La padawan de Ahsoka Tano [CANCELADA]

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-Separación-

Los cielos terminaron de oscurecerse al momento en el que la marca de Jedy dejó de arder. En silencio, tanto el castaño como la pelinegra permanecieron abrazados, de instante a otro Jedy terminó por dormirse en los brazos de Arthur. Segundos después el moreno de Kai comenzó a descender de arriba de la rocas y al estar a una distancia discutible entre él y la espalda del castaño, alzó su arma y se colocó en posición.

Las últimas imágenes en su cabeza de Venn siendo ahorcado por Arthur le era causas de la desconfianza que sentía hacia él, además del miedo al ver a la pelinegra en sus brazos cuando el señor oscuro se giró y encaró al moreno. Lo había escuchado cuando el pequeño comenzó descender, así que se había levantado de antemano.

Gracias a la oscuridad el moreno solo lograba percibir las siluetas de las personas, así como de las rocas, pero bien sabía de quienes trataban, tomó una linterna y la encendió dirigiendo la luz a dónde estaba Arthur, le sorprendió el gran cambio de imagen presente en su persona, su piel dejó de ser pálida e infectada de venas negras para ahora presentar un color bronceado. Aún así, lo hecho, hecho está y la confianza está más rota que el brazo de Jedy cuando estaba en Lothal.

—¿Que le has hecho? ¡Suéltala o te disparare, sé cómo hacerlo! —, amenaza el moreno.

—Los imperiales seguramente no tardarán en llegar, así que hay que escapar.

—No me ignores, Arthur.

—No le he hecho nada, se los explicaremos más tarde.

Kai dudo unos segundos que, debido a la intensa incomodidad entre ambos, parecieron horas, miró el rostro y los ahora ojos azul verdes de Arthur para bajar su mirada a Jedy dormida en los brazos del castaño. Apretó su labio indeciso, al final grito frustrado mientras guarda sus armas.

—No habrá segunda vez, Kai.

—No me llames por mi nombre, esto lo hago por ella.

Los dos escalaron las rocas teniendo cuidado de no perjudicar a la pelinegra que estaba inconsciente, la subieron a la nave y acostaron en la cama de su cuarto, antes de que la nave se alzara para salir de Jedha, esta sufrió se tambaleó fuertemente y era, de alguna forma, arrastrada de nuevo al cañón. El castaño de Arthur corrió hasta la cabina del piloto solo para confirmar la idea que tenía en mente, el hijo estaba deteniendo al furtiva de avanzar.

—En cuento te liberes sácalos de aquí.

—¿Que hay de ti? Jedy des...

—Ella estará bien...

Lig no apartó la vista del castaño hasta que desapareció, la crodu'ji abrió la puerta del hangar para dejar salir a señor oscuro de la nave y así lo hizo, de un saltó se bajó de la nave y cayó al suelo aterrizando con un giro. Rápidamente se levantó y buscó con la mirada la montaña donde estaba el enemigo, aceleró en cuánto la localizó y brincó entre las pequeñas salientes de las paredes rocosas del cañón hasta llegar arriba. No perdió tiempo y rápidamente se preparó, se colocó en guardia y encendió su sable luz rojo.

El hijo estaba dándole la espalda, pero se notaba que se encontraba muy débil, su ropa estaba rasgada, sucia a causa de tierra y sangre. Él se dió la vuelta encarrando a Arthur dejando ver las múltiples heridas en su cuerpo, su frente tenía un gran golpe que aún derramaba sangre, una de sus manos estaba completamente rota  mientras que la otra la sostenía, se encontraba encorvado y jadeante mientras que sus ojos estaban completamente rojos.

Un rojo brillante e inquietante.

—Tu... Maldito...

Hablaba con dificultal, la voz que aquel ser se escuchaba tan oscura y seguida por el enojo y la ira. Preparándose Arthur achicó la mirada sin desviarla de la persona que tenía en frente, se colocó en posición de ataque y subió la guardia.

—¡Tu cuerpo me pertenece! ¡Tú nunca debiste existir! Pero por alguna razón la fuerza me quitó del camino ¿Por qué? ¿Por qué? ¡Yo soy la oscuridad!

—La muerte de tu hermana no es culpa mía... Tampoco la tuya —, contestó el castaño —, si buscas a Anakin Skywalker, él pereció junto a la orden Jedy cuando el imperio se levantó.

—¿Cómo...

Arthur sonrió de una manera retadora, cuando recuperó su memoria no fue solo eso, sino que también tuvo una gran visión de su propósito, llamándolo de determinación y una razón por la que expresar su propia voluntad.

El agarre se deshizo y entonces la sombra furtiva desapareció en el cielo.

Poco a poco su mente fue retomando conciencia y mientras aún no despertaba del todo, por sus pensamientos pasaron los sucesos recientes en Jedha. Su estado medio dormido no la dejaba razonar del todo bien, así que los recuerdos pasaron como simples sucesos por su cabeza sin importancia, todo lo contrario.

—Jedy...

La voz de una mujer la cual desconocía provocó el ella una corriente haciendo que se despertará de lleno, el golpe de la realidad cayó sobre ella. Hizo un intento de levantarse pero al hacerlo un fuerte dolor en su cabeza se lo impidió, gimió del dolor y se recostó lentamente sobre la cama una vez más.

Llevó sus manos a su frente y comenzó a sobarse, esperaba con ansias la voz de Arthur reclamando cualquier tontería, pero nunca llegó, abrió sus ojos para buscarlo pero estaba sola en la sala de enfermería de la base rebelde.

¿Ya estaba allí?

Tal vez se encuentren interrogandolo por lo que pasó allí, se preocupó al pensar qué tal vez tomarían como una broma el control mental de un señor oscuro, ella lo haría. Se levantó a cómo pudo y se dirigió a la salida de la enfermería, su cabeza comenzó a dolor a tal grado que provocaba un gran mareo en ella, su vista se tornaba borrosa y no fue hasta que vómito que se dió cuenta de que su estado era peor de lo que ella imaginaba.

Afortunadamente la puerta se deslizó y apareció tras ella la togruta de Ahsoka, preocupada por la escena de su padawan, ella se adentró a la sala e hizo que se encaminará a la cama. Comenzó a regañarla mientras le acomodaba el suero y la recostaba, le reclamó su mal estado junto con el fuerte golpe en su cabeza que tenía, afortunadamente no requería de alguna cirugía.

—¿Donde esta Arthur? —, preguntó Jedy.

Ahsoka se sentó en una silla en silencio, eso preocupó a la padawan que insistió una vez más.

—Él no llegó aquí.

—Ahsoka, él estaba conmigo, superó el control del Hijo y...y...

—¿Del Hijo?

Ambos par de ojos azules se cruzaron, los de Jedy expresaban temor y los de Ahsoka estaban confundidos.

@@@

Me dio flojera detallar la pelea entre Arthur y El Hijo :v

Además de que me tarde el actualizar, perdón xd

Espero que ahora que ya salí de mis cosas religiosas ya pueda volver al ritmo habitual.

¡Me entró un bloqueo artístico! Y por eso no había podido escribir nada, mucho menos dibujar :v

Que la fuerza los acompañe.