bien y eso le hacia inexplicablemente feliz, además del hecho de que con el castaño se habían vuelto más cercanos, ahora almorzaban juntos los días disponibles, hablaban cada que podían, al toparse sonreían y charlaban con confianza, se juntaban en la biblioteca para terminar sus deberes.

Había que admitir que cada encuentro por mera casualidad alegraba sus mañanas y aceleraba sus corazones, y mientras Jeonghan no sabía la razón, Joshua la conocía perfectamente.

Por otro lado, se encontraba su misterioso admirador que lo hacía sonreír bobamente con cada una de sus cartas y llenaba su pecho de un cálido hormigueo y una extraña sensación de revoloteo en su estómago, como si se hubiera comido mariposas y éstas volaran ansiosas en su interior de un lado a otro.

Todo esto le hacía sentir confundido pero decidió ignorar sus sentimientos y bloquear aquellos pensamientos para enfrentarlos después, rogando hallar la respuesta sin necesidad de buscarla.

De nuevo era viernes y justo le habían entregado el examen sorpresa de química de hace una semana, y como supuso, aplazó la prueba.

Tenía en claro que química lo llevaba arrastrado por el suelo y la profesora tan amable le recomendó un tutor para que le ayudará a subir sus calificaciones o terminaría por reprobar la materia.

Jugaba con sus dedos aburrido mientras mordía el interior de sus mejillas incómodo, se encontraba sentado en la sala pequeña de espera que poseía la dirección administrativa de la institución, esperando conocer el nombre del que sería su nuevo tutor para ver cuando podrían empezar las clases extras.

La secretaria no hacia más que teclear cosas en sus monitor y el aire le empezaba a pesar, que lento día.

[…]

—¡Por fin!—exclamó en un suspiro al recibir lo que buscaba.

El nombre de su tutor era; Wen JunHui. De seguro era un estudiante de intercambio, pudo suponer por la impresión de extranjero impregnada en aquel nombre.

Las clases comenzarían está tarde, y ya que su reunión con el consejo estudiantil fue pospuesta podría adelantar la hora prevista para terminar más temprano con su tutoría.

Había llegado a la biblioteca, el lugar más tranquilo para estudiar.

Estaba totalmente vacío y al ver unos libros sobre una de las mesas de lectura llegó a pensar que todo fue obra de Jun, así que tomó asiento y se dispuso a ojear el contenido frente sí.

Lo que le sorprendió fue que al abrir la portada del primer libro se topó con el pequeño sobre, aquel que se había vuelto tan familiar para él.

¿como había llegado ahí? ¿acaso supo que estaría aquí? ¿estaría cerca? ¿estaría «él» aquí?

Miró a su alrededor pero todo seguía igual que antes, vacío, ni siquiera la bibliotecaria se encontraba ahí.

Relamió sus labios algo nervioso y abrió el sobre para leer la pequeña carta de su especial ‹Boy Color›.

N° five;

«¿Que tal todo, mi ángel?

Escuché que te fue mal en una de las prueba sorpresas de la señorita Joo

Pero tranquilo, no te desanimes. Todo estará bien

Siempre nos irá mal en una materia, yo soy terrible en gimnasia

Mi cuerpo no fue diseñado para moverse, está oficialmente comprobado

Mucha información, I'm sorry.

¡Color de hoy!

‹Verde›

Un color peculiar, ¿no?

Lo estuve investigando y representa salud

Y bueno, ahora que lo pienso nunca te he visto enfermar

A excepción de aquel crudo invierno, pero es entendible, además que ese molesto resfriado se volvió un gran momento, Eh.

Después de todo, medio instituto colaboro para llenar la cafetería con mantas para hacer el lugar más cálido sólo para ti, yo dejé ahí mi sudadera

Lo cuál fue algo tonto, nunca debimos dejar a cargo a Soonyoung pero bueno, todo valió la pena al ver tu comprensiva y amorosa sonrisa

Me encanta tu sonrisa...

Sé que eres muy sociable pero aún así necesitas tú propio espacio, en dónde puedas tener armonía y en esos momentos de solitaria paz te veo sostener la más bella y relajada sonrisa que he podido apreciar

Vives con los pies en la tierra, seguro de ti mismo mientras que yo sigo siendo fiel seguidor de mi fantasía de poder estar a tu lado

Eres pacífico mientras que yo me estreso por sentir lo que siento, sabiendo que está mal

Tus amigos se vuelven tu familia mientras que yo te observó a la distancia sumergido en el olvido

Eres naturalmente cuidadoso con todo lo que haces, fresco y ligero, pero yo sólo soy un torpe chico que no sabe que hacer con sus sentimientos, que cliché, ¿no?

En estos días pude pasar un pequeño tiempo a tu lado y mis esperanzas sean incrementaron

Espero que todas aquellas horas mirándote en la distancia sean recompensadas de alguna manera

Ahora solo pienso en vernos a los dos sobre el verde pastos, viendo el cielo, con nuestras manos unidas...

Ah

Hansol tenía razón, ver Titanic me hace mal ;—;»

•

Jeonghan se sintió conmovido, sin palabras, sus ojos estaban cristalinos por algún razón y sus pulsaciones se encontraban desenfrenadas por lo que agarró la tela de su uniforme al nivel de su corazón, pensando que esté podría salirse de su lugar en cualquier segundo.

De pronto la puerta se abrió repentinamente y por ella apareció su tutor junto con Joshua, parecían discutir por algo sin sentido, pero al verlo ahí sentado, y en aquel estado, se callaron abruptamente.

Al parecer se conocían.

Jun se veía confundido por su aspecto mientras que Joshua sabía perfectamente el porqué, por lo que su cuerpo no dudo en tensarse al ver la carta entre las manos del mayor de los tres presentes, quién notó la tensión en sus músculos.

Joshua no esperó más y salió corriendo de ahí.

Los dos restantes en la biblioteca no entendieron el porque de su huida más aún así el chino decidió empezar con su tutoría y Jeonghan no tuvo más opción que guardar la carta y preguntarse mentalmente a que se debía la extraña actitud del castaño.