White and Black. {Ashton Irwin}

Mes seis.

Me quede real mente impactada. ¿Él había dicho aquello? ¿Real mente estaba enamorado de mi? Millones de dudas pasaron alrededor  de mi cabeza. No podía creer que el hombre que más daño me haya hecho este enamorado de mí. ¿Por qué? Si entonces está enamorado de mi, ¿Qué paso con Rose? ¿Qué hacía con ella, estando enamorado de mí?

—¿Qué sientes por mi?

Calle un momento, no sabía que decir. Fue como el momento más largo de mi vida, aunque en realidad no fueron ni 5 minutos, en los cuales me quede en silencio sin saber que decir.

—Lo que tú nunca llegarías a sentir por mi—Dije en un leve susurro. Y mis ojos cristalizados. He dicho mi más gran confesión.

Él guardo silencio. ‘‘La he cagado’’ pensé. Él se quedo callado, analizando lo que había sucedido, o tal vez, lo que había dicho.

Él se acerco hacía mi, y me abrazo. De los mejores abrazos que había recibido por parte de él. Mis lágrimas derramaron sin poder impedirlo.

—Claro que lo siento, te quiero, me gustas y… tendremos una hija… juntos.

¿Por qué me decía esto ahora? ¿Por qué no antes de arruinar nuestras vidas? ¡¿Por qué? Me derrumbe en sus brazos, luego me separe. No podía permitir que jugara de esta manera conmigo.

—¿Qué te ocurre?—Dijo Ashton confundido.

Me voltee y decidí  irme de la habitación. No soportaría este tipo de cosas, cree que puede tenerme con él cuando se le dé la gana. Salí de la habitación y él me persiguió y me jalo del brazo, trate de zafarme de su brazo pero no pude. Una oleada de terror me llego, podría ser capaz de hacernos daño. Su mirada era profunda y sentía como penetraba la mía.

—¿Me dirás que te sucede?— No estaba dispuesta a responder, pues a decir verdad, no sabría que responder—. Hey—Coloco sus manos en mi barbilla y la levanto.

Ya harta le respondí: — ¡Nada! A mí nunca me pasa nada.

—No me digas eso. ¡Te estoy esperando!—exclamo.

—Dejadme en paz. ¿No entiendes que no te quiero cerca?

—¿De qué hablas? Me acabas de declarar tu amor.

 

 

 

—No, no pongas palabras que jamás salieron de mis labios. Eres un estúpido por decirme lo que sientes a este punto de nuestras vidas. ¿Para qué me lo dices ahora si ya arruinaste nuestra vida? ¿Por qué quieres intentarlo si lo único que lograras es estar viudo? Creo que debes empezarte a hacer la idea de que en unos cuantos meses más no estaré aquí—Un nudo se formo en mi garganta, pero logre pasarlo y hablar sin la voz entre cortada—. Puedes irte con Rose. Y llegar a la hora que quieras.

Me quede viéndolo un momento para luego irme a mi habitación a encerrarme. ¿Por qué mierda había dicho eso si no era cierto? Lo que en verdad quería era disfrutarlo por el pequeño tiempo que me queda, pero por otro lado no quiero permitir que ‘‘Juegue’’ conmigo. Es un dilema el cual no puedo descifrar. Mi orgullo y mi ego no me permiten quererlo y ser feliz. Lo único que quiero ahora es un abrazo, y más de él. Pero la he cagado completamente y sé que algún día me arrepentiré de ello, pero igual, nada le gana al orgullo.

 

Me tumbe en mi cama y me llego un  SMS de mi mejor amiga.

‘‘Hoy hay party. ¿Vamos?’’

¿Estaba loca? Creo que olvido que llevo dentro de mí a un bebé.

‘‘¿Cómo se te ocurre, estúpida?:-( Tengo a un bebé dentro de mí,  ve tú y diviértete mucho. Llévate a Ashton, por fa.’’

‘‘No seas amargada. Vamos, doña. Se podrá fregón, vienen desde las Vegas. Así que iremos quieras o no. No te preocupes por eso, no tomaras alcohol y no se te ve tu panza. Así que alístate que en una hora y media paso por ti;)’’.

No me quedo de otra así que me metí a bañar y deje que el agua quitara todos mis estreses, quería olvidar todo por un momento, aunque fue imposible pero trate. Salí de la ducha y busque en mi armario una playera holgada, unos Jeans y mis toms. Me vestí casual. Me alacié el cabello y lo dejé suelto, me maquille natural.

En media hora mi amiga estaba pitando fuera de mi casa. Tomé mi bolso y camine hacía la puerta.

—¿A dónde vas?—Me pregunto Ashton con recelo.

—Iré a una fiesta. Se hace tarde, adiós.

—Espera, ¿A dónde?

—No sé, adiós.

Me salí corriendo  y me metí al Jetta.

 

—Waou, que guapa—Dijo mi amiga para luego arrancar su carro.

Llegamos a la fiesta, que en realidad era en una discoteca, no había mesas ni sillas. El sonido era demasiado fuerte y las luces eran de todos colores, el lugar estaba oscuro. Los Dj’s que venían, vienen desde Las Vegas. En realidad era un sonido, pero ese provenía de Las Vegas, tocaban en fiestas y discos y así. Nos adentramos entre la gente y la música sonaba más fuerte. Nos encontramos a Sam y a Karla, unas viejas amigas de Séptimo grado.  Comenzamos a bailar, hacía tanto tiempo que no me divertía tanto. El cabello se me pegaba en la cara y el sudor era infernal, estaba muy caliente todo. Salía humo blanco del escenario y entonces me maree. Le dije a Alice que iría a tomar aire.

 

Salí del círculo y rodee la pista. Mi vista se dirigió al tipo que estaba sentado en un escalón con una chica, y en realidad era Ashton y Rose. Estoy segura que se estaban besando y luego él me vio.