04-Yellow de mochila extraviada

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Viernes por la tarde y sus ánimos sin aire. Y eso que no era un 23 de mala suerte.

Su día había sido pésimo y la verdad es que no veía motivo para sonreír, ni aunque fuera de mentira.

En primer lugar; su teléfono no sonó está mañana para levantarlo por lo que llegaría tarde, al ducharse juro ver cubitos de hielos salir de la regadera por lo helada del agua, no alcanzo a tener su “hora de belleza matutina 100% masculina”, su cabello parecía escoba, llegó tarde, lo regañaron, se olvido de la tarea pero por suerte lo salvo Seungkwan, más tarde tuvo un examen sorpresa que seguro reprobará, el club de canto cancelo la práctica y ahora no tenia como llegar a su casa porqué el último autobús que pasaba por su vecindario partió hace 15 minutos, ¿faltó algo? ¡Oh, si! Resbaló de la silla y tuvo una vergonzosa caída que alertó a todos sus compañeros haciéndolo quedar en ridículo.

Que hecho verga su suerte, ¿no?

Y para cerrar con broche de oro, una lluvia nupcial arribo justo en el momento en el que había decidido irse a casa a pie para no esperar el siguiente transporte.

Entonces, recalculando.

Estaba atascado en el instituto, con una terrible lluvia afuera, traía la peor pinta y debía idear una excusa para la terrible nota que sacaría en aquel estúpido examen sorpresa.

Caminando a arrastras llegó a su casillero, dejaría sus pesados libros para poder quitarse un peso de encima, literalmente. Sin embargo, al abrir la puerta metálica toda sus cosas se desparramaron cuál avalancha para acabar regadas en el suelo.

Ahogó un grito desesperado de ayuda en su garganta y se agachó a recoger sus libros y demás cosas, susurraba incoherencias con molestia.

¿Acaso el universo creó un complot contra él?

¿Dios lo odiaba?

¿era por faltar mucho a la iglesia?

¿acaso le lanzaron un embrujo justamente hoy?

¿podrá Wendy y Tiro Al Blanco saltar a salvo el barranco?

¿hotel? ¿trivernon?

¿que?

Metió todo lo que creía haber caído al pequeño local rectangular, más sus ojos se abrieron a tope al ver un pequeño sobre tirado sobre las sucias losas del pasillos, lentamente y olvidando su disgusto anterior en cuchillas se acercó a recogerla cuando otra mano se interpuso y tomo esté.

Los ojos, del ahora confundido Jeonghan, siguieron con la mirada aquella fina mano y continuó viendo, un brazo, un pecho, hasta toparse con la imagen completa de un menudo chico.

Por su uniforme supo que era del instituto, y hasta pudo reconocer que pertenecía a su mismo año.

El chico era casi de su altura, era de contextura delgada, su cabello estaba bien peinado y era de color castaño oscuro, tenía facciones finas y delicadas y una piel que se veía suave y blanca como porcelana.

—S-Se... Se le cayó esto—Tartamudió el joven castaño con timidez, parecía cohibido.

Pero Jeonghan no podía articular palabra alguna ya que estaba totalmente concentrado en admirar el rostro del chico y notó que se asemejaba a un ciervo, un tierno ciervo.

—…Oh, si. Gracias—Le sonrió volviendo en sí, recibiendo la pequeña carta entre sus manos.

Su vista descubrió el estuche de guitarra que cargaba en la espalda el castaño.

—Eres del club de música, ¿no?—preguntó con tranquilidad tratando de transmitir un poco de esta al castaño, ya que por alguna razón el chico junto así se veía muy nervioso.

—¡Si!.. Eh, digo, si, si—Soltó una risa al ver la reacción de su acompañante, sus ojos se habían iluminado en destellos similares a pequeñas estrellas que podría apreciar eternamente, se había emocionado. De seguro que amaba la música.

Sin darse cuenta pasaron toda la lluviosa tormenta sentados bajo el casillero del mayor, conversando como si fueran amigos de toda la vida que no se veían en años.

Conocieron cosas una del otro, y así Jeonghan pudo conocer su nombre; Joshua Hong.

Y se sorprendió al saber que compartían muchas clases juntos, ya que nunca antes lo había visto.

En realidad, el tiempo paso volando y sin esperarlo ya ambos, uno al lado del otro, se encontraban leyendo la carta de su ‹Boy Color›.


four;

«Henos otra vez aquí, soné poético UuUr

Esa carita me la enseñó mi mejor amigo, creó que las empezaré a usar más seguido, en fin

Hoy te vi desanimado...

Y me entristeció.

Creo que comparto contigo la frase “Yo siento lo que tú sientes”.

Aunque no funciona de manera viceversa...

En fin, empecemos antes de desviarme más del tema principal, ¿si? Si.

Amarillo

Es un color algo llamativo, ¿no te parece?

A mi sí, y te queda muy bien

Suele demostrar energía, brillantez y resplandor

Inquisitivo y curioso, nada se te escapa y eso es muy lindo. Nunca he visto que se te olvidé aunque sea uno de los cumpleaños de tus amigos, a mí se me olvido que comí ayer y ya no lo recuerdo

Normalmente ante cualquier situación buscas el predominio intelectual y racional

Pero aún así eres alguien optimista, claro, lógico, visionario y lo suficientemente confiable como para ser un confidente

El amarillo, al igual que tú, es alegre y cálido

Y eso te vuelve el centro de atención, de mi atención

Recuerdo haber estado tan distraído un día que te estaba observando que por error me llevé tu mochila...

Que por cierto, era amarilla.

Siempre quise disculparme pero la timidez y vergüenza me invadió así que la dejé en tu puesto al día siguiente, lo siento

Lo siento mucho, soy muy torpe.»




Jeonghan rió al recordar aquella situación. Casi se moría ese día ya que sus apuntes para los parciales estaban ahí y sin ellos de seguro que no aprobaría.

Y aunque Yoon no lo vio, Joshua se encontraba sonriendo levemente con un brillo indescriptible en sus ojos, como si mil cohetes y fuegos artificiales se hubieran activados en un alegre festejo con tal sólo escuchar la risa del joven de larga cabellera.

colors ; yjh + hjsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora