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Busan, Corea del Sur
6 años atrás, hogar de la familia Kim

—¿Por qué lo haces, Taehyung?

—¿Por qué me lo sigues preguntando?

—¿Por qué me besas los labios?— el menor bajó un poco la cabeza y negó mientras algunas lágrimas escurrían por sus mejillas — Me confundes demasiado.

—Es solo... amor de hermanos, ya te lo dije.

—¡Eso no es verdad!

—¡Que sí!

—¡Los hermanos no se besan los labios! — exclamó furioso el jóven de cabellera negra mientras daba un leve empujón a su hermano.

Taehyung soltó un suspiro y se sentó en el borde de la cama, golpeó un par de veces el colchón a su lado, invitando a Jungkook a sentarse junto a él, pero el menor no aceptó la petición y se mantuvo de pie viéndolo fijamente, así que Taehyung soltó otro suspiro y bservó por un momento sus manos, como si fuesen lo más interesante del mundo... ¿Cómo debía empezar? ¿Cómo debía decirle a su hermano menor que se había enamorado de él, desde que eran tan solo unos niños? El simple hecho de decirlo en su cabeza ya lo hacía bastante malo, como para ahora tener que decirlo en voz alta.

—Escucha, si te digo lo que realmente siento... ¿Podrías aceptarme?

Jungkook se mantuvo en silencio, no comprendía las palabras que había utilizado su hermano, ¿Aceptarlo? ¿Lo que realmente sentía? Sin embargo, aquel largo silencio hizo que Taehyung​ soltará una risa sin ganas, negó con la cabeza y se levantó.

—Eso pensé.

El chico de cabellera castaña empezó a caminar hacia la puerta, pero fue detenido por una mano sobre su hombro. Se dió la vuelta y miró a Jungkook fijamente, sintiendo su corazón latir más rápido, y no supo si fue solo por verlo, o porque estaba muy cerca.

—Entonces dímelo.

—¿Qué?

—Dime qué es lo que sientes realmente.

Y en ese momento, el mayor sintió su cuerpo temblar, tragó en seco y se quedó parado, inmóvil, solo observando el rostro serio de su hermano.

—Bueno, — comenzó aclarando un poco su garganta — Jungkook... Yo... Yo te amo. — dijo por fin, sin embargo, el menor se quedó en la misma posición y con el mismo gesto en la cara.

—Yo también te amo Taehyung, eres mi hermano, pero eso no explica el porqué me besas cuando se supone que los hermanos no deberían hacerlo.

El mayor se soltó del agarre del menor y negó con la cabeza mientras se iba acercando. Lo rodeó con sus brazos y lo pegó a su cuerpo, aunque dolorosamente para él, el abrazo no fue correspondido.

—No lo entiendes Jungkook, esto va mucho más allá de un amor de hermanos...

—¿Qué quieres decir?

—¡Que me gustas!... Que estoy enamorado de ti ¡Dios! ¿Qué nunca lo has notado?— proclamó un poco desesperado empezando a alejarse nuevamente mientras comenzaba a caminar en círculos por toda la habitación. Y al mismo tiempo, Jungkook se mantenía totalmente estático.

—P-Pero Tae...

—No digas nada. Sé que está mal y que nunca podríamos llegar a ser una pareja como tal, pero, ¿Cómo puedo deshacerme de estos sentimientos?— la voz del mayor se quebró y se recargó en la pared mientras sentía como las lágrimas lentamente abandonaban sus ojos — Te amo Jungkook... Y no como hermano, si no como hombre. ¿Dime qué hacer? Dime que jamás me corresponderías para que deje de hacerme falsas ilusiones en la cabeza. Dime que estoy loco y que me detestas, que te doy asco por enamorarme de ti... — pero el menor se mantuvo en silencio solo observando — ¡Dime algo! ¡Mierda!

Taehyung​ se dió vuelta y quedó de frente a la pared, con su frente recargada en la dura superficie, dejando salir todo lo que tenía acumulado en pecho. De pronto, sintió unos brazos rodear su cintura, Jungkook recargó su mejilla en la espalda de su hermano y cerró los ojos, sin decir nada, solo disfrutando de la cercanía.

—Jungkook...

—Shhh— el menor soltó un suspiro y dejó un beso en la espalda de Taehyung — No me das asco, ni tampoco te odio... Te amo Taehyung, más que a todo en el mundo y no quiero alejarme nunca de ti— se detuvo un momento como pensando en lo que diría a continuación, y tras un breve suspiro finalmente habló— Quizá este mal pero, ¿Podemos intentarlo?

El mayor se giró bruscamente ante la pregunta, con su rostro reflejando total sorpresa, tanta que buscó en la mirada de su hermano falsedad, pero no la encontró, solo vio un brillo especial iluminar sus ojos.

—¿Estás hablando enserio?

—Muy enserio.

Jungkook​ pudo apreciar una hermosa sonrisa formarse en los labios de su hermano, una sonrisa única. Y después de eso, ambos se fundieron nuevamente en un beso, un verdadero beso que transmitía los sentimientos que tenía uno por el otro. Un beso donde ya no eran solo dos hermanos, si no dos jóvenes enamorados.

Amor de hermanos || VKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora