Era la primera vez que el hombre más fuerte de la humanidad se embriagaba. Se había bebido cuanta botella de licor había encontrado. Por primera vez, me sorprendía con algo que nada tenía que ver con sus habilidades de pelea.
Su cara estaba roja, parecía que tenía fiebre, su respiración era difícil, su pecho subía y bajaba y tenía la mirada pérdida en el techo de su habitación...
—Levi...— lo llamé, me dirigió una mirada tan intensa y sugerente que me sentí algo intimidado.
—¿Que quieres? — me dijo y se levantó de su silla.
—Ya has bebido mas de la cuenta ¿no crees?— dije nervioso acariciando mi cuello.
—Si... Creo qué esta vez no me medi...—
Se sentó junto a mi en la cama.
—Estoy cansado — mencionó de pronto —todo esto esto esta matándome lentamente. No puedo con esto...
—Quiero que tomes unos días de descanso, yo me haré responsable de eso... La verdad te exijo más de lo que puedes dar...
—No hablo de ese cansancio... Estoy harto de fingir...
Se trababa un poco al hablar y le costaba trabajo mantenerse equilibrado.
—Nunca has fingido, siempre has auténtico contigo mismo y con los demás. El Levi que veo ahora, no es diferente del Capitán de la Legión...
—No... No estás entendiendo... — su cabeza cayó sobre mi hombro al tiempo que soltaba un suspiro.
—¿Quieres explicarme? — pedí.
Estaba tan cerca de mí... Su boca entreabierta... Estabas siendo cruel al mostrarte así de indefenso frente a mí.
—Levi...—
—¿Que harías si me enamoro?— dijo.
Su voz fue apagándose, el sueño estaba ganandole, y aveces solo decía palabras sin sentido.
—¿Debería decir algo al respecto? Es normal qué te enamores... Aunque dada la situación...—
—Como decirlo... Me enamoré, pero dudo que esa persona sienta lo mismo por mi, así qué al final, no tiene caso se sentirme así.
—¿Asi cómo? — quise saber e instintivamente lo tomé por los hombros obligándolo a que me mirara.
—¡Hey...!
Levantó su mano y la llevó hasta mi rostro.
—Tu nunca te enamorarías de mi...
Tomé sus manos. Seguro estaba tan ebrio qué ya no sabía lo que decía.
—Estas delirando... No sabes lo que dices...—
—Estoy ebrio, no tonto— me dijo y bajo la mirada — no espero que sientas lo mismo... Me basta con estar a tú lado... Me basta con qué seas tú quién me siga dando razones para viviendo... eres todo para mi... Erwin...
Se soltó de mi agarre y se levantó. Intentó mantenerse en pie, sin embargo apenas y podía levantar éstos.
Lo sostuve por la cintura, evitando que cayera al suelo.
—No me importa si no me amas... Puedo entenderlo, pero yo seguiré haciéndolo...
Parecía qué sus fuerzas lo abandonaban. Para ser pequeño y delgado, su cuerpo era pesado.
Lo giré a mi y pude ver que de sus ojos escapaban lágrimas.
—Levi...
—¿A quién engaño?— lloró — Duele amarte en silencio... Duele tenerte cerca y saber que debo verte como el Comandante de la Legión... Me duele conformarme con solo mirarte... Pero ¿que puedes saber tú de esto...? Renunciaste al amor por "la libertad de la humanidad"
Seguía frente a mí, sin mirarme.
Podía entender perfectamente lo que sentía, pero sus palabras estaban resultando algo duras. Tanto como para él, como lo eran para mi... Pero ¿Eran duras porque eran ciertas, o sólo porque yo lo creía así?
—Maldición... — susurró — no debí... Decir nada... Ni beber...
—Levi...
—Mejor... Me voy...
—Es tu cuarto...
No estaba oyendome, eso era seguro.
Intento dejar su habitación, pero lo detuve y me deje caer con él sobre su cama.
—Estás en tu cuarto — le repetí.
Cubrió su rostro y su pequeño cuerpo se estremecía debajo de mí.
El hombre más fuerte de la humanidad, ahora solo era un simple humano que sufría se amor por mí...
—Demonios Levi... — lo regañe — ¡¿Porque haces todo a tu maldita manera?!.
Hundí mi rostro en su cuello, aunque olía a alcohol, su olor a utensilios de limpieza era inconfundible.
—¿Y qué esperabas?— me respondió — cada maldito día debo reprimir mi impulso de abrazarte... De querer estar siempre y cada momento junto a ti... No es justo...—
—¿No tengo el poder para leer mentes, ¿como iba a saber que te sentías así? De haberlo sabido no estrías sufriendo... No eres el único que se siente así... ¿Sabes? No eres el único que reprime sus impulsos... ¿Tenías que estar ebrio para decir todo esto?
Por un momento no lo escuché. Pensé que se había dormido, y no me hubiese extrañado. El agotamiento físico y ahora con el alcohol...
Se giró conmigo sobre la cama y ahora era él quién hundía su rostro en mi cuello.
Ya no me contuve, lo estreche entre mis brazos.
—Te quiero Levi... — murmure — te quiero...—
Mis manos recorrían su espalda por debajo de la chaqueta y por encima del sistema de correas.
—Gracias... Sé que no me quieres como yo... Pero es lindo saber que ese corazón que tienes, aún es capaz de querer...
—Ahora eres tú quién no está entendiendo — lo interrumpí — te quiero del mismo modo que tú me quieres a mí —
Nos quedamos así un momento, sintiendo el calor del otro.
—Mirame— pedí, necesitaba ver esos hermosos ojos verdes.
Su carita llorosa me devolvía una mirada sonrojada.
—Te traeré un café, lo necesitas —
—Sólo te necesito a ti, Erwin —
—¿Puedo quedarme contigo ésta noche?— acaricie su suave cabello negro.
—No. No quiero que te quedes esta noche — me dijo y nos sentamos en la cama, con Levi sobre mi —No quiero qué te quedes esta noche...quiero qué te quedes conmigo mientras sigas con vida —
Otra vez tomé su rostro y esa boca que por tanto tiempo desee tomar, al fin se me permitía hacerlo.
Pensé qué como era nuestro primer beso, iba a ser tierno, pero parecía que ambos queríamos devorar la boca del otro.
—Ya no vuelvas a guardarte nada, y cuenta conmigo para lo que necesites —
Y tras quitarle la chaqueta, las botas y el sistema de correas, nos metimos a su cama, pues Levi se durmió al fin en mi hombro.
—Te amo Erwin...
Fue lo último que me dijo.
—Y yo a ti... Pero te lo diré cuando despiertes mañana... Levi.
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Historias Cortas "Shingeki no Kyojin" (Erwin x Levi)
FanfictionComo suelo escribir bastantes cortos, decidí publicarlos aquí y así no esparcirlos por la cuenta. Espero sean se su agrado. Muchas gracias.